Chubut (MIR).- Durante este año el gobierno provincial otorgó arbitrariamente -desoyendo las demandas de verdaderas negociaciones paritarias- escasas sumas a los sueldos de los trabajadores del estado que no llegaron ni por asomo a cubrir el costo real de la canasta familiar básica, que oscila entre $5000 y $7000, dependiendo de la localidad de la provincia. Para empeorar esta situación, dramática para buena parte de los y las chubutenses, el presupuesto presentado por el gobierno de Mario Das Neves para el año 2010 no contempla modificaciones salariales de ningún tipo, lo que en realidad significa una baja en el salario real de los trabajadores ya que el costo de vida aumenta desproporcionadamente.
Sería muy ingenuo pensar, entonces, que no tiene que ver con lo anterior la reciente orden del procurador general, Jorge Miquelarena –funcionario personal de Das Neves-, de que la policía tenga la libertad de reprimir por iniciativa propia cualquier tipo de manifestación. Así piensa el gobierno de Das Neves
contestar a las posibles demandas de recomposición salarial y mejoras en las condiciones laborales: con palos y balas.
Los cortes de ruta, festejos, manifestaciones y reclamos de cualquier índole podrán ser desalojados sin necesidad de una orden judicial. Esto es coherente con la política gubernamental de gastar sumas millonarias en equipamiento y armamento para la policía. Por lo que estamos ante un gobierno que no sólo administra, en materia económica, los intereses de las grandes empresas en contra de los trabajadores y el pueblo, sino que además no le tiembla el pulso a la hora de limitar las más elementales libertades democráticas de reunión y expresión que el pueblo ha sabido conquistar a lo largo de su historia.
Cabe recordar que la policía que ahora tendrá mayor libertad de acción es la misma que está siendo investigada por delitos de lesa humanidad por desalojar, pegar, torturar, perseguir y amenazar en distintos lugares de la provincia.
Por eso el año 2010 nos impone a los trabajadores y el pueblo del Chubut una doble tarea: seguir organizándonos, con mayores niveles de unidad y coordinación, para reclamar trabajo con salarios y condiciones dignas y para enfrentar mayores niveles de autoritarismo y opresión. La historia nos demuestra que solamente con organización y lucha retroceden quienes, desde el poder político, pretenden someternos. El gobierno quiere un pueblo con hambre y miedo.
Demostrémosle que el pueblo de Chubut no está dispuesto a resignarse a salarios de miseria y políticas de mano dura. Demostrémosle que estamos dispuestos a construir una sociedad donde se garanticen los derechos para todos, porque en la que vivimos no están garantizados para nadie.
MIR - Movimiento de Izquierda Revolucionaria
Editoriales ANP
