Esquel (Puerta E).-La disposición indica que se podrá capturar a aquellos individuos, identificados como “animales problema”, que ataquen al ganado. A su vez, se estipula que los cazadores recibirán una recompensa monetaria por el cráneo y el cuero del animal muerto
El gobierno de Chubut, encabezado por Mario Das Neves, autorizó la caza selectiva de “animales problema” del Puma (Oncifelis concolor) en todos los departamentos de la Provincia.
La disposición –que rige hasta el 31 de diciembre de este año- habilita a propietarios y/o encargados de establecimientos a cazar, previo aviso, a aquellos animales que hayan atacado la producción ganadera.
Además se autoriza a los ganaderos a transportar el cuero y el cráneo del individuo cazado a la respectiva sede de la Sociedad Rural. Y, en este sentido, se indica que “a los efectos de que se paguen los cueros y cráneos provenientes de estas actividades, ambos deberán ser sujetos e identificados con el precinto correspondiente y acompañados por la ficha de declaración de Ataque y Caza de Puma”, tras lo cual se aclara: “ninguna Sociedad Rural recibirá piezas de puma, ni pagará la piel, si no cuenta con el número de denuncia previo”.
En sus considerandos, la disposición de la dirección de Flora y Fauna Silvestre hace referencia a la Ley XI N° 10 que “permite la caza de especies silvestres en todo el territorio provincial a excepción de las áreas protegidas”.
En este sentido, se afirma que “la presencia de un ‘animal problema’ de esta especie, en cualquier punto de la Provincia, puede causarle daños a la actividad ganadera desarrollada en el área de acción de este animal”, tras lo cual se aclara que “el espíritu de realizar la denuncia a la caza radica en que la misma será una caza selectiva, dirigida solamente al puma que esta causando el daño”.
Polémica en Río Negro
Recientemente se conoció que el gobierno de Río Negro decidió habilitar y recompensar la caza y exterminio del puma (Oncifelis concolor), por considerarlo “plaga”.
La Red Argentina Contra el Tráfico de Especies Silvestres (RACTES) repudió la disposición. “Esta medida irresponsable y demagógica solo muestra que el hilo se corta por lo mas fino –los seres indefensos-, no reconociendo que la situación del campo y la ganadería argentinos es la sumatoria de muchos factores entre los cuales se encuentran funcionarios públicos que en flagrante incumplimiento a sus deberes no pueden afrontar ni solucionar estos problemas“, dijo la médica veterinaria Jennifer Ibarra, presidente de la ONG.
“Vemos esta medida como un atentado por parte del estado nacional y algunas provincias, contra la fauna autóctona argentina la cual está siendo mal tratada con absoluto desprecio”, afirmó Ibarra, quien consideró: “es incomprensible que por un lado desde Fauna Nación hayan habilitado un criadero de pumas en La Pampa y por otro lado los estamos exterminando en Río Negro y otras provincias con la misma venia. Señores ¿es o no es plaga?”
“Solicitamos públicamente que se abstengan de aplicar esta resolución. Desde RACTES se tomarán a la brevedad las medidas legales que nos competan y que estén a nuestro alcance ya que se están violando leyes y hasta incluso la Constitución de la Nación Argentina en sus artículos 41 y 43”, resaltó la veterinaria.
RACTES plantea que “el extermino no es la única medida de control y se pueden evaluar otras posibilidades que no lleven a la matanza masiva. Por ejemplo, el uso de perros pastores es una opción con buenos resultados”.
“El problema del campo argentino es de larga data y estamos actualmente ante campos sobrecargados, empobrecidos, con un grave proceso de desertificación que hasta el momento no se ha podido revertir y en este momento con extrema sequía. Hay déficit ganadero y el manejo de la hacienda en grandes extensiones no existe ya que los animales viven solos”, destaca la gente de RACTES.
En la misma línea se señala que “el avance de la frontera agrícola está quitando los hábitats no solo a los pumas sino a toda la fauna silvestre. Esto hace que el puma quede más cerca del ganado depredándolo porque no tiene sus presas naturales. No obstante vale la pena mencionar que existen otros depredadores, incluidos los perros cimarrones”.
Editoriales ANP
