Por Paula Carrizo y Lucía Barrera Oro para Agencia de noticias Paco Urondo.
Fotos: Barrera Oro
En breve se cumplirán dos años de aquel domingo que transformaría para siempre la vida de Analía Eva Dejesús -más conocida como ‘Higui’- y que dejaría también una nueva marca en la historia del movimiento de mujeres de la Argentina. Un año después de ese grito en las calles que fue la primera marcha “Ni Una Menos” (2015), su caso puso sobre la mesa una inquietud, casi certeza, escalofriante: para ellos sobrevivir no garpa, prefieren llorar (nos). Y menos garpa si sos pobre, lesbiana, del conurbano, si tu cuerpo no responde a sus patrones de belleza y tus deseos no se alinean a los que ellos aprueban. Higui está procesada por haber sobrevivido a un ataque lesbo-odiante y aguarda un juicio oral que ya tiene fecha -24, 25, 26 y 27 de abril 2019- por haberse defendido de sus agresores, quienes pretendieron violarla para disciplinarla.
Y sin embargo, Higui enseñó todo lo contrario: demostró que sobrevivir garpa y que organizarse y transformar el dolor en lucha, vale la alegría. Esa fue la sensación compartida por quienes concurrieron este último 21 de septiembre al festival “Primavera por la Absolución de Higui”, desarrollado frente a las puertas del Congreso. A continuación, algunas reflexiones para entender lo que se discute.
Higui
“Hoy estoy 100% segura de lo que siento. Lo expreso con mi cuerpo. Mí mente, mí corazón y mí cuerpo se pusieron en eje gracias a ustedes, a todas las chiques. Ahora estoy de pie, bien, más suelta. El encierro te hace muy mal a la cabeza. Yo me acostumbré a los golpes, pensé que me lo merecía por haber nacido así, lesbiana. Ellos te hacen pensar eso. Con todo lo que me hacían en el barrio, yo pensaba ‘salgo afuera y me matan’. Un mensaje a las pibas de barrio: salgan afuera que hay un montón de hermanes, que te acompañan, te dan consejo, nunca te dejan sola.”
“Yo siempre sembré respeto por sobre todas las cosas, ayudé a la gente, cuidé a los chicos, los animales, me encanta la naturaleza. Cuando estuve encerrada estuve muy mal, muy triste, no entendía nada, no quería comer. Después, cuando mi hermana y mi mamá vinieron y me contaron que [afuera de la cárcel] las pibas se habían organizado, yo no lo podía creer. Ahí me empecé a levantar. Me mostraron un papel de las banderas que hacían, me llevaron las cartas, eso me re levantó. Me levanté y acá estoy, 100% parada. Se me abrió la mente. Estoy yendo al colegio, estoy aprendiendo, y entiendo.
Ahora no tengo miedo de que alguien venga y me de una piña, una patada, una puñalada, ahora lo que siento son las personas que vienen y me abrazan, y eso es genial.”
Sasha Sacayán (Coordinador del Movimiento Antidiscriminatorio por la Liberación)
“Se viene el juicio en abril, la idea es hacer algunas actividades de visibilización que tienen que ver con la cuestión de la disidencia. Cómo se para esa disidencia ante la justicia, o cómo trata la justicia a esa disidencia. En el caso de Higui, de una lesbiana pobre del conurbano".
"Por eso elegimos hacer una actividad fuerte en el Congreso, y en este día tan significativo que tiene que ver con las libertades de nuestros cuerpos. Para decir ‘estos cuerpos también podemos celebrarnos, también podemos ser libres, y podemos ser políticos, políticas y politiques’. Estamos para decirnos: ‘somos esto, y también somos lo otro, y nos organizamos y nos celebramos en ese organizarnos’. Entendemos que este contexto es bastante duro, pero no podemos bajar los brazos. Sostener la lucha y la organización en este contexto tiene que ver con poder celebrarnos y darnos alegría”.
Gabriela Conder (Defensa de Higui, Gremial de Abogados y Abogadas)
“La absolución no es tan solo la cuestión técnica. Necesitamos a todes para que estemos ese 24, 25, 26 de abril en el Tribunal, diciéndoles que los estamos viendo. Tenemos que enfrentar a ese poder desaparecedor de nuestros cuerpos, poder desaparecedor de nuestras identidades. Es necesario que nosotros desde nuestras diferencias, desde nuestras identidades, le impongamos al poder que no nos va a desaparecer. No van a desaparecer tampoco las luchas que llevamos adelante.”
Emilia, mamá de Pablo Alcorta (Integrante de la Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil)
“Soy Emilia, mamá de un pibe asesinado por gatillo fácil, y desde la marcha nacional (contra el gatillo fácil) somos convocantes por la absolución de Higui. Somos oprimidos y reprimidos por el patriarcado en todo sentido, y acompañamos la causa de Higui por su absolución para visibilizar que Higui se tuvo que defender: quisieron violarla y ultrajarla y ella se defendió. Queremos que la justicia entienda que ella fue la agredida y no la agresora. Luchamos por todo aquel que sea oprimido o reprimido en cualquier aspecto de la vida.”
Alma Fernández
"Soy Alma Fernández, militante travesti y estamos acá como lo venimos haciendo hace ya dos años cuando empezamos a gritar, a persuadir, a convencer a esta sociedad de sacar a Higui (de la cárcel) y visibilizar su caso". .
Hay momentos que nos tocan un montón, como vivir el día a día con Higui, entenderla y ver cómo se hace cargo de la masa que mueve y que generó sin esperarselo porque ella lo único que quería era salir. Entonces ver todo esto y saber que en abril cuando empiece el juicio vamos a ser un montón es muy lindo, porque entendemos que también nos defenderíamos como Higui".
Cuando empezó el juicio por el travesticidio de Diana Sacayán, Higui también estuvo convocando gente y acompañando desde su lado. Yo me quedo con este proceso que está haciendo, por haber entendido toda esta lucha y por encontrarnos acá festejando con amigas.
¡Furia travesti!"
Ariell Carolina
"Soy Ariell Carolina, activista femimutanta, denunciante de Cristian Aldana por violador y pedófilo, y denunciada también por el presidente del INAMU (Instituto Nacional de Música) por escrachar en redes sociales.
Estoy acá para recordar la importancia de hablar, de defendernos y apoyar a Higui en esta absolución, no sólo por lo importante que es juntarnos sino también remarcar que si Higui llega a ir presa es un mensaje de que nos tenemos que quedar quietas y que nunca vamos a dejar de ser víctimas. Y nosotras acá ya no somos más víctimas y por eso nos defendemos.
Remarcar en este encuentro la importancia de defendernos, saber que ya no somos más víctimas, que somos fuertes y poderoses y que también haríamos lo mismo que Higui".
Fotos: Barrera Oro
En breve se cumplirán dos años de aquel domingo que transformaría para siempre la vida de Analía Eva Dejesús -más conocida como ‘Higui’- y que dejaría también una nueva marca en la historia del movimiento de mujeres de la Argentina. Un año después de ese grito en las calles que fue la primera marcha “Ni Una Menos” (2015), su caso puso sobre la mesa una inquietud, casi certeza, escalofriante: para ellos sobrevivir no garpa, prefieren llorar (nos). Y menos garpa si sos pobre, lesbiana, del conurbano, si tu cuerpo no responde a sus patrones de belleza y tus deseos no se alinean a los que ellos aprueban. Higui está procesada por haber sobrevivido a un ataque lesbo-odiante y aguarda un juicio oral que ya tiene fecha -24, 25, 26 y 27 de abril 2019- por haberse defendido de sus agresores, quienes pretendieron violarla para disciplinarla.
Y sin embargo, Higui enseñó todo lo contrario: demostró que sobrevivir garpa y que organizarse y transformar el dolor en lucha, vale la alegría. Esa fue la sensación compartida por quienes concurrieron este último 21 de septiembre al festival “Primavera por la Absolución de Higui”, desarrollado frente a las puertas del Congreso. A continuación, algunas reflexiones para entender lo que se discute.
Higui
“Hoy estoy 100% segura de lo que siento. Lo expreso con mi cuerpo. Mí mente, mí corazón y mí cuerpo se pusieron en eje gracias a ustedes, a todas las chiques. Ahora estoy de pie, bien, más suelta. El encierro te hace muy mal a la cabeza. Yo me acostumbré a los golpes, pensé que me lo merecía por haber nacido así, lesbiana. Ellos te hacen pensar eso. Con todo lo que me hacían en el barrio, yo pensaba ‘salgo afuera y me matan’. Un mensaje a las pibas de barrio: salgan afuera que hay un montón de hermanes, que te acompañan, te dan consejo, nunca te dejan sola.”
“Yo siempre sembré respeto por sobre todas las cosas, ayudé a la gente, cuidé a los chicos, los animales, me encanta la naturaleza. Cuando estuve encerrada estuve muy mal, muy triste, no entendía nada, no quería comer. Después, cuando mi hermana y mi mamá vinieron y me contaron que [afuera de la cárcel] las pibas se habían organizado, yo no lo podía creer. Ahí me empecé a levantar. Me mostraron un papel de las banderas que hacían, me llevaron las cartas, eso me re levantó. Me levanté y acá estoy, 100% parada. Se me abrió la mente. Estoy yendo al colegio, estoy aprendiendo, y entiendo.
Ahora no tengo miedo de que alguien venga y me de una piña, una patada, una puñalada, ahora lo que siento son las personas que vienen y me abrazan, y eso es genial.”
Sasha Sacayán (Coordinador del Movimiento Antidiscriminatorio por la Liberación)
“Se viene el juicio en abril, la idea es hacer algunas actividades de visibilización que tienen que ver con la cuestión de la disidencia. Cómo se para esa disidencia ante la justicia, o cómo trata la justicia a esa disidencia. En el caso de Higui, de una lesbiana pobre del conurbano".
"Por eso elegimos hacer una actividad fuerte en el Congreso, y en este día tan significativo que tiene que ver con las libertades de nuestros cuerpos. Para decir ‘estos cuerpos también podemos celebrarnos, también podemos ser libres, y podemos ser políticos, políticas y politiques’. Estamos para decirnos: ‘somos esto, y también somos lo otro, y nos organizamos y nos celebramos en ese organizarnos’. Entendemos que este contexto es bastante duro, pero no podemos bajar los brazos. Sostener la lucha y la organización en este contexto tiene que ver con poder celebrarnos y darnos alegría”.
Gabriela Conder (Defensa de Higui, Gremial de Abogados y Abogadas)
“La absolución no es tan solo la cuestión técnica. Necesitamos a todes para que estemos ese 24, 25, 26 de abril en el Tribunal, diciéndoles que los estamos viendo. Tenemos que enfrentar a ese poder desaparecedor de nuestros cuerpos, poder desaparecedor de nuestras identidades. Es necesario que nosotros desde nuestras diferencias, desde nuestras identidades, le impongamos al poder que no nos va a desaparecer. No van a desaparecer tampoco las luchas que llevamos adelante.”
Emilia, mamá de Pablo Alcorta (Integrante de la Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil)
“Soy Emilia, mamá de un pibe asesinado por gatillo fácil, y desde la marcha nacional (contra el gatillo fácil) somos convocantes por la absolución de Higui. Somos oprimidos y reprimidos por el patriarcado en todo sentido, y acompañamos la causa de Higui por su absolución para visibilizar que Higui se tuvo que defender: quisieron violarla y ultrajarla y ella se defendió. Queremos que la justicia entienda que ella fue la agredida y no la agresora. Luchamos por todo aquel que sea oprimido o reprimido en cualquier aspecto de la vida.”
Alma Fernández
"Soy Alma Fernández, militante travesti y estamos acá como lo venimos haciendo hace ya dos años cuando empezamos a gritar, a persuadir, a convencer a esta sociedad de sacar a Higui (de la cárcel) y visibilizar su caso". .
Hay momentos que nos tocan un montón, como vivir el día a día con Higui, entenderla y ver cómo se hace cargo de la masa que mueve y que generó sin esperarselo porque ella lo único que quería era salir. Entonces ver todo esto y saber que en abril cuando empiece el juicio vamos a ser un montón es muy lindo, porque entendemos que también nos defenderíamos como Higui".
Cuando empezó el juicio por el travesticidio de Diana Sacayán, Higui también estuvo convocando gente y acompañando desde su lado. Yo me quedo con este proceso que está haciendo, por haber entendido toda esta lucha y por encontrarnos acá festejando con amigas.
¡Furia travesti!"
Ariell Carolina
"Soy Ariell Carolina, activista femimutanta, denunciante de Cristian Aldana por violador y pedófilo, y denunciada también por el presidente del INAMU (Instituto Nacional de Música) por escrachar en redes sociales.
Estoy acá para recordar la importancia de hablar, de defendernos y apoyar a Higui en esta absolución, no sólo por lo importante que es juntarnos sino también remarcar que si Higui llega a ir presa es un mensaje de que nos tenemos que quedar quietas y que nunca vamos a dejar de ser víctimas. Y nosotras acá ya no somos más víctimas y por eso nos defendemos.
Remarcar en este encuentro la importancia de defendernos, saber que ya no somos más víctimas, que somos fuertes y poderoses y que también haríamos lo mismo que Higui".