Muchos trabajadores, de las apenas quinientas personas que hoy marcharon, fueron obligadas a asistir en nombre de "El Progreso, el Trabajo y el Futuro". Palabras con infinitas interpretaciones, ya que como me explicaron alguna vez, esta realidad es como una frazada corta en pleno frío, si te tapas la cabeza seguro te destapas los pies. O dicho de otra forma, como abundan ganancias en pocas manos, si alguien gana mucho seguro otros están perdiendo. El turismo es el futuro dijo un comerciante, trae construcción y las otras actividades económicas cada vez son menores, dejando entender que una urbanización con mil lotes, campo de golf y shopping, son por si solos, lo único que puede dar estabilidad a la Comarca.
Que esto puede generar trabajo, tiene una parte cierta, ya que los comerciantes preocupados por el loteo, tienen asegurado algún espacio en tan enorme proyecto. Las preguntas que valen en todo caso serían, ¿cuantos? ¿cuales? ¿para quienes? y la mas importante ¿en que condiciones laborales?. Es sabido que a pesar de la última temporada record de turismo, El Bolsón sigue con un alto porcentaje de condiciones laborales precarias. Se sigue trabajando en negro, con solo media jornada con aportes, o en las condiciones de seguridad mas primitivas. Los mismos que hablan de trabajo para todos, son los que generan empleos precarizados, al tiempo que cambian de vehículos anualmente.
Por último, el progreso es algo muy usado cuando de negocios se trata. Que exista progreso, es que se generen nuevos puestos de trabajo en estas condiciones? No importa que se quiera realizar el loteo, sobre tierras flojas de papeles? Hoy los vecinos de Mallín eligen la agricultura, desean un centro de esquí, tienen proyectos de crecer en sus actividades, generando agroturismo para ampliar las oportunidades de crecimiento para la región. Dicen si a todo eso, si a que se siga creciendo en todas las actividades económicas, sin perjudicar a nadie y sin la necesidad de lotear cientos de hectáreas para negocios privados.
Hoy empezamos mal el día, con empresarios amenazando empleados, con sindicatos defendiendo intereses privados, con medios locales hablando de marcha multitudinaria con unos cientos. Se sinceraron muchos y es para valorar. Están los que quieren crecimiento para pocos, con la promesa de que algo le va a quedar al resto, y están los que siguen dando ejemplos de respeto y construcción colectiva.
La Comarca tiene dos posturas claras y antagónicas, en el medio esta la mayoría que casi no entiende ambos asuntos, espera un arduo trabajo en los barrios, para que quede claro que progreso no siempre es crecimiento con mayor igualdad.