Por Elvio Mendioroz
Carmen de Patagones.-
El mismo día que el Gobernador Rionegrino nos hechizaba con la privatización estatal de la minería del agua envenenada, toneladas de la lana eran exportadas sin valor agregado alguno; los valles esteparios iniciaban su sequedad; la oferta turística Somuncura comprobó su quiebre; la sociedad de la Región Sur mordió en sus hijos la destrucción de sus campos, la sed de los animales, el desquicio social; el pueblo originario recordó su cruento arrasar.
El mismo anuncio de gobierno comprometió más agua para sus "nuevos socios" de la mina de la República China en Sierra Grande. Pasa que tras secar el Arroyo Los Berros, precisan ahora de el agua del río Negro, cauce hídrico de bajo caudal sometido a las represas, donde las algas mezcladas con químicos industriales, filtrados petroleros, sumideros agrotóxicos y efluentes cloacales, servirá también para hidratar la vitalidad del hierro chino, jocosamente también rionegrino.
¡Cuánto subestimar social! ¡Cuánto desprecio y desaprecio por nuestra maravilla natural!
Sepa el Gobierno de Río Negro que el Agua es de la Vida; y para la Vida; y no más.
Editoriales ANP
