El Bolsón (ANPP).- Compartimos la Editorial Rojinegra de está semana:
Forzar los tiempos.
Vivimos tiempos en los que todo nos sabe a derrota. Cuando las opciones son entre la derecha y el fascismo, nada bueno parece haber en el horizonte. ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?
Tal vez sea necesario pensar que estos procesos políticos que llevan a la derechización del sistema representativo, no es un fenómeno aislado. No es algo que ocurre solo en nuestro país. Recientemente en España, hubieron de unirse las izquierdas y los centros para lograr impedir que ganara la ultra derecha. Aún se está en ese proceso. En Brasil, algo similar. En Chile, igual, pero con la situación de que el candidato supuesto de izquierda, es quien reacciona hacia el centro o la derecha, al igual que en el Ecuador de Lenin Moreno.
El capitalismo, como sistema de hambre y muerte para las mayorías, cuando ya no puede producir, se encarga de crear sus propios monstruos. Las pandemias, las guerras, los fascismos, le garantizan a lxs poderosxs, continuar el saqueo que iniciaron por otros medios, hace ya más de 500 años.
El territorio de los que hoy se denomina Argentina, es clave. Hay mucho oro, plata, litio, petróleo, gas y materiales que pueden suplantar una guerra. Sin embargo, las comunidades vienen tomando conciencia de que todo eso, no vale vida.
Así el mendozazo, el chubutaguazo, el jujeñazo, y tanto levantamiento popular ha marcado un freno concreto que genera un problema a la imposición de estos programas.
Frente a estas luchas populares, la discusión de los grandes medios, nos limita al color de las estructuras que nos dominarán en los próximos años. ¿Por qué no gana la izquierda, que propone otras salidas? Una ultra derecha en el poder implica, y así lo han instalado, el saqueo a fuerza de represión.
¿Cuál es la salida a este sistema de exterminio, en el cual pareciera que lo único que podemos decidir es en qué velocidad exterminarnos?
En la era de la información, los grandes monopolios se abroquelan para silenciar a lxs oprimidxs que se organizan. Frente a las estructuras políticas y comunicacionales de hoy, que nos empujan a la quietud, el conformismo y la derrota, insistimos en asumir el protagonismo como comunidades que nos corresponde. Luego del lunes, seguiremos insistiendo.Tal vez la respuesta ha estado siempre a la mano. Pero está cada vez más compleja de implementar. Y tiene que ver con la identidad Nuestramérica, la identidad de clase. La noción de mayoría numérica.
Editoriales ANP
