El intento de acercamiento entre el gobierno municipal y la comunidad Mapuche Paichil Antriao se rompió tras el incendio que destruyó la casilla del norteamericano William Henry Fisher, ubicada en la zona del conflicto que protagonizan privados por la posesión de las tierras y los Mapuche en la defensa de su territorio en el cerro Belvedere.
Por La Mañana de Neuquen
“La iniciativa del gobierno municipal era proveer agua a las familias y la disposición de un lugar para colocar los residuos por razones de salubridad”, explicó ayer el secretario de gobierno municipal, Ariel Domínguez.
Sin embargo, advirtió que “en base a los hechos que se conocieron en las últimas horas, las negociaciones con la comunidad vuelven a foja cero”. El incendio ocurrió el jueves antes de las 7, cuando la casilla de madera estaba sola. Su propietario, William Henry Fisher, se había quedado esa noche en la villa y subió a primera hora de la mañana y se encontró con el siniestro. Fisher regresó y avisó en la comisaría local del hecho. Personal policial y bomberos voluntarios se desplazaron hasta el lugar del siniestro, en el cerro Belvedere, pero el fuego ya había destruido la casilla.
El resultado de las pericias se conocerá la semana próxima, aunque todo indica que sería intencional. La Policía busca testigos pero hasta ayer nadie vio nada. La Fiscalía local investiga el hecho.
El incendio se suma a la denuncia de un joven que afirmó en un medio local que fueron agredidos el domingo por un grupo de jóvenes vinculados presuntamente con la comunidad Paichil Autónoma, que es un desprendimiento de la Paichil Antriao, pero que no está reconocida.
El incendio ocurrió al día siguiente de que un medio local publicara que el gobierno municipal y la comunidad Paichil Antriao intentaban un acercamiento.
“El esfuerzo del gobierno municipal fue para garantizar la paz social, que pide la comunidad de Villa La Angostura y fue una buena idea que tuvo un mal resultado”, sostuvo Domínguez.
La inan lonco Amandina Gutiérrez lamentó lo sucedido y reconoció que “estábamos en tratativas con el Gobierno”. “Sé que a Fisher le molestaban mucho las tratativas con el Gobierno”, apuntó. Pero admitió que “no pone las manos en el fuego por algunos”.
El secretario de Seguridad municipal, David Tressens, dijo que “con estos hechos de violencia nos tenemos que replegar porque no está garantizada la seguridad de los empleados municipales”. Tressens dijo que hasta hubo amenazas de muerte anónimas que se escucharon en algunas radios locales.
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“Esto traba el diálogo iniciado”
Lo sostuvo el secretario de Seguridad, David Tressens. El Ejecutivo Municipal expresó su repudio al hecho y suspendió las relaciones entabladas con la Comunidad Paichil Antriao. Desde la Comunidad sospechan que el atentado tuvo como objetivo arruinar el diálogo construido.
Por Diario Andino
El miércoles pasado este diario daba cuenta de un acercamiento entre el Municipio y la comunidad para llevar agua potable y realizar la recolección de residuos a las familias que ocupan lotes en el Belvedere.
En ese contexto, la comunidad se comprometería al cese de las hostilidades. Así lo confirmó días atrás el werken de la Confederación Mapuche Neuquina, José Quintriqueo.
No obstante, al margen de la comunidad se encuentra un grupo de jóvenes autodenominados “comunidad Paichil Autónoma” que protagonizaron los últimos hechos de violencia y que no pertenecen a Paichil- Antriao. Las miradas apuntan a ellos, aunque por ahora los autores son desconocidos.
Tras el incendio y la denuncia de unos jóvenes que habrían sido atacados con piedras por un grupo de personas en el acceso al Belvedere mientras paseaban en fourtrax, el Municipio decidió suspender el diálogo iniciado.
“Esto traba todo tipo de diálogo que se había iniciado. No se puede seguir trabajando cuando se producen actos de violencia. Nuestra intención era llevar asistencia por una cuestión humanitaria, pero no significa que lo reconozcamos como comunidad originaria ni que avalemos las ocupaciones”, sostuvo el secretario de Seguridad, David Tressens.
Respecto a la posibilidad de que el autor del hecho fuera otro grupo o persona no vinculada a la comunidad Paichil Antriao, Tressens aseguró que si se tratara de gente del grupo mapuche “autónomo”, en todo caso “es responsabilidad de la comunidad, para nosotros es todo un mismo grupo”.
Una de las representantes de la comunidad, Amandina Gutiérrez aseguró desconocer los hechos pero no descartó que pudiera haber sido un intento de romper el incipiente acercamiento con la comuna.
“Justo que empezamos el diálogo con el Municipio y estamos tratando de conseguir agua para las 30 familias que viven arriba, pasa esto”, dijo en tono irónico otro miembro de la comunidad Paichil Antriao.
Editoriales ANP
