Incertidumbre. Desconcierto. Las sensaciones que tenemos suelen estar orientadas hacia ese lado cuando hablamos del futuro político de nuestro país, provincia o municipio.
Muy pocas son las personas que al tiempo ya transcurrido de los gobiernos nacional, provincial y municipal; no crean que hace falta que se vayan, o que cambien radicalmente sus rumbos políticos.
Pero, ¿es posible? Pareciéramos estar llegando a un agotamiento de un “jueguito” perverso, pensado por la hegemonía para poder seguir dominando: el del bipartidismo. Y es por eso, que lo que preparan ahora es una “salida de centro”. Proponen a un candidato que se presenta como ni muy muy, ni tan tan, y que lo que será, es más de lo mismo.
Como campo popular, nos
cuesta ver quién es el que organiza el sometimiento del pueblo y
dedicamos todas nuestras fuerzas a pegarle al títere que nos pongan
adelante. Menem quedó con la cara totalmente deformada, pero las
políticas que aplicó, siguen vigentes. Igual con De La Rua, y
tantos. Hasta ahora el bipartidismo no se metía con la
situación penal de los del otro lado. Las acusaciones sólo tenían
el fin de atraer fuertemente la atención del pueblo para
poder sacar al contrincante y sólo eso. Ni Menem ,ni De la Rua
están presos; aunque causas no les faltan. Incluso el actual
presidente no está en la cárcel, y sin embargo asumió con
innumerables procesamientos.
Es la primera vez que un
lado del bipartidismo intenta meter presa a la otra parte. Nuestra
posición dentro del tablero no nos permite saber si es que se trata
de una construcción diferente y que ha requerido al poder
hegemónico emplear estrategias que saquen definitivamente al
contrincante del juego, o si simplemente, es parte de este
mismo juego, y nunca llegarán a prisión (sólo los dejarán afuera
del movimiento pendular de "esta política" por uno o más
períodos).
Sabemos que esta no es
"Nuestra política", hacer política es otra cosa, es
empatizar con todo un pueblo, con sus necesidades, sus anelos y
transformar entre todos el destino del lugar donde vivimos. Pero
la memoria, no es menor en este juego. Poder recordar qué
acciones del campo popular han puesto en jaque "a este poder,
es necesario para no volver a repetir tantas veces el mismo camino.
En los medios de comunicación, decimos que solemos hacer
contrainformación y con esto, sólo llegamos a denunciar lo que nos
venden pero lejos estamos de cambiar la situación asimétrica de
pode dirigiendo un el cambio o transformación hacia un
costado más popular. Es lo que los partidos de izquierda suelen
hacer: proponer un capitalismo más humano, con “mayor” reparto
y equidad. Pero esto no alcanza, porque hasta que no haya total
reparto, no habrá equidad.
El poder hegemónico nos
propone un partido de metegol, donde un equipo juega contra otro,
pero donde nosotros somos los jugadores de un lado y del otro están
los títeres que nos golean continuamente. Debemos salirnos de la
mesa del metegol y buscar construir nuestro poder popular, nuestra
forma de organizarnos. Es entonces donde aparece la palabra
comunalidad, tenemos que poder empezar o retomar la construcción de
comunidad, desde abajo, con conciencia de quienes somos y donde
estamos parados en este partido , que no decidimos jugar, donde las
reglas esta puestas por otros y casi no podemos correr. Pero somos
muchos y tenemos estrategia para encontrar como fortalecernos, asi
ya no importarán los títeres que entren en la cancha, porque
jugaremos entre nosotros mismos a otro juego.
Las mujeres han puesto
nuevamente en jaque al poder hegemónico, porque se les ha ocurrido
unirse transversalmente a todas las actividades, gremios, partidos,
agrupaciones, organizaciones, lugares. Se han autoconvocado en forma
horizontal y han salido a la calle. El poder les ha tendido trampas,
pero esta nueva construcción crece y se auto piensa y re piensa,
crece, se desarrolla. Son un ejemplo fundamental de nuestros
tiempos. Se han lanzado a construir su propio camino. Lo que en
medios de comunicación se diría, fijar agenda. Esto saca al poder
hegemónico de su tranquilidad y seguridad, porque alguien camina
para donde quiere caminar y no para donde los están esperando con
trampas que lxs llevan a donde estaban. Memoria, Comunicación,
Comunidad y Soberanía Popular caminan de la mano. Son las
herramientas que nos permitirán salir de la calesita en que nos han
metido.
Tomar las plazas, las calles, los palcos de dirigentes, para correr a quienes se arrogan la representatividad con el sólo fin de pintarnos un futuro mejor imposible y así poder por fin pensar juntxs el futuro que queremos.
Tomar las plazas, las calles, los palcos de dirigentes, para correr a quienes se arrogan la representatividad con el sólo fin de pintarnos un futuro mejor imposible y así poder por fin pensar juntxs el futuro que queremos.