El Bolsón (ANPP).- Freddy Fuentevilla Saa y Marcelo Villaroel Sepúlveda hoy se encuentran en la Unidad de detención Nº11 de Neuquén. Fueron detenidos el 15 de marzo en la localidad de San Martín de los Andes, donde llegaron después de cruzar la cordillera, ingresando de manera ilegal a territorio Argentino. En Chile se los buscaba intensamente ya que, desde noviembre del 2007, se los acusaba de haber participado en un asalto a un banco, en pleno centro de Santiago, y de un posterior enfrentamiento con carabineros en el cual resultó uno herido y otro policía uniformado muerto.
No obstante, según ellos mismos explican, ingresaron a territorio argentino “con la intención primera de salvaguardar sus vidas y así poder tramitar la petición de Refugio Humanitario, ya que su único y real delito es ser reconocidos Luchadores Sociales y orgullosos Combatientes Populares quienes, a pesar de vivir la represión hace ya décadas no han cesado en aportar a la construcción social anticapitalista, Autónoma y Revolucionaria en los últimos 22 años de sus vidas, permanentemente criminalizada y perseguida por el Estado policial Chileno”.
En particular, Marcelo Villaroel Sepúlveda tiene una larga trayectoria en la lucha revolucionaria en Chile, lo que le ha significado que esté sometido a una persecución política y que, ahora, con la amenaza de expulsión de la Argentina le espere en su país –siendo civil- la aplicación de la justicia militar. Por lo que teme por su integridad física.
Los dos detenidos chilenos solicitan, entonces, refugio político, iniciando días atrás una huelga de hambre en su lugar de reclusión, la U11 Neuquén, y convocando a la solidaridad internacional por la libertad de los presos políticos.
A cinco días de inicio de la huelga de hambre Marcelo Villarroel ha emitido un segundo comunicado, en el cual “quieren saludar a todas y todos los compañeros repartidos en Argentina, Chile, Peru, España y diferentes lugares del mundo, kon un abrazo repleto de fuerza y energía revolucionaria y libertaria que lxs anime a continuar solidarizando activamente kon todas y todos los presos revolucionarios que luchan cotidianamente contra el entramado carcelario del capital ke anikila miles de personas en el mundo…”
Expresan además, que su “lucha, sin duda es por la abolición de todas las karceles, por la liberación de todxs lxs presxs y por la eliminación definitiva del capital, sistema omnipresente y naturalizado en la cotidiana maquina de muerte que significa en todo el planeta…Nuestra lucha es por una nueva y mejor vida, por una sociedad sin clases, por una vida libre y feliz, y por ello entregamos lo unico que tenemos: nuestras propias vidas…”
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