Estupor y bronca son las primeras
reacciones que surgen cuando se confirma la noticia del fallecimiento en un accidente vial de dos
compañeras docentes.
El enojo aumenta de manera exponencial
porque ellas volvían a Comodoro Rivadavia luego de participar en una de las
tantas marchas que atraviesan a toda la Provincia del Chubut reclamándole a un
gobierno sordo e insensible el pago en tiempo y forma de los salarios
adeudados, todo esto en un momento en donde la economía de nuestro país aparece
como desbocada.
El enojo troca en furia porque esto,
cual broma macabra, sucede el mismo día que se dan a conocer aumentos
salariales decretados por parte del Sr. Gobernador, Esc. Mariano Arcioni, y por
los cuales la planta política provincial incrementa sus haberes en porcentajes
que van desde el 40% para el Director
General de la Casa del Chubut en Buenos Aires al 100% que el Sr. Gobernador se
otorgó a sí mismo.
¿Hasta cuándo vamos a permitir esto?
¿Cuánto tiempo más vamos a tolerar a dirigentes que aupados en resultados de
elecciones en las cuales engañaron al pueblo, no hacen más que servirse del
erario público en beneficio propio y de una banda de salteadores que los rodea?
¿Cómo es posible que una sociedad compleja como la argentina tolere mansamente
que la democracia se haya tornado en una burda y escandalosa plutocracia?
Compañeras y compañeros, la Seccional El
Bolsón de UNTER acompaña en este tristísimo momento a las familias de las
docentes fallecidas y, por carácter transitivo, a todos y todas los y las
compañeras docentes y estatales de Chubut que siguen firmes, sin aflojarles ni un
tranco a un gobierno de rufianes; porque ni más ni menos que eso son aquellos que
llevan a inocentes a la muerte aprovechándose de la necesidad y la
desesperación. En eso se han transformado, en una gavilla de matones que se
creen que han convertido un mandato popular en un cheque en blanco de poder
omnímodo.