La acusación debe ser única, respetando el principio de congruencia, para garantizar los derechos de la persona que va a ser juzgada para que se pueda defender, explica. En principio no se puede modificar. En este caso la acusación es homicidio culposo del que se acusa a dos agentes policiales que fueron negligentes; se interpreta que no quisieron matar pero por su negligencia Garrido murió. Esa acusación que fue presentada originalmente por la fiscalía y la querella, sólo fue sostenida por la fiscalía en el alegato final.
Schifrin considera que el fiscal Martín Lozada no tuvo en cuenta la prueba que se exhibió en el debate, sino lo que ya estaba en el expediente. Desconoció una una prueba experta nueva aportada por la perito Creimer que modificó sustantivamente lo que constaba en el expediente. Recuerda el incidente que provocó el fiscal cuando pidió al tribunal que indique a la perito que se debía referir únicamente a la hipótesis de “homicidio culposo” con la que elevó el juicio, lo que obligó al tribunal a tomar un cuarto intermedio, para desestimar el pedido del fiscal Martín Lozada y autorizar la continuidad del testimonio de la perito.
La abogada de la querella relata aspectos significativos que salieron a luz, como la crítica muy detallada que hizo la perito Creimer de la primera autopsia que le hicieron al cuerpo de Garrido, de la cual sólo quedan fotografías papel.
La abogada señaló por qué considera que la querella no quiere que sean juzgados perejiles, sino que se remitan las actuaciones del debate a la Fiscalía para que se investigue a la policía por privación ilegitima de la libertad, tortura y homicidio doloso pero también por encubrimiento de funcionarios policiales, y judiciales, y también de incumplimiento de deberes de funcionario publico, deteniéndose en especial en describir la actuación de la dra. Pavese que fue quien constató la muerte.
“Todo este escándalo se vió en el debate”, afirma. Respecto de qué puede ocurrir con la actuación del tribunal que anunció que la lectura del veredicto será el 4 de diciembre, Schifrin señala que lo que ella solicitó al tribunal es que se haga una nueva investigación de homicidio doloso. El 4 en principio el tribunal dará el veredicto que significará la culpabilidad o inocencia de los dos agentes policiales enjuiciados, y se tomará cinco días para la lectura de los fundamentos. “Antes de que finalice diciembre podremos saber si el poder judicial está dispuesto a investigar el homicidio de Coco Garrido”, asevera, y concluye “Entendemos que hubo pruebas abrumadoras y un crimen de estado que debe ser investigado”
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