El Bolsón (ANPP).- En 14 de julio en el senado se va a votar la ley de matrimonio igualitario y por supuesto hay muchas voces en contra, las de siempre, las de la derecha mar retrograda, la de los ignorantes, las de la “iglesia” ( en realidad la cúpula de la iglesia), la de los xenófobo. Es por esto que algunas personar comenzaron una campañas de mails a los senadores, la siguiente es una de las cartas que se les envió a quienes van a decidir desde su moral por todos los que mayoritariamente tenemos una posición tomada… si a la LEY DE MATRIMONIO IGUALITARIO, TODOS Y TODAS TENEMOS EL MISMO DERECHO.
Senadores,
Tengo 40 años y a los 12 me quedé solo porque mis amigos del barrio se dieron cuenta que era gay. Durante años me tiraron piedrazos y me insultaron. Desde ese momento entendí que no había lugar para mí en esta sociedad, y que debía esconder mi identidad para no ser lastimado. En ese momento también, inconcientemente, sentí que nunca tendría familia. No existían familias con dos hombres, sólo algunos maricones en televisón que eran blanco de chistes e insultos. Mi caso no es único, toda nuestra generación todavía sufre las secuelas de esa discriminación y de ese duelo. Nos pensamos por fuera de nuestras familias (al escondernos de ellos) y nunca pensamos que podríamos crear las nuestras (porque la sociedad decía que el matrimono, esa figura legal pero también esa manera de consenso social, no existía para nosotros).
Hoy yo tengo un buen trabajo. Asumí mi sexualidad y la hice pública. Mi familia me apoya. Y estoy bien. Pero estoy seguro que en algún pueblito de provincia o en algún lugar del conurbano, están cagando a piedrazos o a insultos al pibe que yo fui hace 25 años. Y que alguien decide inconcientemente que nunca tendrá familia, porque el matrimonio y la familia no son para todos. Eso es lo que hoy usted puede cambiar. La vida de muchas personas y la posibilidad de ser felices. No de los que podemos encontrar subterfugios, sino de los eslabones más débiles de la sociedad (un chico de 15 años que no se anima a ir a un cumpleaños de 15 o a un boliche por miedo a ser descubierto, alguien que tiene 60 años y está en pareja hace 30 con otro hombre, etc).
Espero que tome la decisión correcta. Terminemos con esta larga historia de violencia y discriminación. Porque hay un derecho humano inalienable, que no puede ser sólo para algunos. El de poder ir en Búsqueda de la Felicidad, así, en mayúsculas.
Abrazo,Christian Rodriguez
Envíenos su nota, opinión o información al correo: delpueblo.prensa@gmail.com