miércoles, 13 de octubre de 2010(ANS).-
Escrito por Roxana Randi
Las redes de trata secuestran a diez mujeres y niñas/os por día
Trata de personas. Cientos de mujeres son desaparecidas en democracia con la complicidad de las fuerzas policiales, el poder político y judicial (Foto: Lizbeth - Colaboración para ANS)
Una de la problemáticas más urgentes que se hizo presente en el XXV Encuentro Nacional de Mujeres fue la trata de personas, tema que está entre las principales preocupaciones de las miles de mujeres movilizadas hasta Paraná. Actualmente, se estima que cada día diez mujeres, adolescentes, niños y niñas son secuestradas, trasladadas y esclavizadas, según datos manejados por las organizaciones de mujeres que luchan contra la trata. Y lo más grave es que las redes de trata funcionan con complicidad del poder político, el poder judicial, las fuerzas de seguridad y los medios de comunicación masivos. Como en otras problemáticas sociales, en este sistema capitalista las autoridades que deberían encargarse de hacer justicia son las responsables de la injusticia. Esta realidad dramática se reitera a lo largo de todo el país.
Las mujeres se organizan contra la trata de personas
En el marco del sistema capitalista, el patriarcado impone una triple opresión sobre las mujeres: de género, de clase y por etnia. La trata de personas, que somete a las mujeres a la esclavitud, ha operado sin problemas en los últimos 25 años y se ha recrudecido en los últimos diez.
Para que la trata de personas se sostenga se combinan varias causas. Operan en forma de red que secuestra y traslada a las víctimas en 48 horas. La principal causa para que las redes de trata sigan operando es que la trata de personas se ha convertido en el segundo negocio más rentable a nivel mundial después del tráfico y la comercialización de drogas. Otra de las causas fundamentales es que se sostienen a través de una red de complicidades que involucra al poder político en todas sus jerarquías, a la justicia y a la policía. La impunidad frente a cada mujer que desaparece refuerza a la red que continúa operando gracias a la protección política y judicial.
¿Qué significa la trata de personas?
La trata de personas no se reduce sólo a la explotación sexual de sus cuerpos, los secuestros se cometen para someterlas a trabajo esclavo en talleres textiles, en zonas rurales, para trabajo doméstico, y el turismo sexual; en estas formas de explotación también entran niñas y niños que son abusados por los pedófilos.
Las responsabilidades políticas abarcan a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y el presidente del Partido Justicialista, Néstor Kirchner, ambos cómplices de la red de trata más extensa de la patagonia argentina que opera en la provincia de Santa Cruz, y funciona desde la época en que Carlos Menem era presidente y Néstor Kirchner gobernaba Santa Cruz. Las responsabilidades abarcan a funcionarios y dirigentes políticos que han gobernado el país desde la vuelta de la democracia hasta la actualidad, incluyendo en la cadena de complicidades a gobernadores, intendentes, jueces, fiscales y policías.
En la provincia de Río Negro han llegado a secuestrar para la trata a una joven de 15 años que padecía de una discapacidad mental. Por este caso ha sido señalado como responsable Víctor Cufré, el ex Ministro de Defensa de la provincia patagónica. Luego de la denuncia lo premiaron ascendiéndolo para el cargo de Secretario de Seguridad y Justicia de la provincia de Río Negro.
La complicidad de los medios masivos de comunicación
Esta realidad está siendo ocultada por los medios masivos de comunicación que con su silencio cómplice fortalecen a la red de
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En el Encuentro Nacional de Mujeres la gran preocupación por esta nueva forma de esclavitud se vio representada por la masiva participación -más de 650 mujeres- en el taller de “Mujeres y trata de personas”. El taller tuvo que desdoblarse en 17 comisiones que funcionaron en forma simultánea porque de no desdoblarse era imposible garantizar el debate y las conclusiones.
El tiempo: un eje crucial para encontrar a las víctimas
Uno de los puntos centrales en la trata es el traslado. Las primeras 48 horas son cruciales, en esas horas se les corta la comunicación con sus familias y conocidos, evitando la localización de la víctima. Mientras, la policía dice que hay que esperar 72 horas para ver qué pasó antes de empezar la búsqueda. En las 48 horas iniciales trasladan a las mujeres secuestradas al exterior o a otras provincias perdiéndose el rastro de las secuestradas.
El caso de Marita Verón en la provincia de Tucumán es paradigmático. La madre de Marita no dejó de luchar, pero la lucha no puede encararse en forma solitaria porque la red de complicidades y la mafia incluyen el manejo de tanto poder por parte de los captores que logran aterrorizar a la población. De tal manera que la mayoría de la gente no se anima a declarar, ni a dar pistas de las desaparecidas por terror a las represalias mafiosas. Así sucedió en Tucumán con Marita Verón, donde gran parte de la sociedad tucumana sabía quiénes estaban detrás de la red, pero nadie se animó a declarar porque el jefe de la red de la zona manejaba el poder político, el tráfico de armas, drogas y hasta los negocios de las remiserías locales eran encargados de trasladar a las víctimas. El autor ideológico del secuestro y desaparición de Marita Verón es conocido como “la Chancha Ale”. La justicia no sólo no detuvo al mafioso, sino que la red de trata en Tucumán continúa intacta.
Zonas estratégicas del país donde funcionan las redes de trata
En el noroeste de nuestro país, en las provincias de La Rioja, Tucumán y Jujuy opera una de las redes más importantes. La frontera entre Argentina y Bolivia es estratégica porque por esa frontera han sacado del país a muchísimas jóvenes.
Entre las regiones de tránsito de la red de trata se ubica la ciudad de Paraná en la provincia de Entre Ríos, por allí trasladan a las chicas que son secuestradas para la trata y las sacan del país por la triple frontera de Argentina, Paraguay y Brasil.
Otra de las regiones estratégicas para la red de trata es la Patagonia, en las provincias de Neuquén, Mendoza, Río Negro, Chubut y Santa Cruz. Santa Cruz es la provincia patagónica en donde la red de trata está más arraigada y para que ello suceda existe la complicidad política de la familia Kirchner.
La trata de personas se ha convertido en un drama social, nunca antes en la historia las redes de trata se habían extendido tanto. Aún así ni el Estado, ni el gobierno se hacen cargo de tomar cartas en el asunto para resolver este problema social. Y no sólo que no lo caracterizan como problema social de gravedad a resolver, sino que el Estado proxeneta protege a los integrantes de las redes de trata y deja desamparadas a las víctimas.
En el año 2008 el parlamento nacional promulgó la Ley de trata Nº 26364. Ley que penaliza con cinco a diez años de cárcel a los secuestradores, penas que la gran parte de las veces ni siquiera se cumplen, dejando en libertad a los responsables ideológicos y políticos de la red para que sigan operando.
Las mujeres que sufren con más frecuencia el secuestro de las redes de trata pertenecen a poblaciones en riesgo o vulnerables, a una clase social trabajadora o sin empleo y humilde. La falta de trabajo aumenta el riesgo de las mujeres de las clases populares, las publicidades engañosas ofrecen trabajos que no son reales, mientras las mujeres se trasladan de su lugar natal para trabajar en una gran ciudad, o son secuestradas cuando concurren a ver el trabajo.
En otros casos son jóvenes que viven en las grandes ciudades, lejos de su grupo familiar porque han migrado para trabajar o estudiar; y son secuestradas por los captores. Este fue el caso de Florencia Penachi, una joven neuquina que estudiaba Ciencias Económicas en la Universidad de Buenos Aires, una noche salió a comprar cigarrillos y desapareció.
Reflexiones y líneas de acción para luchar contra las redes de trata
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En la calle. La movilización popular es la forma más eficaz de enfrentar a las redes de trata de personas. (Foto: Lizbeth - Colaboración para ANS)
Desde el taller Mujer y trata de personas las mujeres que participaron en él decidieron declarar que se exija al Estado que se haga cargo de proteger a las mujeres liberadas de las redes otorgando casas seguras donde poder vivir, para evitar que las liberadas sean recapturadas; que el Estado otorgue trabajo genuino, contención psicológica y social para las mujeres que han sido esclavizadas por las redes de trata; la derogación de la ley del año 2008 y la redacción de un nuevo proyecto de ley encargado a la asociaciones civiles que vienen trabajando en el tema de trata. También se hizo hincapié en que la mayor presión que puede ejercerse para frenar la trata de personas es con la movilización popular en las calles.
Se planteó la necesidad de exigir al Estado puestos de trabajo genuino para que las mujeres puedan sostenerse económicamente mediante un trabajo digno y no sufran el riesgo de ser capturadas mientras buscan trabajo. Solicitar a los organismos de derechos humanos y antirrepresivos que se sumen a la lucha por la recuperación de las mujeres secuestradas por las redes de trata; designar un día en la semana para que las mujeres de todo el país se manifiesten en las plazas centrales de las ciudades, en reclamo del desmantelamiento de las redes de trata. Crear una línea telefónica gratuita, a través de la cual las mujeres puedan recibir asesoramiento y contención psicológica ante una situación de vulnerabilidad, o la liberación de una mujer que estuvo secuestrada por una red de trata y no tiene contención.
Las nuevas tecnologías son una herramienta con la que la gran mayoría de los y las jóvenes están en contacto. Por el gran uso que hacen las/os adolescentes de las nuevas tecnologías se propuso elaborar un sitio web o blog, en el que se difunda información a las adolescentes para prevenir el secuestro en manos de redes de trata, y a la vez se denuncien en ese sitio web los casos de las jóvenes secuestradas. Se propuso informar a las adolescentes a cerca de los sitios web en los que no es recomendable subir fotos e información personal que luego puede ser utilizada por los captores para ponerse en contacto con ellas, engañarlas y secuestrarlas. Se hizo hincapié en el rol social de la educación, y se consideró necesario que en las escuelas se realicen campañas de prevención, información y concientización acerca de la forma de captación de las redes de trata, para evitar que las adolescentes sean posibles víctimas.
Además se evaluó la necesidad de concientizar a toda la sociedad en los espacios de trabajo, de estudio y de recreación como herramienta fundamental para ir socavando la cultura sexista que impuso el capitalismo.
Estas son algunas de las propuestas que elaboró el taller “Mujer y trata de personas”. Debido a la urgencia del problema se planteó la necesidad de elaborar una estrategia para trabajar una campaña nacional para la problemática de trata de personas similar a la que se lleva adelante por el derecho al aborto, con la certeza que si no hay consumo de prostitución, no hay trata de personas.
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