Buenos Aires - Por Simón Manuel Sevlever
Querida Asamblea en defensa del Agua y la Tierra:
Les escribo en la distancia esta carta que contiene ánimos y apoyo total a la lucha llevada a cabo por el pueblo en la comarca del paralelo 42.
Me enorgullezco de mi pueblo cada vez que veo los videos de la movilización y leo las palabras de la Asamblea. Corre el calor a través de mis sureñas venas. Los acompaño en la lucha desde la distancia con un apoyo moral que espero sea bienvenido por ustedes.
Les cuento que aquí en la ciudad de La Plata donde me encuentro viviendo, y en la ciudad de Buenos Aires, se ha reunido una cantidad de gente que proviene de la “Comarca del 42”, con el fin de analizar los últimos sucesos en la localidad de El Bolsón. Ha surgido la necesidad en esta reunión de generar activismo por nuestra parte también, teniendo en cuenta la herramienta que poseemos al estar dentro de la prov. De Bs.As. Al hablar de herramienta me refiero a la cantidad de gente a la cual nosotros podemos hacer llegar la realidad que se vive en la Patagonia. Poco a poco se están planteando medidas de acción tales como intervenciones urbanas variadas, y diferentes métodos para llegar a los medios de comunicación que aquí hay en gran cantidad.
Tengan en cuenta por favor que esta carta viene por parte de un particular; No estoy hablando en representación de todas estas personas a través de este escrito. Tan solo deseo informar lo que estoy viviendo como individuo afectado emocional e ideológicamente por la problemática y expresar mi devoto compromiso para con esta causa que trasciende y trascenderá mi vida más la de muchos, ya que bien sabemos ninguna de estas fuerzas cesará en su intento por explotar económicamente los recursos naturales de nuestra querida Patagonia.
Mi intento como activista por esta causa será el de generar conciencia general a nivel nacional sobre la extranjerización de las tierras argentinas, ya que como bien sabemos, es una problemática que se extiende a través de todo el interior del territorio nacional Argentino.
Mi querido Bolsón, los extraño y los observo con mucho cariño, no dejo un segundo de esperar a que mi tiempo aquí se acabe y con este término, mi vuelta a casa llegue. En la distancia haré lo que pueda por aportar a esta lucha que no deja de sacarme lágrimas por cada rincón de mi cuerpo.
Quiero citar por último un fragmento de los escritos en una carta que fue escrita hace ya más de 120 años por la tribu Suwamish en los territorios del noroeste de los estados unidos (lo que en la actualidad sería el estado de Washington). En la que este pueblo le escribe a las autoridades del “pueblo blanco” en esta carta titulada “Aquí termina la Vida y Comienza el Sobrevivir”:
“Los ríos son nuestros hermanos, ellos calman nuestra sed. Los ríos llevan nuestras canoas y alimentan a nuestros hijos. Si os vendemos nuestras tierras, deberéis recordar y enseñar a vuestros hijos que los ríos son nuestros hermanos y hermanos de vosotros; deberéis en adelante dar a los ríos el trato bondadoso que daríais a cualquier hermano.
Sabemos que el hombre blanco no comprende nuestra manera de ser. Le da lo mismo un pedazo de tierra que otro porque él es un extraño que llega en la noche a sacar de la tierra lo que necesita. La tierra no es su hermana sino su enemiga. Cuando la ha conquistado la abandona y sigue su camino. Deja detrás de él las sepulturas de sus padres sin que le importe. Despoja de la tierra a sus hijos sin que le importe. Olvida la sepultura de su padre y los derechos de sus hijos. Trata a su madre, la tierra, y a su hermano el cielo, como si fuesen cosas que se pueden comprar, saquear y vender, como si fuesen corderos y cuentas de vidrio. Su insaciable apetito devorará la tierra y dejará tras si sólo un desierto.”
Los saludo con el mayor de los respetos, y el aliento que solo un hermano puede dar. Gracias por hacer lo que hacen, y con tanto fervor. Se nota que hay mucha sangre buena.
Soberanía Popular!!
NO AL LOTEO
SÍ A LA VIDA!!!!!
Simón Manuel Sevlever, 22 años, El Bolsón.
Editoriales ANP
