En este sentido, Peña consideró que la provincia está “bastante complicada en relación a las políticas públicas con perspectiva de género y diversidad sexual”, por lo que la marcha contempla una recorrida por diversos edificios donde funcionan organismos públicos provinciales.
“Este año, al igual que el año pasado, se comenzó con la organización con asambleas transfeministas y lo significativo es que esas asambleas se fueron haciendo en distintos barrios de la ciudad, lo cual es muy enriquecedor porque nuestra aspiración es que siempre se amplíe la participación de otras mujeres de la ciudad, pero no siempre se animan, pero si se visibiliza qué está pasando en un barrio cuando vamos allí este grupo de mujeres, de una manera totalmente horizontal, como son las prácticas feministas, vamos organizando y vamos pensando cómo se organiza en nuestra ciudad el paro”, indicó Peña.
Agregó que “se organizó la marcha que tendrá un recorrido bastante interesante, porque saldrá de un barrio de Viedma, recorrerá distintos lugares, y además de la marcha habrá otras acciones como intervenciones y estas intervenciones tienen que ver como llegar a los lugares públicos, donde se desarrollan las políticas públicas de género y poder hacer intervenciones que visibilicen las cuestiones más importantes que nosotros queremos que se hagan notorias en relación a lo que está pasando con las políticas públicas de género”.
Respecto de la situación de la provincia, Peña expresó que “Río Negro está bastante complicada en relación las políticas públicas con perspectiva de género y la diversidad sexual. Hay un dato duro que tiene que ver con el presupuesto, donde Río Negro destina el 0,038% de su presupuesto global a las políticas de género, un presupuesto muy exiguo, y esto da cuenta de la poca importancia que se le da en la provincia a las políticas de género”.
“Las políticas públicas distan mucho de ser las que los organismos nacionales o las normativas nacionales y provinciales prevén para el acompañamiento de las mujeres en situación de violencia de género, para la visibilización de esta problemática, para trabajar en lo que tiene que ver con el antes de en el ámbito educativo, como la ley de educación sexual integrar, creemos que las políticas públicas dejan bastante que desear”.
Expresó que “las mujeres cuando viven situaciones de violencia o extremas, en esta ciudad o cualquier otra localidad, deambulan de una oficina a otra, con muy pocas respuestas del Estado en relación a las problemáticas que padecen”.
Finalmente, Peña destacó que en la movilización del 8 de marzo “se marchará hasta el mural de Silvia Vásquez Colque, que es una mujer que está desaparecida, que hay muchos indicios de que fue un femicidio porque vivió situaciones de violencia de género con su pareja, y de hecho una situación muy violenta de parte de su pareja que un momento la hirió con un cuchillo. Silvia desaparece en situaciones muy extrañas, por eso hay muchos indicios de que se trató de un femicidio”.
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