A pesar del frío y la lluvia los participantes se congregaron desde las 18.30 en la plaza de los Antiguos Pobladores, donde poco después se realizó una asamblea informativa en la que se comentó sobre los innumerables proyectos mineros en marcha en el área cordillerana de las provincias de Chubut y Río Negro.
Varios de esos proyectos datan incluso de 2003 y algunas de las zonas que están en la mira de la codicia minera fueron compradas por terratenientes. Es el caso, por ejemplo, de la zona de las nacientes del río Chubut.
El gobernador chubutense, Martín Buzzi, presionado por la movilización social, había ordenado a sus legisladores detener el tratamiento del marco regulatorio para la actividad minera para proponer que sea "solo la meseta central" la zona habilitada para los emprendimientos.
Los vecinos replicaron, al respecto, que no aceptarán la determinación de "zonas de sacrificio", dejando en claro que su lucha es por el medio ambiente y la salud de todos los habitantes de la provincia.
Alrededor de las 19.30, al ritmo de redoblantes y bombos, comenzó la marcha hacia la ruta nacional 40, entregando volantes a la gente y a los automovilistas, para luego regresar a la plaza.
Se consensuó que el próximo 4 de noviembre la marcha se hará en la localidad de Cushamen, una de las zonas amenazadas por las pretensiones de las empresas mineras.
Editoriales ANP
