Desde Piuké queremos compartir con las vecinas y vecinos algunas conclusiones a las que llegamos acerca del contenido de la exposición.
Globalmente el objetivo fue justificar el aumento del precio de los servicios de gas y electricidad.
Entre varios argumentos se señaló que el hecho de subir las tarifas colaboraba con el cuidado del medio ambiente.
Justamente en este punto queremos detenernos.
Como ecologistas pensamos que no se trata de una medida en favor del ambiente sino de una transferencia fenomenal de dinero de los sectores más empobrecidos a las corporaciones, un saqueo de los bienes comunes y la contaminación de enormes regiones de los territorios argentinos.
Si en realidad se pretendiera proteger al ambiente no se estaría aumentando la producción de hidrocarburos tanto convencional como por fractura hidráulica como informó Macri desde Vaca Muerta. Los efectos de la quema de combustibles fósiles, en el cambio climático, no respetan fronteras.
Por otra parte, gran parte del consumo eléctrico no está destinado al consumo hogareño sino a actividades extractivas y contaminantes como la megaminería.
El primer paso para ahorrar energía podría ser cerrar las minas Veladero y La Alumbrera, que además de consumir más que los habitantes de las provincias donde están instaladas, han contaminado en varias oportunidades sus ríos.
Por lo tanto estamos convencidos de que el argumento ambientalista en la suba tarifaria es solo una excusa, falsa, para que las comunidades acepten el subconsumo con el fin que las corporaciones puedan abastecer los mercados internacionales.
Los ambientalistas no le proponen a los Pueblos que consuman menos, sino que cambien sus patrones de consumo. Las medidas impulsadas por el gobierno argentino son solo saqueo, contaminación y pobreza para las comunidades.
NO ES NO.
Organización Ecologista Piuké
Bariloche
Editoriales ANP
