Por Diario del fin del mundo
Con pocas cosas en el escenario, con tradiciones, canto, música y una fuerte defensa de sus orígenes, mostró la vida y dificultades que tienen los integrantes de los pueblos originarios.
“Es bueno mirarse en la propia sombra” fue puesta en escena en el gimnasio de la escuela Nº 13 Guillermo Brown de Ushuaia, en el homenaje a las mujeres, que organizó la Subsecretaría de Cultura de la Provincia.
La actriz mapuche supo transmitir en cada cuadro con total naturalidad lo que padece su pueblo en la vida cotidiana y exhortó a cuidar la tierra, respetar a los antepasados, la cultura de su pueblo y a “todas” las personas, sin importar la condición.
La mujer sencilla con más de sesenta años, danza, canta y representa a distintos personajes en el unipersonal y demuestra una vitalidad que nadie imagina que tenga más de medio siglo. Ella con su figura pequeña, nostalgia y con la mirada triste por el dolor que siente, logra meterse entre el público ofreciendo pedazos de pan (un bollo) que horneó y que la “patrona” de su hija no quiso recibirle, en la escena. Las mujeres de la primera fila, un ama de casa, una obrera y empleada de un frigorífico le reciben el trozo de pan.
En su obra, Calcumil hace una fuerte crítica a los poderosos capitalistas que arrasaron con las tierras y a los que maltratan a los descendientes de pueblos originarios. Pone en tapete la discriminación y dolor que sienten los mapuches con la indiferencia, con los atropellos a su lugar de origen, sus creencias y su cultura.
En cada cuadro expresa con total naturalidad las distintas situaciones de violencia y transmite con emoción, de manera que mueve las fibras de los sentimientos profundos y la sensibilidad de los espectadores.
Al final de la puesta en escena de “Es bueno mirarse en la propia sombra” Calcumil agradece al público y a los que hicieron posible su presentación. Cuenta preocupada la lucha incesante de los pueblos originarios por su cultura, tierra y respeto por sus ancestros. Y cuestiona la cultura extranjerizante que avanza en la Región y la Nación.
El público elogió el unipersonal de la mapuche y respondió con encendidos aplausos.
“No hay ley que ampare y ahora sestá la Ley de relevamiento Territorial que es muy importante par todos aquellos que hacen muchos años que viven acá. Pero también es cierto que vienen muchos extranjeros a comprar territorio y nunca se sabe cuánto lo pagan”, explicó a EDFM.
Por otra parte, Calcumil consideró que “las mujeres en Argentina se avanzó mucho y ha logrado con tanta lucha equipararse más al hombre”.
Recordó que hoy en nuestro país se ve a las mujeres en roles importantes en el campo de la ciencia, la educación, en salud, la provincia y en la presidencia del país.
“Creo que es parte de un proceso de un país que fue considerando esto, y con más educación y mucha discución poder trabajar a la par del hombre. Siento orgullo de trabajar en este país donde todavía se lucha y se puede cambiar la historia”.
Con respecto al clamor de los pueblos originarios Calcumil expresó que “tenemos vida en esta tierra, no estamos solos y no nos gobernamos solos y no nos referimos a la autoridad política, sino a lo espiritual, a la naturaleza que nos está pegando un tirón de orejas, para el cuidado de la naturaleza”.
Exhortó a hombres y mujeres a cuidar el planeta y la naturaleza.
Gobierno de Tierra del Fuego Declararon “huésped de honor” a Calcumil
La subsecretaria de Cultura de la Provincia, Graciela Iturburu, entrego a Luisa Calcumil copia del decreto en la que se declara a la actriz y cantante mapuche “huésped de Honor” de Tierra del Fuego.
Iturburu destacó la labor artística de la mujer mapuche y con respecto a la obra unipersonal de Calcumil dijo que “sus sencillas palabras dijeron verdades, porque tienen el sentimiento de lo popular”.
“Luisa nos dejó el mensaje de mirar aquellas hipocresías que, a veces, nos parecen naturales de la vida cuando estamos manejando cuestiones que no son verdaderas y de las que no queremos darnos cuenta”, puntualizó Iturburu.
Asimismo, subrayó que se trata de “una mujer encantadora que tiene bagajes desde sus raíces, desde su cultura mapuche, su palabra humilde, lenta pero profunda”.
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