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miércoles, 6 de abril de 2016

FORMOSA: LOS DUEÑOS DE LA VIDA Y LA MUERTE.

El Bolsón (ANPP).-Tomado de APL.
Cristino Vidal Mendoza, Andrés Fermín y Amancio Reyes dejaron morir a mujeres y hombres originarios enfermos porque adherían a los reclamos de Félix Díaz

(APL)En Ingeniero Juárez, el ex intendente Cristino Vidal Mendoza y los agentes sanitarios Andrés Fermín y Amancio Reyes, son responsables directos, con premeditación y alevosía, de las recientes muertes por falta de atención médica de miembros de la comunidad wichí. “No la vamos a atender porque su madre está en el acampe de Félix Díaz”. Esas fueron las palabras del intendente en ejercicio de Ingeniero Juárez, Cristino Vidal Mendoza, el año pasado, al hermano de Ernestina Moreno, cuando Isabel Guillalba, su sobrina, llevaba días desangrándose en una camill. Tenía la mitad del cuerpo hinchado, no lo podía mover y estaba solo con un suero como toda medicación. La familia desesperada la trajo a Buenos Aires, pero era demasiado tarde, tenía ya un cáncer masivo de útero, jamás detectado pese a numerosas consultas al hospital, falleció el pasado 13 de marzo. Durante este año, los agentes sanitarios Andrés Fermín y Amancio Reyes no quisieron atender a Mercedes Moreno por ser tía de Ernestina, estaba simplemente con un pico de presión, no recibió medicación alguna y murió. Tenía 50 años. Se trata de una política de estado impulsada por el gobernador Gildo Insfrán para desaparecer a quienes no se someten.




Estos asesinos están enojados además porque cuando los hermanos no reciben atención, acuden a Ernestina quien pide ayuda, trata de conseguir los remedios por otro lado “se mete donde no se tiene que meter” y entonces ahora a todo el que se acerca a Ernestina o es pariente de ella, no recibe atención, los dejan que se mueran.
Y así fue como fallecieron este año cinco hermanos más: Marisa Frías por hemorragia, estuvo 6 meses sangrando fue al hospital, solo le dieron paracetamol, tenía27 años; Jones frías murió porque le reventó el pulmón, tenía 17 años; Sofía Torres se fue en una hemorragia, tenía 50 años y un sangrado de 5 meses que no quisieron atender; José Xilas por un problema renal y pulmonar 60 años, también sin que lo atendieran y Raúl García de solo 20 años por una peritonitis, pese a que fue al hospital a tiempo.

Actualmente hay en la comunidad muchos casos de mujeres con hemorragias de 4 a seis meses, mujeres muy jóvenes. En el hospital no les dan remedios, no las atienden. Hay también muchos chicos con hongos en pies, cuerpo y cabeza, muchos chicos con colitis, diarrea y vómitos, no les dan remedios, nada. Eso sí: cuando van a parir si las atienden, para poder hacerles una ligadura de trompas sin que las mujeres lo sepan.
No los atienden por el simple hecho de que se juntan en la casa de Ernestina Moreno, porque es una referente muy fuerte, que se preocupa y se ocupa, sin tener medios, hace lo imposible, entonces los hermanos se acercan, le consultan, le piden auxilio a ella. Ella intenta conseguir lo necesario y si las autoridades se lo niegan por haber estado en el acampe apoyando a Félix Díaz, reclamando por sus territorios, Ernestina recurre a Buenos Aires, lo que les provoca aún más ira.

Estos agentes sanitarios que se sienten dueños de la vida y de la muerte en Ingeniero Juárez son Andrés Fermín que tiene dos camionetas y el otro que se llama Amancio Reyes y tiene una cuatro por cuatro, vehículos que contrastan con la pobreza extrema de esos parajes. 

En este momento hay hermanos que están graves y sin atención por los mismos motivos:
Daniel Pérez de 20 años, tiene tuberculosis; Cesárea Juliani de 36 años hace 8 meses que tiene hemorragia, trombosis y bocio, sólo le dieron paracetamol, está muy delgada; Marcelina Torres lleva 6 meses de hemorragia, tiene 34 años; Patricia Ruiz hace dos meses que tiene hemorragia; Gabriela Torres tiene 26 años y hace 4 meses que tiene hemorragia; Alicia Moreno, hermana de Ernestina, lleva 5 meses de hemorragia y trombosis, tiene 34 años; una abuela de 70 años se cayó se abrió la cabeza le derivaron a Formosa y volvió porque nadie la atendió, se le juntan bichos donde tiene la herida y los agentes sanitarios no la atienden.

¿Vamos a permitir que estos señores sigan impunes?
¿Vamos a seguir mirando como el gobierno de Gildo Insfrán continúa con el genocidio lento pero inexorable de las comunidades originarias como si fuera una fatalidad irreversible? ¿Para cuándo la intervención de la provincia? ¿Para cuándo la una visita de la CIDH o del asesor Especial para la Prevención del Genocidio de la ONU, Adama Dieng?
¿Vamos a dejar que mueran ahora Daniel, Cesárea, Marcelina, Patricia, Gabriela, Alicia y la abuela?