Entre los afectados que se presentaron como denunciantes se encuentran los dirigentes del Partido Obrero Gabriel Solano y Néstor Pitrola, y el ex presidente de la FUBA y actual consejero superior de la UBA, Alejandro Lipcovich. Solicitaron al juez que se precise la fecha en la que Balbuena inició su tarea de espionaje, su ámbito de actuación y las tareas que le fueron asignadas por sus superiores y que se informe asimismo el número y ámbito de actuación de todos los agentes de inteligencia a cargo de la Policía Federal.
“Vamos por la imputación penal de Balbuena y de sus superiores jerárquicos”, señaló Solano y agregó: “lo de Balbuena se suma a las revelaciones sobre el programa de espionaje e infiltración en organizaciones populares a cargo de la Gendarmería conocido como ‘Proyecto X’. Existe un permanente ‘Estado de excepción’ contra los luchadores, organizado desde el gobierno. El pase a disponibilidad de Balbuena que dictó la ministra Garré es un intento por desviar su propia responsabilidad sobre este ataque ilegal a las libertades democráticas más elementales”.
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