El Bolsón (ANPP).- El estatuto que rige el funcionamiento de la Unión de Trabajadores de la Educación de Río Negro (Unter) podría ser modificado si se aprueban, en el congreso ordinario de diciembre, las sugerencias de reforma planteadas por las agrupaciones Azul-Arancibia y Celeste, facciones mayoritarias en ese sindicato.
Si bien se aclara que “la reforma actual debería apuntar a garantizar y generar más participación, más democracia y más autonomía”, llama la atención el intento de establecer que los afiliados que participen de los congresos sólo puedan ser aquellos elegidos “por lista” en relación directa con el porcentaje de votos que hayan obtenido en cada seccional.
Estos delegados, al igual que todos los cargos de la Unter, tanto a nivel provincial como local, serían así elegidos “cada tres años” en una única elección general.
Hasta ahora, los congresales se eligen de manera directa en cada asamblea, y este carácter democrático de su funcionamiento se vería así cercenado, en caso de aprobarse tal propuesta.
Otra cuestión “que apunta a fortalecer la burocracia”, según entienden sectores de oposición dentro de la Unter, es la insistencia en enmarcar las acciones de acuerdo a las convenciones colectivas de trabajo, “lo que limitaría aún más la pretendida autonomía que se declama desde la fundamentación de este proyecto de reforma”, explicaron referentes de la agrupación Rojinegra.
Las medidas de acción directa, por otro lado, se podrían levantar con mayoría simple y no con los dos tercios requeridos hasta ahora.
Las agrupaciones hegemónicas en el gremio docente promueven también la creación de nuevas secretarías, entre las que se cuentan la de Organización; la de Educación, Estadísticas y Formación; la de Salud; de Derechos Humanos; de Igualdad de Género; de Educación Privada y de Nivel Superior.
Militantes de El Bolsón observaron que la secretaría de Organización puede convertirse en “un estamento de control y vigilancia dentro del sindicato para escarmentar a las seccionales díscolas”.
De hecho, el texto de la propuesta aclara que tal secretaría “controlará el cumplimiento de las obligaciones emergentes del presente Estatuto y de las políticas gremiales por parte de las Seccionales, así también como el funcionamiento orgánico de las mismas”.
Tampoco se ve con buenos ojos la intención de instrumentar “planillas de consulta” para temas que la conducción central del sindicato considere que hay que resolver de esa manera.
“Existen sobrados ejemplos en otros sindicatos de que mecanismos como la planilla de consulta, lejos de incentivar la militancia, ahuyentan el debate y propician un simulacro de participación que fortalece la pasividad y la actitud acrítica en nuestros compañeros”, apuntaron miembros de la agrupación Rojinegra.
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