“Pueden llegar a sentir la belleza de un manuscrito que se les lee, pero no osan declarar en su favor hasta que hayan visto su curso en el mundo y escuchado la opinión de los presuntos competentes; no arriesgan su voto, quieren ser llevados por la multitud. Entonces dicen que han sido los primeros en aprobar la obra y cacarean que el público es de su opinión”
La Bruyére, “Caracteres”
A vos, triste y tímido cuervito que se esconde tras la protección de la culpa ajena de un puestito de funcionario público hiper-asalariado. Cuervito de alas rotas que lejos de volar bajo, arrastra las plumas en la mugre dejada por las promesas incumplidas, por beneficios propios tan deseados, que son solo el desperdicio de los que te manejan. ¡Si aunque sea pudieras volar bajo!, allí podrías encontrar la verdad que profesaba Facundo. O si pudieras volar tan alto con la humildad de tu soberbio primo de collar blanco, quizá pudieras también rozar las nubes de la razón. Tu corazón, lejos de latir, apenas se retuerce en tu gélido pechito, impulsando esa viscosa substancia de un dudoso marrón fecal que recorre tus venas.
A vos, ánima temerosa, ambulante en las noches tormentosas del bien común. Con tu capa de superhéroe, esa que usas para ir a los asados de amigos de miércoles, sacrosanto momento semanal de liberación machista, eyaculación precoz de toda la testosterona que tu jefe te hace tragar a cambio de esas monedas a fin de mes. ¡Poné huevo macho una vez en tu vida!, despertá de tus sueños fantásticos, escuchá a Atahualpa, tirá el CD de Lady Gaga que escondés en la guantera. Abrite las venas con Galeano en vez de anestesiarte a muerte con la Viva del domingo o hacerte el coco con las modelos del catálogo de Ladrónima. Largá el “ferné con Coca, no con Pecsi que no es lo mismo” y tomate un buen tinto, y que te arda el garguero para gritar con voz de macho “¡¡¡Ahora si voy a tomar postura!!! ¡¡¡ FUERA DE LA PAMPA DE LUDDEN CARAJO!!! ¡No me importa lo que piensen de mi Ladinerías del Pesito Masomeno ni Pepe Peladiño!, ¡Carajo!
A vos, “pinochezco” muñeco de nariz larga y tranco corto, nada va a pasar si decís “NO”, nada va a pasar si decís “SI”, no tengas miedo que la vida sigue, es preferible elegir la posibilidad de equivocarse mal a preferir no equivocarse. Si mirás Tinelli y sabés que te perdés un soberbio documental en Nat Geo o en Encuentro, salí a la calle con el tinto en la mano y la camisa abierta y gritá “¡¡¡ME BANCO AL NABO DE TINELLI PORQUE ME ENCANTAN LOS CULOS!!!”, pero con orgullo, alguno te va a aplaudir. Nada peor que un adicto y a la vez negador de inconmensurables asentaderas bailarinas de patéticos e innecesarios meneos.
A vos, que nunca participaste pero protestás cuando deciden en contra de tus intereses, empezá a volar, despegá tus apéndices testiculares del magnetismo terreno de la desidia mediocre de la multitud obsecuente a la opinión mayoritaria y decí: “¡¡¡SOY EL POPEYE DE LAS DECISIONES NAVEGANDO EL MAR DE LA MEDIOCRIDAD Y ME ACABO DE HACER UN ENEMA DE ESPINACAS!!!”…y oponete a la estafa popular en la Pampa de Ludden, tomá postura, no te dejes vacunar contra tu fiebre de libertad.
Editoriales ANP
