Ante los recientes hechos de represión e inseguridad
El Frente Popular Darío Santillán repudia el incremento represivo que se ha venido produciendo en el país en los últimos días, donde la prédica de la “seguridad”, empieza a tomar cuerpo en acciones represivas contra vecinos organizados alrededor de una huerta orgánica, trabajadores estatales o privados, militantes populares, asambleas que luchan contra el saqueo y vecinos en emergencia habitacional, por mencionar algunos.
El 20 de Mayo, en la ciudad de La Plata, trabajadores de ATE que reclamaban frente al Ministerio de Educación fueron reprimidos con gases y balas de goma, con un saldo de 15 heridos. La semana anterior, además, habían sido “apretados” por una patota identificada como de UPCN, ligada al ministro Oporto, en una suerte de “zona permitida” por las autoridades del Ministerio y su guardia policial.
El lunes 18 de mayo, en la ciudad de Buenos Aires, por orden del Jefe de Gobierno Mauricio Macri, la Policía Federal desalojó con despliegue de efectivos y una topadora una huerta autogestionada. Al día siguiente, una protesta de los vecinos fue brutalmente reprimida en las puertas del CGP del barrio, con un saldo de 22 detenidos y 5 heridos. Esa misma noche, la UCEP, convertida en fuerza de choque urbano, desalojó a indigentes que dormían en Plaza Houssay.
El 17 de mayo, fueron detenidos militantes del grupo Frente Acción Revolucionaria que irrumpieron en un acto organizado por la Embajada de Israel, denunciando la política guerrerista de ese gobierno contra el pueblo de Palestina. Se les confirmó la detención, acusados de prácticas antisemitas. Con posterioridad fueron detenidos en un comedor de Florencio Varela otros diez militantes de esa organización, bajo los mismos cargos. Confundir acciones de solidaridad con pueblos oprimidos que se inscriben en la fraternidad de los que luchan contra el imperialismo, cualquiera sea su rostro, con acciones antisemitas, es una burda mentira, que sólo pueden comprar jueces venales, políticos complacientes y comunicadores sociales perversos. Pero constituye además una falta de respeto contra cientos de militantes populares que padecieron un castigo adicional por ser judíos, asesinados por combatir contra la dictadura genocida argentina, y denunciar la opresión de los imperialismos, sin que el gobierno de Israel de entonces, ni siquiera retirara a su embajador.
En días anteriores había sido reprimido el Frente de Organizaciones Independientes en Jujuy, hecho que se sumó a una nueva patoteada, esta vez a cargo del grupo adherente del gobierno nacional, Tupac Amaru (integrante de la CTA).
Y los trabajadores de SIDERAR en el edificio Catalinas de Techint, al reclamar que este grupo económico le pague al personal el premio que corresponde tras una ganancia extraordinaria de 1.300 millones de pesos en 2008.
Además, vecinos de barriadas humildes en emergencia habitacional, fueron desalojados con represiones violentas en Mar del Plata, Villa Soldati, Almirante Brown, y otros lugares del país.
También, el caso del pueblo de Corcovado, en la provincia de Chubut, ocupado por la Gendarmería y donde se acumulan las denuncias de pobladores por torturas, violaciones y un nuevo desaparecido. O la recurrente –y silenciada- represión sobre las comunidades wichis en Formosa. O la persecución sobre los asambleístas que se oponen al saqueo minero, que en provincias como San Juan alcanza su máxima expresión.
Por último, continúa desaparecido el joven Luciano Arruga, sin que las autoridades y los medios de comunicación le den importancia. Luciano no regresó a su casa en Lomas del Mirador, el 31 de enero, y todos los indicios apuntan a que fue secuestrado por la policía bonaerense, y hoy es un nuevo desaparecido en democracia. Como Jorge Julio López, secuestrado y desaparecido hace 32 meses, sin ningún avance en la investigación y ausente en los discursos y las políticas oficiales.
Mientras tanto, el poder político en sus distintos signos mantiene la protección del núcleo duro del crimen organizado, expresado por las fuerzas represivas y sus vínculos de todo tipo con el delito. Respecto a esto, ningún vecino o vecina de cualquier barrio tiene dudas sobre la alianza entre los negocios ilegales y las policías de las distintas jurisdicciones. Sin embargo, el chivo expiatorio son los pibes que se mueren de hambre, condenados a no tener futuro, a desear aquello que el sistema promete pero en el mismo momento niega. Y la solución que se propone es darle mayor poder a los que siempre se mantienen impunes.
El Frente Popular Darío Santillán repudia esta avanzada represiva que se ejecuta desde distintos mandos, colores políticos e instituciones. Pero que prefiguran la decisión de crear miedo e inseguridad en nuestro pueblo, para hacer efectiva la política de que la crisis capitalista la paguen los que menos tienen.
Ante una situación social que ya era difícil para millones de familias –los que siempre vivimos “en crisis”- y en el marco de un agravamiento de las condiciones de vida tras tarifazos, inflación, despidos, suspensiones, falta de asistencia social; las políticas del gobierno nacional comparten con la oposición por derecha la misma orientación: mantienen la inseguridad del hambre, la falta de vivienda, salud, educación, trabajo digno. Para esto el argumento es que “plata no hay”, pero mientras tanto, el Estado continúa subsidiando a las grandes empresas, que embolsaron fortunas en los años anteriores: cuando las cosas andan bien, privatizan las ganancias, y ahora quieren socializar las pérdidas en el conjunto de la población.
Sólo la unidad y organización popular irá creando las condiciones para otra realidad para todas y todos.
Unidad del pueblo trabajador
Que la crisis la paguen quienes la generaron
Trabajo y salario digno
- Prohibición inmediata de los despidos
- Fábrica cerrada = fábrica ocupada y puesta a producir por los trabajadores/as
- Salario igual a la canasta familiar
- No a la precarización: blanqueo salarial y pase a planta de los contratados/as
Basta de subsidios a los ricos: redistribución de ingresos verdadera
- Ingreso universal igual a la canasta básica de alimentos
- ¡No al tarifazo! Tarifa social de transporte y servicios públicos
- Eliminación del IVA a los alimentos y los medicamentos
- Sueldos y condiciones dignas de trabajo
- Apoyo a la redes de las organizaciones populares en los barrios: instrumentación de mercados de alimentos al costo y obra pública a través de cooperativas de trabajo genuinas, organizadas desde los barrios
- Tierra y vivienda para todas las familias. Donde hay una necesidad, hay un derecho.
Por trabajo, dignidad, cambio social
Frente Popular Darío Santillán
frentedariosantillan@gmail.com
Editoriales ANP
