El Bolsón (ANPP).- Este domingo en el Centro Comunitario y Biblioteca Popular del Barrio Almafuerte mujeres, vecinos, niñas y niños se reunieron a reflexionar y rememorar a Yésica Coco Campos con comida a la canasta para compartir y la pintada de un mural.
Ante la resolución del Juicio y la condena a Prisión Perpetua para Cristian Maldonado por el Femicidio de Yésica, las vecinas del barrio decidieron dar lugar a esta jornada para festejar el logro de la lucha por Justicia para Yésica, hecho que paso a ser el cierre de una etapa pero que también constituyó el inicio y continuidad de las luchas en los barrios, y en el Alamafuerte marca un puntapié para la lucha contra las Violencias hacia las Mujeres que viven allí, como también para visibilizar las necesidades de cientos de familias que viven allí.
Las mujeres del Almafuerte no sólo se organizaron para la búsqueda de Justicia por Yésica, sino que también transitan el pedido del suministro del agua, por el cual se organizan para subsistir con su familias con lo poco que pueden llevar hasta allí, organizan la misma búsqueda a barrios cercanos (a canillas comunitarias), como del mismo uso, consumo y cuidado del agua. Fueron estas mujeres quienes levantaron en el lugar donde fueron encontrados los restos de Yésica un espacio Comunitario y una Biblioteca Popular que lleva su nombre.
La jornada estuvo atravesada por la pintada de un mural en la ampliación, recientemente iniciada, de lo que proyectan como un comedor y espacio de encuentro para el Centro
Comunitario, por otra parte las vecinas se animaron a expresar su alegría por el encuentro y a reflexionar sobre la realidad de las mujeres en el barrio, algunas de ellas sostuvieron la necesidad de prevenir posibles femicidios o solidarizándose con las Mujeres que denuncian Violencias como también de aquellas que saben, todavía no pueden hacerlo. Por su parte, algunas de las mujeres que asistieron agradecieron el recibimiento y manifestaron la importancia de fortalecer los vínculos y las redes de trabajo y contención.
La tarde tuvo como cierre improvisado coplas por parte de algunas de las integrantes de Copleras, que unificaron las voces con les que estaban presentes, y generando sonrisas y finalizando el espacio de Sororidad de la Jornada.
El espacio físico para les vecines, constituye así no sólo un espacio de encuentro sino también de sueños compartidos, un espacio de construcción, un espacio para poder terminar o retomar estudios, de círculos de Mujeres, como de Hombres Antipatriarcales, de dulces y cocina, de juegos para niñes, para dar pelea a la pobreza, al desarraigo, a la discriminación, a la estigmatización y sobre todo de lucha por un lugar mejor para vivir.