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martes, 21 de julio de 2009

MOVILIZACIÓN A CASA DE NEUQUÉN POR FREDDY Y MARCELO

El Bolsón (ANPP).- Este jueves, a las 18, en Maipú 48, habrá una concentración para repudiar las torturas y persecuciones, así como el rechazo a su traslado a Chile, hacia los militantes chilenos Freddy Fuentevilla y Marcelo Villarroel, presos en Neuquén.
Hechos gravísimos sucedieron el martes 14 de julio pasado, cuando tras una visita a los anticapitalistas chilenos, prisioneros del Estado argentino en el penal Nº 11 de Neuquén, fueron detenidos cuatro compañeros suyos (de Chile, Francia y Argentina), amenazados y torturados por personal de la comisaría Nº 20 de dicha provincia.
Fueron sometidos a un intenso interrogatorio, debiendo soportar insultos racistas y amenazas de fusilamiento y de violación en el caso de las compañeras, hasta que por fin los dejaron partir, no sin antes advertirles que no volvieran a visitar a los presos o los fusilarían.
La hostilidad de los carceleros y la policía no termino allí, y en los días posteriores otros compañeros solidarios recibieron en sus barrios amenazas de muerte y demás intimidaciones.
"Sabemos que lo que los sirvientes del Estado y el capital persiguen con este accionar es frenar la creciente solidaridad con los compañeros Marcelo y Freddy, solidaridad que no entiende de fronteras ni de conveniencias políticas -expresaron sus compañeros de militancia-. No vemos este hecho como una situación aislada de lo que hoy se vive en esa provincia, sino que por el contrario es la continuidad de una política de terror y represión, que tiene en su historia el fusilamiento a manos de gendarmería del docente Carlos Fuentealba, bajo el gobierno de Sobisch, y que hoy continua, bajo el mando de Sarpag, dirigentes verdugos del mismo partido (MPN)."
Entendieron, además, que lo que se vive en la provincia de Neuquén es lo mismo que se padece en toda la Argentina, con cientos de asesinados desde el restablecimiento de la democracia, "con la desaparición de Luciano Arruga y de tantos otros, con las cárceles atestadas de presos sometidos a las constantes vejaciones de los guardianes de turno".
"Sabemos que todo Estado necesita de la violencia para mantener su existencia, y que toda disidencia real será reprimida y castigada."