El Bolsón (ANPP).- No hace dos años de los incendios que arrasaron la zona de Cuesta del Ternero ( 15 kilómetros al norte de El Bolsón) hasta la localidad chubutense de El Maitén y los de Radal y Golondrinas en Chubut, a solo 5 kilómetros al sur de El Bolsón. Este último con más de 500 casas quemadas, y tres vidas perdidas.
No hace dos años. En el día de ayer varios focos debieron ser apagados con intervención del Splif y bomberos.
Hoy, con ráfagas desde temprano que superaron los 80 km/h, hubo al menos cuatro nuevos focos. Uno en el paraje rural Mallín Ahogado, por el camino de Costa del Azul, 2,5 kilómetros arriba de Wharthon por el camino a las pistas de esquí.
Otro en Rincón de Lobos, en Chubut. Otro en la Subida de Días, en Paraje Entre Ríos, también Chubut, del cual sus cenizas y brasas encendidas llegaron hasta Golondrinas, recorriendo por el aire una distancia aproximada de entre dos y cinco kilometros.
Allí, en Golondrinas, Prensa del Pueblo dialogó con los vecinos. Miguel, quién se encontraba cuidando una casa, describió la situación así: " serían cerca de las 17:30 y empecé a ver que caía algo blanco, parecía nieve, pero el clima claramente no era para nieve. Salgo a ver y veo que era ceniza en gran cantidad, y luego brasas encendidas..." Enseguida se alertaron lxs vecinos, y estuvieron atentos a apagar los focos que se generaron en los lugares donde había malezas y bajo algunos pinos. Cinco focos ardieron en ese sector casi simultáneamente. Uno, casi prende una casa. Allí intervino el Servicio Nacional de Manejo del Fuego, quién tuvo dificultad con un par de camiones que se encajaron queriendo llegar a piletas para aprovisionarse de agua.
La intervención de les Vecines, al igual que en Mallín Ahogado, fue fundamental.
La intervención de les Vecines, al igual que en Mallín Ahogado, fue fundamental.
Cabe una reflexión a esta altura de los hechos. Debiera prohibirse definitivamente las quemas mucho antes en el año, y los municipios debieran contar con servicio gratuito de chipeado de residuos forestales. La cuenta es simple. ¿Cuántas chipeadoras se compran con lo que cuesta una hora de avioneta hidrante?
Además, las quemas forestales, no hacen más que contaminar y agrandar el agujero de ozono, ambas con graves consecuencias sobre toda la población.
El chipeado, además, tiene múltiples usos. Dependiendo de qué se chipee, se puede usar como insumo compostable de muy buena calidad, como manto para evitar el crecimiento de malezas, suelo para criadero de animales, entre otras.
En algunos países desarrollados, los municipios tienen plantas de reciclado vegetal, que incluyen el servicio domiciliario de retiro, chipeo, y se llevan lo chipeado que es destinado a diferentes usos y comercializado. Estas plantas, no sólo reciclan en lugar de contaminar, sino que además generan cientos de puestos de trabajo, evitan acumulación de residuos y sus consecuencias ( hanta virus, roedores, etc) y evitan las quemas.
Para cerrar la nota, queremos dejar tranquilidad a quienes nos leen desde lejos y contar que en estos momentos cae una suave lluvia, que sin dudas ayudará a terminar de aplacar los fuegos que hoy a la noche estaban contenidos, pero no apagados.