Los
diferentes festejos fueron promovidos por diferentes grupos desde
docentes, talleristas y mamás de los merenderos en los barrios, cada
parte desde su lugar y todes juntes buscando que cada niñe pueda
tener una tarde de juegos y sonrisas ante el contexto de crisis
nacional, regional y local.
En
los barrios la pobreza se acentúa día a día, son les niñes
quienes buscan contención y alimento en las escuelas, merenderos y
espacios de recreación. No es menor conocer casos donde los
alimentos básicos están ausentes, manifestados en dolores de
cabeza, cambios de humor y atención, entre otros. Quienes están
presentes en los barrios se organizan desde merenderos y espacios
culturales para poder dar una respuesta, conocen esta situación,
porque son les niñes y les ancianes, los más vulnerables del
ajuste, los tarifazos y la quita de subsidios.
En
el barrio Irigoyen la fiesta fue el sábado 25 en el SUM, a la misma
participaron niñes y adultes de juegos (fútbol, disfraces, stencil
y dibujo), maquillaje artístico, payases, merienda. La presentación
del Payaso y Mago Cachi Vache fue aplaudida por niñes y adultes que
rieron a carcajadas y disfrutaron de un espectáculo cómico de magia
y globología. En este caso la organización se realizo por
iniciativa de les talleristas del Centro Cultural del SUM, que
sumaron granitos y colaboraciones para esa tarde: una torta, un
paquete de galletitas, un amigue payaso, un poco de maquillaje.
En
cada fiesta hubo mucha la conciencia de que atravesamos una crisis
profunda en nuestro país y región, a través del ejemplo y la
organización se generan estos espacios donde muches niñes de los
barrios pueden encontrar contención y juegos compartidos, son elles
les protagonistas porque además de ir a jugar, pintar y reír,
participan activamente en la construcción de estos espacios
autogestivos de libertad y transformación.