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jueves, 22 de septiembre de 2022

SALUD MENTAL, UN CONCEPTO QUE NOS INTERPELA. ENTREVISTA CON ALBERTO SAVA

El Bolsón (ANPP).-En nuestro espacio in-formativo en Radio La Negra, compartimos una charla con Alberto Sava, creador del Frente de Artistas del Borda. La desmanicomialización y otros conceptos son abordados en la misma. 

La compartimos;

En la mañana de Música y Noticias por Radio La Negra, estamos en comunicación ahora con un artista y psicólogo social pero también, porque no, pedagogo: Alberto Saba.

RLN: ¿Qué tal Alberto, cómo estás? Buenos días.

S: Bien, bien. Sí, soy pedagogo también porque he dado clase de teatro y mimo y teatro participativo. Estuve y estoy en la enseñanza de teatro.

RLN: Tal cual. Alberto es el creador del Frente de Artistas del Borda, una organización que ha sido reconocida en muchas partes de nuestra América y del mundo como una organización muy innovadora en un montón de cuestiones.

A: Sí, en principio, el Frente fue el iniciador de un movimiento que se llamó “desmanicomialización”, del arte en este caso. La

desmanicomialización es un movimiento que se dio por primera vez en el mundo en Italia donde se cierran los manicomios y el Estado garantiza un dispositivo que tiene que ver más con lo comunitario, internaciones cortas en hospitales generales, garantizando la vivienda, el trabajo, el estudio y el afecto de todas las personas que estaban internadas ahí. Considerando que los manicomios son lugares violatorios de los derechos humanos porque se vio que allí se sobremedica, se ejerce violencia física y psíquica, algunos casos inclusive electroshock, falta de libertad, incluso sobre medicación. Entonces está considerado que los manicomios que ya no son más lugares de salud. En la Argentina se intentó hacer un proyecto desmanicomializador, en un gobierno democrático en el 84. Se pensó en tres lugares, uno fue en la provincia de Río Negro donde se efectiviza el cierre de un manicomio en la localidad de Allen. Y otro después en Córdoba, donde no se concreta por cuestiones políticas básicamente y acá, en el Borda, tampoco.

Bueno, en esa acción de producir algún efecto desmanicomializador en estas instituciones, invitan a una serie de trabajadores sociales, psiquiatras, enfermeros, sino también otros como gente del deporte. Por ejemplo, en Italia lo deportivo fue muy  interesante en toda esa actividad desmanicomializadora. Y aquí me invitan a mí considerando la persona que me invita, que revisó mi trabajo como docente de teatro participativo. Me Invita a trabajar en el Borda partiendo de la idea del tipo de teatro que se trabaja en lugares reales como las calles, instituciones, en barrios populares o se intenta trabajar a partir del teatro para transformar la realidad de esos lugares creando nuevas realidades.

Bueno me invita ir al Borda y ahí veo que el Borda era un hospital de hombres; habitaban en ese momento, año 1984, dos mil quinientas personas. Hoy hay más o menos quinientas personas. Y bueno, ahí veo que hay una cantidad de muchachos que hacían música, pintura, poesía. Los veía ahí en los patios cuando cantaban y ahí propongo hacer un Frente de artistas con la idea de ayudar en ese proceso de desmanicomialización. Así empezó esta movida, con la idea sobre cómo el arte podría ayudar en esa panza del monstruo, con pacientes que están internados por la ciencia, por la medicina, detenidos por la justicia muchas veces y desaparecidos socialmente. Yo digo siempre los desaparecidos son otros invisibilizados, son otros don nadie, por los nadies, porque no están, no existen, a este sistema político capitalista no le interesan los locos. No producen, no hay ganancia. Salvo para los laboratorios. Los laboratorios sí, ganan mucho dinero con la existencia de los manicomios; se consume entre 70 y 80  veces más de medicación que si hacés un tratamiento personalizado.

Bueno, en ese contexto, nace el Frente de artistas con la idea que estos muchachos hagan arte; se dicta un taller de arte coordinados por artistas y ayudados por psicólogos sociales. Que produzcan arte. Cuando decimos produzcan arte es que hagan espectáculos de teatro, de música, de poesía, exposiciones de plástica o espectáculos de mimo, de circo.  El artista tiene 11 talleres. Que esa producción después salga del manicomio y se muestre a la sociedad. Y bueno, así es ese movimiento con el Frente de artistas y el arte en el campo de la salud mental.

RLN: Alberto, digamos, el laburo para nosotros es un poco difícil de imaginarlo. Como decías vos recién al principio, Río Negro tiene esta ley de desmanicomialización. Aquí, en El Bolsón que es donde estamos en Río Negro, no hay manicomio. Los pacientes de salud mental asisten al hospital periódicamente pero cuentan con un acompañamiento que, seguramente tiene sus fallas también, pero que permite otro vínculo social también con estas personas que son parte de la sociedad ¿no? De hecho, en El Bolsón son muy conocidos y reconocidos muchos de los pacientes de salud mental. ¿Cómo trascurre la cotidianidad? Vos lo decís a grandes rasgos, son centros de detención, muchas veces incluso de detención judicial, de represión, pero ¿cómo llega una persona al Borda y cómo se va, si es que puede salir?

A: Mirá, ¿cómo llega? Llega de distintas maneras. Muchas veces por la justicia; se produce algún accidente o momento grave de disturbios, de pelea y bueno, primero va a la comisaría y ahí termina. Y si  tiene algún problema psicológico o psiquiátrico se lo lleva al Borda y ahí se le hace un examen o estudio previo. Y si está con peligro para sí o para los demás, como se dice normalmente, entonces queda internado. Otra manera es por la familia. La familia determina que no lo puede contener y lo lleva al hospital, por la guardia o por consultorio externo, y ahí se determina su internación. La internación tiene como etapas; una etapa de terapia a corto plazo, están un tiempo, mes o mes y medio, dos meses, depende del problema de esa persona con padecimiento. Y después se lo deriva a un pabellón donde habitan 30, 40 o 50 personas. Ahí puede estar, generalmente el promedio de internación en el Borda en este momento es de 13 años. Hay gente que quizás sale rápidamente, y hay otra gente que queda ahí y muere ahí. Nosotros lo hemos visto… Bueno, sí, recordamos  a Jacobo Finmac el famoso poeta que murió en el Borda después de 40 años de internación. Ha habido casos, yo lo he visto personalmente en estos 38 años que estoy trabajando con el Frente de artistas, de compañeros que han quedado allí vegetando y mueren ahí porque no tienen familia o las familias los depositó y olvidó y bueno y quedan ahí porque además no hay una política. La estructura ideológica que tienen los manicomios es un lugar de depósito de personas.

Sin embargo, se ha avanzado bastante en ese sentido. Hoy hay gente, cuando digo gente digo trabajadores de la salud, psiquiatras, psicólogos, enfermeros que tienen una escucha distinta, una práctica distinta. Están más de acuerdo con estos procesos de desmanicomialización, de internaciones cortas. Entonces, eso ha mejorado bastante, pero todavía se sostiene esa línea, ese pensamiento, esa estructura ideológica donde el encierro es lo que vale, la medicación es lo que vale. Y bueno, se come mal en estos lugares; los pacientes tienen una dieta muy precaria. El Estado obviamente presta muy poca asistencia, por ejemplo, en la ropa muy precaria, en ese sentido muchas veces por las donaciones de la gente.

La sobre medicación como el elemento constante donde hace que los pacientes se contracturen, se pierdan, pierdan la memoria, pierdan sus dientes porque se contractura su cuerpo... Dejan de ser sujetos, dejan de ser personas. Como decía Pichon Rivière: “Uno es persona en la medida que pueda pensar, sentir y hacer, si no se convierte en un objeto”. Un paciente decía: “yo me siento un ladrillo más de las paredes del hospital”.

Entonces ver como el arte puede ayudar a descontracturar esos cuerpos, que esos cuerpos con proyectos -en su mayoría estoy hablando- de un proyecto de muerte, de no salida puedan sentirse que pueden pensar, sentir y hacer como cualquier otra persona.

RLN: Alberto, yo soy padre de un hijo con una discapacidad mental importante y vivo en mi propio ser, digamos, la dificultad en este mundo de tener que acompañar a mi hijo que ya tiene 20 años, en la cotidianidad. Y yo tengo la facilidad de tener un trabajo, de tener recursos, de estar en un lugar con desmanicomialización y en donde hay, aunque pocas, ofertas de actividades y propuestas para el acompañamiento de personas como mi hijo. Pero me imagino en una gran ciudad sin tener un trabajo, sin tener las posibilidades de ofrecerle una cobertura de una obra social… Bueno, una cantidad de cosas ¿no? Cómo se dificulta ese acompañamiento para las familias…

A: Yo creo que los proyectos de desmanicomialización… Acá tenemos una ley en la Argentina, una ley reciente de hace 10 o 12 años. Una ley nacional de salud mental donde se pone en práctica, se contempla estas situaciones parecidas a las de Río Negro. Yo estuve en Trieste, Italia, que es una provincia muy grande de un país con muchos millones de habitantes y hay una ley nacional y hay un dispositivo donde cualquier persona, como en el caso tuyo, que tenga un problema de padecimiento mental propio o de algún familiar, hay una estructura que uno sabe que existe y que puede recurrir. Por ejemplo, acá hubo un caso como el músico Chano. Él tuvo un brote de tipo psicótico, psiquiátrico y la familia lo que hace es llamar primero a la policía y vino un policía con un revólver y lo primero que hizo fue pegarle un  tiro.

Eso no sucedería con un dispositivo; por ejemplo, la ciudad de Trieste está dividida en  varias partes; vos tenés un teléfono a quién recurrir. Viene un equipo interdisciplinario: psiquiatra, psicólogos, enfermeros, trabajadores sociales, que asisten  a ese problema y lo contienen. Y no llegás al extremo de que le tenés que pegar un tiro. Me parece, entonces, que lo que hay que procurar - lo que dice la Ley nacional- es que los manicomios no existan más y que deben ser reemplazados por lugares de atención ambulatoria, en los hospitales generales, con dispositivos que estén dispuestos a actuar ante una crisis. Uno no está negando la crisis, puede sucederle a cualquiera de nosotros. Un paciente nos decía “no se olviden que nosotros en algún momento estuvimos afuera también”. En un sistema como el nuestro, capitalista, donde cada vez hay menos recursos para subsistir, más violencia, más elementos perturbadores, es posible que tengamos crisis. No solo psicológicas sino también de otras partes del cuerpo: infartos, cánceres, etcétera. Entonces me parece que tenemos que generar un dispositivo interdisciplinario que asista permanentemente a esa crisis. Y estoy de acuerdo con vos que al no existir eso es muy dificultoso lograr contener situaciones extremas.

RLN: sin dudas. Meto un pellizcón ahí, pero también hay que laburar en pos de desarmar este sistema capitalista que es tan insano y que genera tanta insalubridad.

Pero bueno, Alberto vos seguís generando y motorizando proyectos. Sabemos que estuviste ayer en una actividad, ¿querés contarnos un poco?

A: Bueno, a ver, primero tomar un poquito ahí lo que vos decías. Yo creo que desde nuestros lugares, en nuestro caso desde el arte y la salud mental, no vamos a hacer la revolución social, la revolución política, pero mientras tanto podemos ayudar. La salud mental por ahí no hace la revolución pero sí aporta. Mientras tanto hay que ir haciendo algo. En un momento de cambio, de transformación política e ideológica hay estar preparado para trabajar en esos cambios, en esos procesos.

Yo ayer estuve en un Congreso nacional que se hace todos los años acá en Buenos Aires, básicamente de psicólogos y de terapias alternativas. No es el Congreso de Psiquiatría que se hace en Mar del Plata. Es un congreso renovador en el campo de la salud mental y ahí participamos con tres trabajos: un trabajo que está haciendo la Red Argentina de arte y salud mental. Otra mesa sobre la Red latinoamericana que también hemos creado. Y también una mesa con pacientes, con usuarios. En general, desde el Frente artístico y de la Red Argentina siempre hemos estado en estos eventos y hemos querido que participen los usuarios del manicomio, que escuchen y puedan contar lo que les pasa, cómo se los atiende,  cuáles son sus ideas sobre lo que piensan del manicomio y qué piensan de la desmanicomialización, y los efectos que les produce el arte a ellos.

Nosotros estamos organizando en el Frente de Artistas esta experiencia que empezó en el año 84. Tuvo mucha repercusión al principio, como La Colifata después. Donde nos convocaron; ahí vimos de crear un festival cuando había muchos grupos, de crear un festival de artista internados en hospitales psiquiátricos en sus comienzos. Es un festival latinoamericano donde participo, vamos a hacer la edición número 15, o sea, ya hemos hecho 15 festivales y congresos. No es un congreso de profesionales ni técnicos del arte. Entonces se muestra en Mar de Plata entre el 18 y el 21 de octubre, en el Auditorio Teatro Pairó, de Mar del Plata. Este año hay cuarenta delegaciones, la mayoría de la Argentina y hay delegaciones de Chile, Brasil y dos personas que vienen de Ecuador y otra de Francia para contar sus experiencias en los manicomios de esos lugares.

RLN: Qué interesante, ¿no? Y cómo, a través de esta parte de la sociedad ocultada y oprimida, hay tanto para empezar a encontrar la punta de ese ovillo que muestra las flaquezas de este sistema. Justamente, esto que dijiste hace algún momento, no le interesa al sistema este sector porque no produce, salvo en el gasto que sí le hace a los laboratorios. Este no es un sector que le interese al capitalismo, ¿no? Y desde ahí, este sector es ocultado, oprimido, reprimido.

A: Lo que produce el arte, por lo menos nosotros lo hacemos, es que estas producciones salen a la comunidad y cuando salen por los propios pacientes, por los propios usuarios artistas que muestran lo que hacen, y entonces ahí producen efectos. Primero, el efecto personal, no de ese proyecto de muerte sino un proyecto de vida, un proyecto de salida, de exponerse a cambiar para sí, para los demás. El segundo efecto que produce es en la institución, en los manicomios. Porque en el momento que sale -y como somos artistas, somos agentes públicos- tiene mucha repercusión en los medios: en la televisión, en la radio ,y no solo se sale a mostrar, digamos, sino también a criticar al sistema, criticar al poder hegemónico médico, criticar al sistema capitalista. Y eso no le gusta al poder, a los dirigentes o los directores de los manicomios o de la salud mental. Intentan que lo que pasa dentro del manicomio se tape, que no se sepa, entonces lo que hace en el momento que sale, denuncian afuera, vuelve al manicomio y produce un movimiento interno. Donde genera, como se dice ahora, una grieta, nuevos espacios a favor de un proceso de cambio que presiona  a los que quieren el statu quo institucional.

Claro, eso va creciendo en el sentido que hay en este momento más gente que quiere un cambio, pero todavía hay intereses económicos muy fuertes. Porque la mayoría de los manicomios, por ejemplo acá en la Argentina, en Buenos Aires, son del Estado pero su funcionamiento interno está concesionado. Esta concesión hecha por empresas privadas,  de la comida, la seguridad, la limpieza, los laboratorios, todos son privados. Entonces, todo ese mecanismo capitalista de atención dentro del manicomio quiere que persista.

El tercer efecto que produce es en lo social; en la medida que el arte sale y aparecen estas denuncias la gente como uno, que asiste o que ve o que escucha estas experiencias, se posiciona en un lugar -no misericordioso, pobrecito loco, ni en un lugar religioso-, sino en un lugar más político, más de cambio.

Y aparecen las organizaciones sociales, como derechos humanos, de artistas, organizaciones políticas que avienen a este sistema, a esta propuesta, e intentan cambiar este sistema de políticas institucionales y sociales. Hay una pelea todavía, una lucha, que yo creo que es lo que ha permitido que el Frente de artistas exista después de 38 años. Gracias a esta acompañamiento social, que se da no solo desde lo teórico sino participando, ayudando, dando recursos económicos, dando un espacio, haciéndonos participar. El arte produce esto, que se tome conciencia subjetiva, personal, institucional y social de que los manicomios no deben existir.

RLN: en esa lucha nos sumamos Alberto, cuenten con nuestra radio, con nuestros espacios para difundir el arte, para difundir los desarrollos teóricos, para compartir las experiencias, sinceramente.

A: Vos sabés que el periodismo, en general, es muy reticente. El sistema capitalista solamente apoya lo que da ganancia. Hay sectores del periodismo que apoya.  Doy nombres: Página 12, Radio Nacional, radio 750, bueno, radios progresistas, o radios periféricas que por ahí no tienen mucha audiencia pero generalmente nos apoyan.

Los grandes medios no apoyan, aparece el tema de la locura cuando hay una muerte, alguien se suicida o le pegan un tiro. Pero es lo que pasa en el sistema capitalista con otras informaciones, donde hay un monopolio de la información que a ellos les interesa y les da ganancia. No actividades como la nuestra. El arte, la salud mental, ambas cosas muy periféricas no las apoyan.

RLN: bueno, por lo menos unámonos en esa periferia que sin dudas, aunque ellos nos quieran hacer creer que son más, por cada patrón hay un montón de laburantes y en ese mismo vínculo sucede también con la comunicación, con el accionar en estos espacios como el Frente de artistas del Borda. Creo que todo eso es cuestión de organizarnos y cuidarnos.

A: nosotros lo intentamos hacer. El Frente de artistas empezó hace 38 años con un grupito de 40 o 50, que cuando dijimos el nombre Frente de artistas del Borda,  un paciente dijo “con este vamos a ir al frente y vamos a ser los revolucionarios del Borda”. Y ahí se creó, se abrieron espacios dentro del manicomio, se hizo un festival americano (este que vamos a hacer su edición 15);  se creó una Red Argentina de arte y salud mental donde hacemos intercambio de trabajos, nos apoyamos. Ahora creamos una Red latinoamericana, que esto que estamos haciendo en la Argentina se repique en distintos países de Latinoamérica. Por ejemplo, la idea de hacer este último en la Argentina y que luego se haga en distintos países. La desmanicomialización es un tsunami que avanza y que arrasa con la estructura ideológica manicomial. Yo creo que hay que hacer camino al andar y aparecen otras ideas, otras propuestas renovadoras.

RLN: tal cual Alberto. Te convoco para que sigamos en contacto y que cada tanto nos puedas ir informando en qué andas, en qué anda ese hermoso movimiento del que sos parte.

A: Cómo no, cómo no. Te voy a llamar para hablar sobre el festival en octubre y si podemos, buscar que alguna gente de otros hospitales puedan hablar con vos.

RLN: cómo no! Podemos pensar incluso en alguna transmisión especial para darle voz a ese festival.

A: Pensá que entre el 18 y el 23 de octubre es el festival. Las funciones empiezan el 19 y terminan el 23. Nosotros llegamos un día antes; pero, si querés, durante el festival nos llamás unos días antes, lo recordamos y hacemos algo.  

RLN: cómo no! Buenísimo. Muchas gracias a vos.

A: Bueno, un abrazo a todos. Un abrazo grande.

 

 

 


martes, 20 de septiembre de 2022

ESTE SABADO DANIEL LUGONES EN EL GALEANO


El Bolsón (ANPP). -Este sábado 24 de setiembre a las 21 horas en el Centro Cultural Eduardo Galeano se presenta Daniel Lugones con su espectáculo "Lo que aparece en el viento que silva lo que escucha", y habrá libros del resumen de 40 años de historia y canto militante en nuestra comarca. El libro que lleva el mismo título del espectáculo, fue editado por Editorial El Choike. 

El autor propone recorrer una línea de tiempo a través de relatos, evocaciones y canciones, desde su llegada a la Comarca en los años '80 hasta la actualidad.
Una mirada, una manera de reconocerse, de reencontrarse con les pares y de nutrir a las nuevas generaciones expresando una continuidad en las formas del hacer y del vivir el Arte y la Cultura.

domingo, 18 de septiembre de 2022

A CIENTO UN AÑOS DEL NACIMIENTO DE PAULO FREIRE, SUS IDEAS SIGUEN MUY VIGENTES. CHARLA CON CELINA PIPO, DOCENTE, PEDAGOGA.

El 19 de septiembre del año pasado, se cumplieron 100 años de su nacimiento. 

El Bolsón (ANPP).-El 19 de septiembre de 1921 nacía en Recife, Brasil quien luego sería uno de los pedagogos y educadores más influyentes entre quienes se dedican a la educación desde una perspectiva transformadora: Paulo Freire. Su observación y la producción de teoría filosófica y política en el campo educativo y político, generó grandes aportes a los procesos de empoderamiento popular de Nuestramérica. Por eso, quisimos charlar con una docente y pedagoga local, Celina Pipo. Compartimos la charla que mantuvimos:

Radio La Negra: Bienvenida Celina, es un orgullo tenerte con nosotres... Gracias por recibirnos y compartir tus saberes.

Celina Pipo: Buenos días, buenos días a las, les cumpas. Bueno, de nada, un honor poder hablar de alguien como Paulo Freire con todo lo que significó para la educación en toda Nuestra América y para cada uno y cada una de nosotras que nos hemos formado con su pensamiento y nos ha guiado en nuestras prácticas desde hace un montón de años de manera muy significativa. Así que bueno, una alegría estar hablando acerca de Paulo Freire hoy con vos.

RLN: Bueno, la alegría es nuestra de que aceptaras, eh? No siempre es muy fácil que los y las compañeras que están tan formades como vos nos compartan, sobre todo en este formato radial, sus saberes y su formación. Celi un poco la idea de esta charla es poder tomar o poder recordar qué aportes ha hecho Paulo Freire en cuanto a educación pero también en cuanto a política, si quierés empezamos un poquito por educación, para pensar un poco juntos cómo eso, también fue aportando a lo político. ¿Te parece? 

C.P. : Dale, bueno, la verdad es que son tantos los aportes de Paulo Freire, que siempre hacemos algún recorte. Y a partir de la invitación a tener esta charla me puse a pensar un poco qué sería lo que me gustaría privilegiar sin volver a las lecturas, sino desde la experiencia y desde el conocimiento previo que ya tengo de todos sus aportes. Y la verdad es que en lo que ha sido mi práctica y mi formación entre los aportes más importantes, uno es el que tiene que ver con cómo pensar la relación pedagógica. La relación docente-estudiante, docentes-educandos. Cómo pensar esa relación que es tan cotidiana para quienes trabajamos en el sistema educativo. Y también para quienes hemos trabajado en el ámbito de la educación no formal. Cómo pensar la horizontalidad. Cómo pensar el diálogo, cómo interpelarnos cotidianamente para construir relaciones pedagógicas que no supongan un saber localizado en una sola persona o en un solo colectivo docente y un no saber localizado en el lado de quienes son nuestros estudiantes o quienes son las personas jóvenes o adultas o niñez con quienes trabajamos en los ámbitos de la educación no formal. Entonces esa cuestión del diálogo de saberes me parece que fue clave, como una de las rupturas más importantes que nos planteó Pablo Freire para pensar las relaciones pedagógicas. Y también pensar de qué se trata este diálogo de saberes que supone que aquellos niños, niñas o comunidades con las que trabajamos tienen un montón de saberes al igual que nosotros o nosotras y que en este encuentro de lo que se trata es de "saber mejor lo que ya saben". Esto a mí me pareció tan simple y tan importante en Paulo Freire. Cuando él hablaba de saber mejor significa que ese saber que todos tenemos necesita ser problematizado para saber mejor, para comprender mejor las comprensiones que ya tenemos del mundo, de la realidad en la que estamos inmersas. Así que, este saber mejor me parece clave. Me parece muy simple. Cuando tengo reuniones como maestra con las mamás, los papás, los tíos abuelos, la familia de mis estudiantes, siempre es algo a lo que recurro. Acá nos encontramos para saber mejor. También para saber más. Saber cosas nuevas. Saber cosas que nunca nos hemos planteado pero para saber mejor lo que ya se sabe. Y es una invitación que enseguida generaría algo con las comunidades y genera esta comprensión de para qué nos encontramos todos los días en las escuelas o en las instituciones de todo tipo. De dentro del sistema educativo y también en los ámbitos de la educación no formal. Así que eso me parece clave. 
Y otra cuestión que por supuesto es clave y es central es que la práctica educativa, es una práctica política. Y eso es algo que tenemos que tener presente todo el tiempo:  ¿a favor de quiénes estamos trabajando cada día, cada minuto, en cada gesto, en cada práctica cotidiana, en nuestro quehacer educativo? Así que esas son como dos cuestiones súper claves. Comprendiendo que cuando trabajamos a favor de alguien, a favor de un sector social, a favor de grupos que vivimos múltiples opresiones, estamos desarrollando prácticas que necesariamente son emancipatorias. O son ofrecidas o refuerzan la opresión o, trabajan en pos de la emancipación y la transformación social. Así que estas son cuestiones claves y por supuesto en este sentido también la cuestión de la esperanza. Si trabajamos en favor de la transformación es porque estamos seguras, seguros, que la transformación es posible. Que es lenta, es cotidiana, pero es posible y que el futuro que se sueña, que se busca, se tiene que adelantar y se tiene que construir y se tiene que vivenciar en las prácticas cotidianas y en lo más pequeño y mínimo de esas relaciones pedagógicas atravesadas por los saberes. Estos son como algunos de los elementos para mí más significativos y que me atraviesan todos los días cada vez que preparo mi tarea, cada vez que la experimento, cada vez que la analizo y la reviso una vez llevada adelante y la reformuló y así.

RLN: La estima como  uno de los ejes para poder aprender. Para poder aprender, si uno no se siente bien, es difícil poder aprender algo. Y si no se siente bien, no es posible una identidad cómoda, entonces si hay un grupo de los que no sabe y un grupo de los que sí sabe, no es posible sentirse bien, ¿no?

CP: Sí y si se nos señala en forma permanente como los que no sabemos, ese lugar se fija como un lugar en el que nos encontramos después en otras prácticas y en otras relaciones sociales 

RLN: claro y esto que decías vos de la educación como una como una práctica política fundamental no? Porque cada vez sucede menos, pero todavía sigue sucediendo que hay el dedito acusador de de algún padre madre de de escuela que dice "en esta escuela están haciendo política", como si todos los años anteriores, eso que se pinta como la el no posicionamiento, en realidad es un posicionamiento a favor justamente de quienes mantienen una opresión constante y sostenida desde hace muchísimo tiempo.

C.P.: Y sí, esto es así. Esto ha sucedido siempre y nos va a seguir pasando y cada vez que nos vuelva a pasar, tendremos que volver a explicar, en qué sentido hablamos. De que nuestras prácticas son políticas y cómo lo político atraviesa la totalidad de la vida social y de las prácticas sociales, como la educación. Es inevitable entender que vivimos en sociedades atravesadas por relaciones de poder y asimetrías entonces, en este contexto toda práctica social, va a estar necesariamente atravesada por esa realidad y eh, invitada o interpelada y obligada a tomar posicionamiento. Entonces esto lo tendremos que explicar una y otra vez de manera que sea comprensible accesible a quienes quieran escuchar y a quienes no quieren escuchar. Es así es la la situación. Porque desde las escuelas o desde las prácticas educativas en cualquier ámbito en que las desarrollemos estamos construyendo poder.

RLN: Claro y en esa construcción de poder, nos podemos ir un poco más hacia lo netamente político, justamente los aportes de Freire tienen que ver con eso, con empoderar, con construir poder, con habilitar internamente y hacia el campo propio, ese ejercicio del poder, ¿no?

C.P.: Sí, esto que estás diciendo, lo del ejercicio del poder, es fundamental. En todas las relaciones sociales, en todos los espacios organizativos, en las organizaciones sociales más constituidas y en las pequeñas comunidades que también van construyendo organización cotidianamente, lo político es fundamental. Porque en esas construcciones la manera en que se construyen las relaciones entre las personas que las integran, las maneras en que piensan sus acciones hacia el afuera de las organizaciones, son modos políticos. En el sentido de que son modos colectivos que buscan construir, adelantar proyectos de sociedad. Y los proyectos de sociedad, siempre son políticos porque influyen en en esos proyectos. Siempre hay modos de pasar el poder y los privilegios, así que es inevitable, y también es necesario pensar que las acciones llevadas adelante por las comunidades, las organizaciones sociales más o menos constituidas también son pedagógicas, son educativas Porque las personas al integrar grupos, organizaciones, nos formamos. Aprendemos a ser personas. Aprendemos modos de ser personas, entonces también siempre estamos hablando del carácter pedagógico de esas prácticas políticas de las organizaciones sociales o de los grupos sociales, en los que las personas nos hacemos personas de una determinada manera. Y nos hacemos personas en lo colectivo también, así que también es importante resaltar no sólo el carácter político de las prácticas educativas, sino el carácter pedagógico de las prácticas políticas que se dan en otros espacios sociales que no son comúnmente denominados como espacio educativos. Y sin embargo, lo son.

RLN: Tal cual, ¡qué interesante y qué ganas de concretar algo que hace tiempo venimos planteando en nuestra organización, que es poder ofrecernos espacios de reflexión en torno a estos saberes que hemos ido construyendo y enriqueciendo, "sabiendo más" como decías al principio de la nota de estas cuestiones. Justamente en el vínculo con otres y en instancias de organizaciones y de instituciones. Me me dan ganas de poder pensar en espacios de de reflexión más sistemáticos .

C.P.: Me parece importante reforzar la idea de que el pensamiento y la práctica que nos dejó como legado Paulo Freire, tiene muchísima actualidad, a veces queda como que es un pensamiento que quedó antiguo y tienen muchísima actualidad y además nos permiten construir diálogos y puentes con muchos otros pensamientos y prácticas que se vienen generando en los últimos años y que pueden ser alimentados y de hecho se nutren en los aportes de Paulo Freire. Y eso también me parece re interesante, poder tender puentes.

RLN:  Te tiro una más. Hay toda una corriente ideológica que milita la descolonización incluso de las ideas y de los de los pensamientos de izquierdas y que plantea que en Nuestra América tenemos pensadores y constructores de una identidad ideológica propia que incluso le da una vuelta a las cuestiones, o encara por otros lados, las cuestiones que se han encarado en otras partes del mundo. Paulo Freire es uno de esos referentes que se ha nutrido también de otros tantos y otros tantas como como José Martí, Simón Rodríguez, y otros y otras tantas, ¿qué pensás de esta de esta idea decolonizadora?

C.P.: Ay, mirá, eso yo creo que todos los los planteamientos decolonizadores son importantísimos, nos ayudan a pensar. Que siempre tenemos que anclarnos en el territorio y en el que nos encontramos, y eso es lo que pensamos también como educadores. Cada vez que construimos prácticas situadas incluso en el contexto de una pequeña comunidad rural en la que desarrollamos nuestra práctica, entonces el pensamiento situado es un pensamiento fundamental para construir saberes y para construir prácticas, así que desde ya la referencia práctica situada, esa prácticas que se construyen desde Nuestra América y las teorías que se construyen desde Nuestra América Indígena, desde Nuestra América Popular son fundamentales para construir un pensamiento autónomo, pero yo soy de la idea de que no es necesario renegar de todo lo que venga del afuera, entre comillas. Hay muchísimo que viene del afuera y de lo que también podemos nutrirnos. Digamos, no soy de la idea de que una cosa sí y la otra no. Creo que es re importante hacer nuestra propia tarea de selección de aquello que nos puede nutrir y de aquello que puede alimentar una línea de pensamiento que tiene que ser necesariamente propia.

RLN:  Tal cual. Muchas gracias Celina, la verdad que es muy grato poder escuchar y poder contar con tu  mirada. De hecho, ahí me están llegando mensajitos que dicen qué bueno escuchar voces como la de Celina en el programa este, así que bueno, mirá, el agradecimiento es amplio.

C.P.: Y bueno, siempre dispuesta a lo que  pueda aportar. Es cierto que muchas veces estoy viviendo, trabajando en lugares alejados y a veces se nos complica este tener presencia en acciones que se van llevando a cabo por las zona de Bolsón y la comarca pero nunca me desvinculo del todo, así que bueno, estoy para lo que se necesite. Sin dudas quedo abierta a cualquier otra invitación en la que podamos seguir conversando.

RLN: Dale sin dudas, vamos a hacer uso de esa invitación y te vamos a volver a convocar en algunas semanas. Muchas gracias Celina ¡un abrazo!

ALCOHÓLICXS ANÓNIMXS, UN PROYECTO PARA LA SALUD, QUE TAMBIÉN FUNCIONA EN EL BOLSÓN.


El Bolsón (ANPP).- Si el sistema capitalista nos enferma, porque nos somete a la pobreza, a las malas formas de vincularnos, a caer en vicios para intentar olvidar, también es cierto que como humanidad somos capaces de generar espacios de salud, de cuidado. Alcohólicos Anónimos es uno de esos espacios. Y Bolsón tiene su grupo. 
Desde Radio La Negra conversamos con dos de sus usuarios, Héctor y Jorge, quienes nos cuentan de sus historias y nos invitan a no abandonarnos, a apreciar la vida. 
Compartimos la charla:

Radio La Negra: Estamos con Jorge y Héctor, que son parte del grupo San Cayetano de Alcohólicxs Anónimxs de El Bolsón. ¡Buenas tardes!

Alcohólicxs Anónimxs: Buenas tardes, mi nombre es Héctor, pertenezco al grupo San Cayetano de Alcohólicxs Anónimxs, de El Bolsón, y queremos hacer la invitación extensiva a todo aquel compañero o compañera que quiera acercarse a la charla que se hacen los días miércoles y sábados a partir de las 20 hs en el Hospital.

RLN: ¿Por dónde se entra al Hospital para llegar a esa hora?

AA: Por la calle Pellegrini, se entra por donde era anteriormente la cocina del Hospital.

RLN: Sería esa calle que está entre el Hospital y la escuela 270.

AA: Esa es.

RLN: Cuéntennos un poco qué es el grupo de Alcohólicxs Anónimxs, ¿cómo funciona?

AA: El grupo de Alcohólicxs Anónimxs funciona para toda aquella persona que tenga problemas con el alcohol. Puede arrimarse al grupo, y que tenga interés para salir, porque hay que tener voluntad para salir del alcohol. Pero se puede. Se puede porque yo soy un enfermo alcohólico y pude salir gracias a mi obediencia, a asistir a los grupos. Pude salir del alcoholismo, así que, poder, se puede. Mi mensaje es ese para la gente que tenga problemas, que no tenga vergüenza y se arrime a los grupos que tenemos. Estamos para eso, para ayudarles y que puedan salir adelante.

RLN: Jorge, ¿qué cambió en tu vida cuando pudiste dejar el alcohol?

AA: A mí me cambió todo al 100 por 100. Yo era alcohólico casi crónico, llegué a beber alcohol con agua; después vino la rotura de familia, separación. Y tuve la gran suerte de un Coordinador de Alcohólicxs Anónimxs que me dio el mensaje y pude llegar al grupo; y después la obediencia, porque uno tiene que tener obediencia y paciencia para poder salir adelante. Y pude, pude salir y ya llevo 22 años y bien. Así que mi mensaje es para que la gente no sienta vergüenza de estar en un grupo. Pero somos un grupo amigo y estamos para eso, para ayudar a que puedan salir de la enfermedad del alcoholismo.

RLN: ¿Hacé cuánto que pudiste dejar el alcohol, Héctor?

AA: Yo hace 27 años que dejé de beber, como decía Jorge, con la ayuda de la excelente persona que había en ese momento, que es el Coordinador del grupo, que nos enseñó, nos encaminó, para que hoy seamos la persona, no sé si ideal, pero sí con un esfuerzo y con las ganas de que, aquel que tenga problemas de incentivarlo, de que es una enfermedad que no tiene cura pero sí se puede detener. Sólo la obediencia y de que uno, muchas veces parecemos muy repitentes de esto, de que cada uno el mensaje que da lo dice por la experiencia de haber padecido esta enfermedad que no tiene cura pero sí se puede detener. Tener esta fuerza de voluntad y así motivar tanto a hombres como mujeres, adolescentes, que se acerquen, que se puede. Como decía Jorge, nos cambió la vida. Seguimos siendo alcohólicos pero en recuperación. Tenemos defectos y también tenemos virtudes, que el alcohol nos estaba tomando.

RLN: Tomar una decisión tan drástica, dejar de un día para el otro, es algo que requiere de mucho coraje, de mucha valentía. ¿Hubo algo en particular que te hizo tomar esa decisión, Jorge?

AA: Sí, a mí… Yo toco fondo y el problema con mi familia; mi mujer me deja y me tengo que ir de la casa, mis chicos eran todos chiquitos. Tuve la gran suerte de conocer al Coordinador de Alcohólicxs Anónimxs, que en paz descanse. A él le debo todo porque gracias a él salí adelante. Fui obediente porque yo quería recuperar a mi familia y tuve la gran fortuna de volver a recuperarla, pero toda la voluntad fue mía de salir adelante y decirle no más al alcohol. Gracias a eso pude salir adelante. Hoy me siento orgulloso. Soy un enfermo alcohólico y no siento vergüenza de decirlo. Estoy recuperado.

RLN: ¿Qué le podés decir a las mujeres de esas parejas en las que el varón es alcohólico? ¿Hoy qué reflexión hacés de ese acto que tuvo tu compañera de ponerte un límite?

AA: Lo que pasa es que hay distintas mujeres. Hay mujeres que tiene mucha paciencia; al marido lo quieren, lo aguantan. Pero todo tiene un límite. La mujer llega un momento que se cansa porque los alcohólicos somos astutos, mentirosos, “mañana voy a dejar de tomar”, “tomo este fin de semana y después lo dejo”. Mentira, porque seguimos tomando. Mientras la mujer lo aguanta, seguimos tomando. El problema es cuando lo deja, cuando viene la separación. Esas mujeres, si quieren a su marido, que lo ayuden. Nosotros tenemos compañeros que la señora llevaba al marido al grupo, y eso es bueno porque es una ayuda. Pero tiene que salir de la voluntad de él, de cada uno. Y tener ganas de dejar de tomar. Pero no es para cualquiera.

RLN: ¿Querés repetirme, Héctor, qué días, horario y dónde es que se puede acudir a estas reuniones de Alcohólicxs Anónimxs?

AA: Sí, los días miércoles de 8 de la tarde y el sábado también, de 8 de la tarde, en la calle Pellegrini. Ahí los vamos a estar esperando. Yo voy los días sábado, los miércoles no puedo ir por el tema del trabajo, pero yo quería acotar algo: no solamente todo el que toma alcohol es alcohólico, sino que es otra etapa del alcoholismo, y por ahí están haciendo uso del alcohol, y tal vez se lavan las manos y van a la US. Y después está la dependencia. Nosotros somos dependientes del alcohol y, como bien decía Jorge, la paciencia que tiene la familia. También enfermamos a nuestros seres queridos que nos apoyan, pero también llega un momento que te bajan la cortina y bueno, muchos tienen la suerte en recuperar su familia. Yo soy uno de ellos que no tuve la posibilidad que han tenido muchos compañeros de recuperar a sus familias, pero hoy me siento feliz, con una familia nueva porque conocí otra persona, que actualmente es mi pareja, y hoy puedo demostrarle, no para demostrar para que yo soy más que otro, pero sí ante el alcohol hoy puedo ser otra persona, ser feliz, saber por dónde uno anda. Yo, a toda aquella persona, hombre o mujer, porque esta es una enfermedad que no respeta clase social, tampoco sexo, caen muchísimo a través del alcohol, los invitamos a todo aquel que quiera acercarse, que no sienta vergüenza. Es peor lamentar después lo que nos ocurre a través del alcohol.

RLN: Me pongo en el lugar de la persona que quiere llegar. Llega a esa puerta, que es verde, del Hospital, que hay que subir una escalerita, abre la puerta, que tiene un resorte, así que hay que empujarla fuerte, porque parece que está cerrada pero está abierta, y ahí ¿qué hacés? Entrás, chocás con pasillo, ¿para dónde se va?

AA: Ahí siempre hay una persona que trabaja en el Hospital, que pregunte dónde se está realizando la reunión y los vamos a esperar, o lo espera el Coordinador Jorge. Él es ahora el Coordinador del grupo. Tenemos un apoyo, un pilar. Ojalá sigamos en esta senda.

RLN: Hay que ser puntual, entonces. A las 8 de la noche, ahí.

AA: Sí, muchas veces la puntualidad la pone el Coordinador, a las 20 horas justo, ahí, pero siempre tiene unos 10 o 15 minutos de espera afuera para incentivarlos, ayudarlos, que conozcan el lugar, y después ya solos se van ubicando. También quería invitar a aquellos que tengan familias con problemas de alcohol y que, si hay alguno que tenga problemas con el alcohol directo, que vaya con algún familiar. Porque antes se hacían las reuniones solamente para la persona que padecía la enfermedad del alcoholismo porque es anonimato, pero no deja de ser que, si a la familia le interesa entrar a la reunión, puede hacerlo.

RLN: Buenísimo, ¿querés decir algo más, Jorge?

AA: No, está bien. El mensaje es ese.

RLN: Felicitaciones por ese sostenimiento en las cosas. Hoy cuesta mucho sostener todo, hasta las convicciones más livianas, y sostener esta convicción no es poca cosa, así que felicitaciones.

AA: Gracias. Muchas gracias. Y gracias por el momento que prestaron para que nosotros podamos invitar a toda aquella persona que lo necesite.


martes, 13 de septiembre de 2022

COOPETEL, AL SERVICIO DEL PUEBLO


El Bolsón (ANPP).- Las cooperativas suelen ser usadas como una máscara para evadir impuestos, precarizar el trabajo, para tener acceso a subsidios estatales más fácilmente por parte de empresas que son comerciales y lo siguen siendo cuando figuran como cooperativas.  Pero también, y para eso fue creada esa figura, son emprendimientos destinados a satisfacer necesidades sociales. Emprendimientos en los que sus protagonistas son actores de la necesidad y de la solución. 
Charlamos con Alicia Arrias del consejo directivo de Coopetel, quién da cuenta de la diferencia entre una empresa y lo que es Coopetel. 

Radio La Negra ; Buen día Alicia, queremos charlar con vos porque Coopetel es la cooperativa más grande de nuestra comarca. ¿Cómo se organiza, cómo funciona?

- Coopetel: ¡Buen día! Sí, es como vos decís, es una cooperativa muy grande. Es muy compleja la organización, mucho más de lo que se ve de afuera. Cuando uno está adentro dimensiona realmente lo que es, mueve mucho, no solo dinero, sino también mucha gente y muchas responsabilidades también. Siempre el espíritu de la conducción que está ahora, a la que pertenezco, el espíritu es comunitario. Es decir, un bien para la comunidad, no ser tanto empresa sino más cooperativa. Esto lo tenemos como base para nuestro accionar diario.

-RLN: En ese sentido, a Coopetel desde esa perspectiva le preocupan cuestiones que a una empresa capitalista no le interesarían. Contanos algunos de esos proyectos que están encarando, digamos, desde esa perspectiva.

-C: Bueno, tiene que ver con varias cosas. Desde el tema de telecomunicaciones estamos, por ejemplo, yendo a la ruralidad donde nunca nadie quiere ir. Históricamente vamos a conectar, por ejemplo, al paraje Los Repollos, es histórico, es un reclamo que tiene muchos años esa comunidad. Así que nosotros la encaramos, no es tanto un negocio porque sabemos que las poblaciones dispersas tienen eso; más que un negocio lo llevamos con un fin más social o comunitario para que la gente esté conectada. Eso desde las telecomunicaciones. También ayudamos a varios centros de salud, por ejemplo, llevamos internet a varios centros comunitarios. Además de la 7 puntos de Wifi libre que pusieron en el pueblo, que era un proyecto que ya estaba, y que nosotros lo concluimos.

-RLN: A ver contame ¿cómo es eso?

-C: Claro, hay siete puntos de Wifi que es un convenio con el municipio en el pueblo. En el centro. Es barrial también, hay uno que está bastante cerca del Yrigoyen, no sé darte exactamente la locación. Hay una en la Plaza España, eso sí lo sé; hay otra en Plaza Pagano, claro son muy céntricos, que son de wifi libre.

-RLN: O sea, vos vas con tu dispositivo y se te conecta a una red que está abierta.


-C: Exacto, es una red abierta a la comunidad y a la gente, al turismo. Es abierta. Esto es en convenio con el Municipio; y nos encontramos con este problema: Coopetel cumplió con todo y el Municipio no ha hecho el trámite digamos, de la parte que a él le toca. Así que tenemos conectados un par y estamos en eso. Esto me refiero dentro del proyecto dando siempre a la comunidad, no convertirla tanto en un negocio sino ver de qué manera Coopetel ayuda.
Y tenemos también la Fundación. La Fundación es muy importante en Coopetel porque hace muchos trabajos de ayuda que poco se sabe. Ayudamos todos los meses a dos o tres instituciones deportivas que, por ejemplo, nos piden ayuda. Todos sabemos lo difícil que es mantener un club donde hay 100 chicos queriendo jugar a la pelota, al fútbol y organizarse no es tan fácil. Así que bueno, siempre estamos ayudando a algún club. Tenemos un procedimiento de ayuda siempre a partir de la Fundación, por ejemplo. Te voy dando así un salpicado de lo que se me va ocurriendo.
Y después tenemos el área que es la Coordinación de nuevos proyectos que era para lo que vos me habías convocado primero. Estamos siempre viendo qué nuevo proyecto podemos hacer, un poco para diversificar también el negocio si se quiere de la cooperativa, pero por otro lado que también tenga estas puntas sociales, comunitarias o amigables con el medio ambiente. Esto es fundamental para nosotros ya te digo, por lo menos para nuestra comisión, para nuestro grupo.

-RLN: ¿Y qué se está encarando desde esa comisión?

-C: Desde esa comisión estamos encarando varias cosas, y una de las más importantes -que no es nueva- es un proyecto que está desde hace varios años en Coopetel, que es el de los pellets de madera. El tema de los pellets de madera es muy amplio pero más o menos para explicar cómo es la cosa, es un condensado que sale como…unos cilindritos que los venden también para la caja de los gatos en algunos lugares. Pero se usan para combustible en estufas…

-RLN: O sea, son como los alimentos balanceados, un poco más gruesos, pero de aserrín de madera.

-C: Exacto, de aserrín de madera. Tienen que pasar por un proceso de secado, se muelen más, se hacen casi polvo muy finito, tiene que ser aserrín y después se condensa mucho, mucho, bien apretado, tanto que salen esos chorizitos, digamos de madera y la característica es que tiene que ser hiperseco; el único cuidado que hay que tener cuando uno lo usa es que no se moje…

-RLN: Que no se humedezca.

-C: Exacto, que no se humedezca. Entonces, al estar tan seco este producto lo que permite es una combustión casi completa de esa materia y produce menos emisiones de gases particulados de carbón a la atmósfera, y no produce casi residuos tampoco ni de ceniza ni de la creosota. La creosota es este hollín que se pega a los caños y trae después tantos problemas en nuestra zona, incluso tantos incendios.

-RLN: Discúlpame que me salga también un poquito del libreto como hizo Romi en la nota anterior. Me sorprende Alicia, la creoqué? La creosota … sos una técnica ya…

-C: La creosota… se llama así. Es el hollín que se le pega al caño, que hay que estar limpiándolo. La ventaja para nuestra zona de tener una planta de peletizado, esa es la idea, aunque es muy cara, esa es la verdad. Estamos en un momento difícil financieramente para todos, no solamente para nosotros como cooperativa. Es un momento difícil para hacer una inversión de varios millones que sale. La ventaja de todo esto es que esta planta peletizadora utiliza todos los residuos de los aserraderos…

-RLN: Y aquí hay un montón.

-C: Sí, hay un montón. No es tan fácil, no es que yo voy y agarro el aserrín del aserradero, lo meto en la máquina y sale el pellet. A medida que vamos un poco investigando, como decía yo, es un proyecto que ya estaba escrito y yo lo agarré otra vez porque me pareció muy interesante. Y lo seguimos investigando. Hay mucha investigación al respecto de lo que se llama biomasa, que es toda la masa biológica arbórea o de deshechos forestales que hay en disponibilidad. Hay muchas investigaciones en la zona. Tampoco se sabe tanto. Hay una hecha por el CIEFAP, (CENTRO DE INVESTIGACIÓN Y EXPERIMENTACIÓN FORESTAL ANDINO PATAGÓNICO) de hecho somos socios con el CIEFAP. Tenemos un convenio de investigación mutuo para el desarrollo de los pellets de madera. Y también hizo uno muy grande la Fundación del Invap, una investigación respecto a la biomasa, en Bariloche obviamente, donde está el Invap y lo hizo con el Splif, al ser nuestra localidad. Intervino en esto Nico De Agostini; él estuvo trabajando en esto, muy interesante, muy técnico el resultado de todo este estudio. Está muy bueno para basarse en todas estas cosas investigadas que son muy nuevas, son de hace dos años. Así que bueno, estamos trabajando en eso porque no es como decir me compro una peletizadora, tiro aserrín y empiezo a vender o en fin, sino que tiene mucho más para investigar y ver qué es lo óptimo, ¿no?

-RLN: Impresionante lo que hay dando vuelta, porque todo lo que se podría hacer cuando uno no piensa en ganar plata, porque esto de los pellets vendría después con las estufas…

-C: Claro, el hecho es ese. Las estufas actualmente están en el mercado, incluso acá hay un corralón grande famoso que las vende ahora, desde hace poco, supongo que por la promoción que nosotros le hacemos a los pellets. Las estufas son muy específicas porque deben tener un tipo de combustión específico para quemar los pellets. De entrada necesitan un impulso energético para que ardan. Una vez que arden, la llama es como un soplete, la temperatura que levantan. Y también hay otras que son para doble propósito, es decir, que se pueden usar con pellets y con leña también; sabemos que acá en la zona hay algunos que las están utilizando y bueno, no son tan eficientes.
El problema es cambiarle la cabeza a la gente, que la gente comprenda que puede tener una leña distinta al palo que le meto a la salamandra. Podés tener la opción de usarla de las dos maneras. Estamos desarrollando una parte para ver si se pueden fabricar esas estufas acá en la Comarca. Tenemos varios fabricantes de estufas muy exitosos como los chicos de la Cooperativa Manos de hierro, de El Hoyo o de Puelo, no sé bien de dónde son. Son los chicos que hicieron las estufas para los módulos, que tienen unos ladrillos refractarios, son muy buenas las estufas que hicieron. Yo tuve la oportunidad de conocer a los chicos en la Expo Coop que se hizo en El Hoyo y es muy interesante como ellos han estudiado todo el tema de la combustión. Digo, se podrían estar fabricando las estufas perfectamente en la Comarca si ponemos este proyecto en marcha. Se podrían poner en marcha otros también a la vez, no todo lo tiene que hacer la Cooperativa. Nuestra intención es crear más cooperativas que lo puedan hacer, más grupos de trabajo, como sea.

-RLN: Qué interesante Alicia. Esto va a dar para seguir charlando un montón. Y lamentablemente el programa hoy se nos fue pero cumplimos, por lo menos, con encontrarnos (iba a ser una llamada telefónica), y la ventaja es poder charlar cara a cara. La desventaja es que la radio está un poco fresca…

-C: Este es un invierno que no se quiere ir. Hay que pensar en los pellets.

-RLN: Tal cual. Por lo menos hay que poner una estufa, algo…

-C: Una estufa estaría bueno…

-RLN: Bueno Alicia, muchas gracias por acercarte y por toda esta información que nos abre un montón de preguntas para seguir charlando.

-C: Gracias a vos por el espacio!


lunes, 12 de septiembre de 2022

COMUNICADO: SEGUIMOS EN PIE DE LUCHA

Luego de la bochornosa votación a puertas cerradas del 9 de septiembre, lxs legisladorxs de Río Negro modificaron la ley 3308 que protege al golfo San Matías de la contaminación por hidrocarburos. No respetaron los procesos democráticos estipulados hasta en el mismo reglamento interno de la Legislatura.
 
El proyecto se trató en las comisiones el 24 de agosto y un día después era aprobado por unanimidad en primera vuelta. El viernes pasado solo un legislador votó en contra: el resto decidieron darle la espalda al pueblo y no escuchar a quienes estaban manifestándose pacíficamente fuera del recinto.
 
No pueden violar tratados internacionales ni la legislación nacional en materia ambiental. Aunque el proyecto de YPF para construir un oleoducto de 700 km cruzando la provincia y un megapuerto petrolero al sur de Sierra Grande es de público conocimiento, ahora comienza una etapa de resistencia en la justicia para frenar esta locura ecocida.
 
A lxs legisladorxs les decimos: NO HAY LICENCIA SOCIAL PARA QUE NOS QUITEN UN DERECHO AMBIENTAL ADQUIRIDO.
 
Sabemos que 6 km de ducto submarino y una monoboya en Punta Colorada para la carga de megabuques petroleros va a impactar en el ecosistema del Golfo: cerca del emplazamiento hay un sitio de cría y reproducción de la merluza (principal especie de la industria pesquera junto con el langostino). Además de afectar la ruta de la ballena franca austral, las corrientes marinas interconectadas con el golfo San José en Chubut amplían el impacto ambiental a Península Valdés, patrimonio mundial de la humanidad.
 
Legisladorxs, políticxs, empresarixs y algunos sectores de la dirigencia sindical han decidido ponerse en contra de las comunidades que viven del turismo y la pesca.
 
Hoy más que nunca repetimos: el ecocidio no es desarrollo.
No queremos petróleo en nuestras costas.
La ley 3308 no se toca.
A nuestro Golfo lo defendemos entre todxs.
 
Multisectorial Golfo San Matías




CONECTAR CON LA VIDA, VOLVER A LA TIERRA. ENTREVISTA A CARLOS GARCÍA, DE LA RED LATINOAMERICANA DE ARTE Y SALUD MENTAL

El Bolsón (ANPP).-Cada sábado en Música y Noticias,el informativo de Radio La Negra, nos damos una vuelta por Nuestramérica, porque para entender nuestra realidad, es preciso mirar amplio, abrir los sentidos, recuperar las experiencias y habilitar la creatividad. 
Este sábado charlamos con Carlos García, venezolano  educador popular y psicólogo social, referente de la red de Arte y Salud Mental de Nuestramerica. 

Les invitamos a compartir miradas, análisis e ideas que aparecen en la charla con Carlos:

Carlos García: Buenos días Radio La Negra, buenos días a la Argentina, ese país del sur que nos compromete también a los del norte de este continente, al norte de Sudamérica, a construir una patria grande. Por acá en la tarea, como diría Pichón (Rivière), de construir proyecto y futuro.

Radio La Negra: Carlos García es compañero que habita Venezuela, es venezolano. Carlos, qué lindo saludarnos de esta manera, así, uniendo el norte y el sur de América del Sur.

CG: Así es, creo que es una tarea pendiente de un proyecto que aún está en ciernes, proyecto inacabado; ese abrazo entre San Martín y Bolívar que quedó en espera, un abrazo de pueblos nuestroamericanos. Y en ese afán o en ese espíritu es que tenemos que encontrarnos, al parecer, porque definitivamente la gente, independientemente del signo político, está pensando en un proyecto que muchas veces es distinto al nuestro, ¿no? O tal vez el nuestro es el que tiene que ser siempre conversado, dialogado, construido siempre…

RLN: Tal cual. En esto de ser educador popular y de estar trabajando en la Red Latinoamericana de Arte y Salud Mental como una estrategia, justamente, de construir ese proyecto que decís, últimamente se está hablando mucho de la decolonización, de poder pensar cuáles eran nuestros proyectos. Y digo ‘nuestros’ y ‘cuáles eran’ porque hay pensadores latinoamericanos que desde hace muchísimo tiempo vienen pensando en una construcción otra, que incluso las construcciones revolucionarias que nos vienen de otros lados.

CG: Sí, es un desafío, no sólo el pensar, sino ahora poner en el terreno de lo concreto cuáles son las prácticas de la decolonización. Y cuando uno o una ha atravesado por esa palabra, decolonización, y está en búsqueda de esa práctica, empieza a resquebrajarse toda una forma de hacer la vida o de producir la vida, una forma que ya para nosotros se va convirtiendo en una suerte de forma patológica de reproducirla. La que conocemos como el capital y todo esto, que a veces nosotros lo hablamos muy abstractamente pero que en el plano de lo cotidiano se ve muy presente en las formas de relación que se tiene entre los sujetos, entre las personas; nosotros mismos con la tierra, con los animales, cómo los tratamos. Y en ese afán, entonces, ¿cuál y cómo sería una práctica de decolonización desde la vida cotidiana? Con la tierra, con nosotras, con nosotros Con los compañeros, con las compañeras; con los viejos, las viejas nuestras, los ancestros, que en nuestra cultura están tan dejados de lado. Con los niños, que son vistos también como cosas. Digo así, ‘cosas’ que tienen que aprender para que se conviertan en adultos funcionales a este modo de reproducir la vida. Entonces, en algunos diálogos, en algunas reflexiones, hemos aterrizado en que, para pensar decolonialmente, hay que estar aún más fuera de la ciudad que adentro de ellas, porque a fin de cuentas la ciudad es el modelo reproductor de ese proyecto civilizatorio llamado modernidad y de repente en el campo están otras respuestas, otra relación con el mundo, con la tierra, de la cual tenemos que aprender muchísimo.

RLN: En esto que decís, las pantallas -ya sean de teléfono, de televisión, tablets, computadoras- juegan un rol fundamental en la colonización cotidiana de tantos hermanos y hermanas, ¿no?

CG: Sí, la realidad está mediada por el dispositivo digital. Uno se pone a revisar o a mirar alrededor y la mayoría de la gente pasa su mayor tiempo de vida dentro de cuatro paredes y ahora no sólo dentro de cuatro paredes, sino dentro del cuadradito del dispositivo digital, y no se atreve, de repente, por allí, a echarle el ojo hacia un lado para ver qué hay más allá, o más acá, porque a ratos ni siquiera al que tengo al lado lo estoy mirando, sino que estoy mirándolo o escuchándolo a través de la pantalla. De repente, por allá, el dispositivo digital te impide la vinculación con lo cotidiano, con eso que se tiene de frente, y comienza el sujeto también a vivir una vida que no le pertenece ni siquiera, que no es suya. Y creo que antes bajaron con la cruz y con la espada, y ahora vienen con dispositivos digitales y metralletas.

RNL: Nunca abandonaron las metralletas, tampoco. Nunca abandonaron la opresión armada, concretamente.

CG: Nunca. Y también el marco en que eso se fue legitimando. Si uno va, por allá, a buscar algunas películas muy taquilleras de Hollywood de los años 80, 90, vemos que toda la narrativa está puesta sobre el tema de la guerra; ahora más. Pero aquello era el heroicismo, por ejemplo, de un Rambo o un Schwarzenegger, y eso se fue incorporando también dentro del sujeto colonizado como referente a seguir y despreciamos lo nuestro o nos veíamos débiles, como es el caso de los vietnamitas en Rambo, o los afganos, también en Rambo, y me parece que por allí comienza también a legitimarse la posición del colonizador sobre nosotros mismos.

RLN: En este sentido, de poder pensar en la construcción de un proyecto nuestroamericano, Venezuela ha avanzado varios pasos con respecto a otros países hermanos. ¿Cómo se vive eso por allí?

CG: Voy a hacer un recuento lo más sintético posible para darle sentido a esa pregunta. Con Hugo Chávez avanzamos en ese proyecto histórico de ese abrazo que quedó pendiente entre San Martín y Bolívar, y de los pueblos que sustentaban y la gesta de San Martín y Bolívar, que le daban sentido. El proyecto constituyente del año 98 hizo un reconocimiento distinto de un sujeto que estaba históricamente negado. En el artículo n° 5 de la Constitución se habla de una democracia protagónica y participativa que, si no me equivoco, por ejemplo, la Argentina dice que el pueblo no deliberará sino a través de sus representantes. ¿Es así?

RNL: Sí.

CG: Acá no, acá la democracia está puesta en el pueblo como sujeto y no como objeto representado. Eso le dio una característica al pueblo en que ya se asumiera como constructor de su propio destino, decisor de su propio destino. Y con Chávez a la cabeza sentimos eso muy cerca y posteriormente se crearon una serie de leyes orgánicas que nos permitieron a nosotros ir desmontando de ciertas formas del aparato burgués, hasta un punto. Eso se llamó, en parte, la Ley orgánica de comunas, por ejemplo, de consejos comunales, en la que se le da también la administración de espacios territoriales, pero también la administración de los presupuestos solicitados por parte de los consejos comunales a través del Consejo Federal del gobierno para la ejecución de distintos proyectos en el campo socioproductivo y también en el campo de infraestructura. Pero esa condición -por llamarla de algún modo- objetiva, también tenía, de cierta forma, un condicionante subjetivo que nos dificultó la incorporación concreta o completa de ese afán liberador. En los últimos años hemos visto una disputa interna y externa de la imposición del otro proyecto que ya conocemos todos en nuestro continente, que es un neoliberalismo, en el caso nuestro ahora potenciado por el tema de las sanciones. Estamos contra la luna y a veces cediendo un terreno que es muy delicado, que es el terreno del plano de lo concreto, por las mismas condiciones materiales de alimentación, de indumentaria, de infraestructura, que nos llevaron a condiciones muy fuertes, en que un salario mensual de un trabajador de la administración pública era de un promedio de 3 dólares mensuales. No es muy diferente ahora, que son más o menos 12 dólares mensuales. Sin embargo, la revolución, como dijo Chávez en algún momento en un discurso, si no me equivoco, en el 2006, cuando es incorporada por el pueblo, pudo darse el lujo de perderse porque va a resucitar desde el pueblo mismo. Y creo que ese es el sentido de lo que se ha avanzado en términos de que Chávez, como un emergente histórico de un proceso que tiene más de 200 años, lo que hizo fue ser portavoz de un sentir de un pueblo que estaba históricamente negado, ninguneado, y que, en este caso, se puso sobre la palestra el campo de lo político. Creo que en algún momento el pueblo va a volver a tomar esas riendas, no sé cuándo ni cómo, pero creo que va a ocurrir; y ahora nos encontramos en un proceso de reorganización a nivel interno, sobre todo en el plano de los consejos comunales o de las comunas, sobre todo en las del campo rural, que están intentando pensar cómo producir la tierra de otra manera. Por eso digo que el desafío está puesto en el campo rural y, de alguna manera, ruralizar la ciudad, ese diálogo entre ciudad y campo, que tiene que ser distinto. En la ciudad se acostumbra consumir lo que se produce en el campo pero nunca se pregunta cómo produce el campo.

RNL: Esto que resumís muy claramente da un poquito de temor porque uno tiene también esa idea y esa educación, que no viene de otro lado que del capitalismo, de que las cosas se adquieren y, una vez que uno las tiene, son de uno y nadie se las va a sacar. Esa idea de la propiedad privada traspolada incluso a los procesos, a las ideas, y sabemos que eso no es así, que justamente la revolución se revoluciona todos los días o deja de serlo.

CG: Asimismo. Te atajo allí porque creo que es importante permanentemente reflexionar qué es revolución, hasta dónde es revolución, porque, a fin de cuentas, si la revolución es una idea fija, termina siendo un futuro predeterminado y lo que hace es matar a la creatividad.

RLN: Tal cual.

CG: Y creo que, para enlazar con el campo de la salud mental, que la salud mental tiene que ser una práctica popular, una práctica de los pueblos mismos, tiene que ver con la recreación permanente de sus condiciones de vida. La creatividad en las formas de poder representar y hacer la vida y producirla de otra manera; poder recrearla de otra manera.  Y dentro del capital eso es imposible, entonces hay que buscar fuera del capital. Y ahí están los múltiples pueblos que existen fuera de lo que llaman modernidad. Acá, en Venezuela, existen más de 43 pueblos vivos, con todo su mundo, que pueden enseñar, que pueden hablarnos, que pueden decirnos cómo se hace la vida de otra manera. Y en el continente no sé cuántos pueblos habrá distintos al habla de la lengua española o portuguesa que pueden mostrarnos otra forma de hacer la vida, otra forma de producirla. Y la salud mental creo que está puesta en ese terreno, en cómo se hace la vida, en cómo se consume también lo que se produce, en cómo, entonces, se va creando el arte a partir de lo que va entretejiéndose entre el pueblo, entre lo que le va ocurriendo a cada quien con la forma de producirla, lo que va dialogando; en cómo va incorporándose en el mundo de cada quien, después se transforma en una suerte de diálogo interno que tiene que salir hacia afuera con arte, con pintura, con escultura, con otras formas también de poner afuera lo que le ocurre a la persona adentro. Creo que ese proceso es el que está allí, siempre germinando; una germinación permanente, una suerte de recreación latente que intenta salir pero que a veces nos cuesta un poco y que, a fin de cuentas, en la medida en que dialoguemos entre pueblos, podemos compartir eso que está allí muy poco dicho, muy poco conversado, muy poco transcrito, traducido en el arte, que se va a ir constituyendo en una forma de expresión que, hasta ahora, están allí, como represadas.

RLN: Y el arte también traspolado al hacer revolucionario porque, donde no hay camino, hay que inventarlo. No podemos intentar repetir recetas anacrónicas y descontextualizadas. Cada espacio necesita sus propios creadores y creadoras de esos caminos.

CG: Así es. Voy a hacer acá, aprovechando el espacio, algo de analogía entre ese proceso creador y lo que estamos viviendo acá, políticamente, en Venezuela. Por efecto del bloqueo, estamos siendo llevados u obligados a apelar, para sortear las sanciones, las medidas coercitivas, a un paquetazo, a medidas neoliberales clásicas, el shock monetario clásico, en que se reduce el consumo, se reduce el salario de la administración pública, los embajadores de los privados también, para que no haya, supuestamente, exceso de liquidez, inflación y todo aquello que ustedes también están viviendo un poco. Esa forma tradicional de pensar lo económico nos está llevando a un plano en que hay un retroceso muy fuerte en los avances del campo popular y del proyecto nuestroamericano planteado por Hugo Rafael Chávez, en el proyecto que llamaron Plan de la Patria 2013-2019, y ese proyecto histórico retomado de Bolívar y más atrás de él. Hay otra propuesta que pudiésemos llamar, hasta a un punto, creadora, es un riesgo, pero una propuesta más creativa, que es lo que llaman indexación. Esa propuesta de indexación que hacen algunos economistas que están también de este lado, apoyando un proceso de liberación, un proceso de construcción distinta, se ancla en una propuesta que es más cercana a nosotros y que, además, no pauperiza el salario, por ejemplo. Pero dentro del establishment que está ahora cercano al gobierno nacional, que además está articulando, de cierta forma, con algunos capitales, hasta con el Fondo Monetario Internacional, en algunos diálogos y discusiones, estamos viendo que esa propuesta de sanción es peligrosa para ese proyecto, que es lo mismo de siempre, esa receta conocida llamada neoliberalismo, ahora tal vez de nuevo cuño que se está tratando de entrar a través del shock que nos aplican. La pregunta es: nuestros propios intelectuales, nuestros propios procesos, tienen que parir nuestras propias teorías, tienen que dar cuenta de nuestra propia realidad, tienen que resolvernos de lo que sentimos, de lo que pensamos, de lo que nos ocurre. Por eso decimos siempre que pasa por cómo se produce lo que se come, cómo se consume lo que se produce y cómo después eso que se produce y que se consume, cómo se vuelve arte, cómo se recrea, cómo se traduce en el contenido artístico que, al fin de cuentas, es lo que va a ir de generación en generación.

RLN: En este planteo que se están haciendo desde la Red Latinoamericana de Arte y Salud Mental allí en Venezuela, ¿cómo están concretando ese proyecto?

CG: Acá, con Ale, que lo entrevistaste la semana pasada, armamos hace una década una escuela de operadores sociales para la salud mental. Ya sabemos que el enfoque de ser operador para la salud mental es constituirse como agente de cambio. Y no es cualquier cosa hablar de agente de cambio; es ir muchas veces contra todo aquello que en parte también somos y que, ahí, se constituye una suerte de tensión muy fuerte porque es contra uno mismo, al mismo tiempo en ir hacia ser otro. No es cualquier tarea. Y esa escuela de operadores sociales para la salud mental, por efecto, ocurrió acá en el 2014, hacia el 2022, 0 2021, nos llevó a un estado repliegue muy, muy complejo. La escuela vuelve a retomarse aproximadamente hace un año de nuevo su fuerza, y nos estamos vinculando desde la Red Latinoamericana de Arte y Salud Mental para empezar a pensar y a hacer desde el arte una práctica que permita a aquellos que están subyugados por el sistema represivo psiquiátrico que todos conocemos una forma de pensar la salud y de hacerla, distinta. Lo que plantea el compañero Alberto Sava, del Frente de Artistas del Borda, que para nosotros es una de las experiencias de mayor ahínco, de mayor énfasis en el continente, como experiencia concreta de cómo se hace una experiencia de salud mental distinta, cómo se piensa, cómo se practica eso de la salud mental. Estamos pensando en talleres y haciendo talleres que tienen que ver, en nuestro caso, con cómo la pintura o la escultura, por ejemplo, que es lo que estamos hasta ahora empezando a arar, va permitiéndole a la persona ir comunicando cosas que desde adentro no puede. Y en esto de la salud mental, en esto del arte, es una forma de comunicación; el arte permite comunicar cosas que a ratos de otra manera es imposible hacerlo. Y a partir de allí, entonces, va apareciendo una forma de comunicación que se va a ir decodificando entre los actores. Lo que ahora nos estamos planteando, en las últimas reuniones de la Red, cómo trabajar no sólo desde el campo psiquiátrico, dentro de los muros, y trabajar más ahora en términos de la prevención, más en términos de lo comunitario, y eso nos llama a nosotros bastante la atención; cómo empezar a crear las condiciones de prevención de la enfermedad mental, la prevención de las condiciones que generan la enfermedad mental. Y creo que el arte, que es una de las prácticas que en este sistema muchas veces, o casi siempre, le está prohibido al pueblo, es la práctica que necesitamos como un instrumento que va a permitirle a la gente poder dialogar cosas que de otra manera sería casi imposible. Eso le permitiría, o nos permitiría a nosotros, crear espacios de diálogo, de comunicación que, hasta ahora, está prohibido o muy, muy limitado para el campo popular.

RLN: Bueno, Carlos, re interesante el proyecto. Ojalá podamos seguir en contacto y viendo cómo evoluciona este proyecto y este proceso que están encarando allí y que, entiendo, va a tener también su correlación en distintos puntos de Nuestraamérica. Iremos recorriendo a los distintos referentes de esta Red en los distintos países para que nos vayan contando un poco en qué se traduce en cada uno de los territorios.

CG: Así es. Nosotros esperamos, acá en Venezuela, para finales del año organizar el primer encuentro de arte, poesía y salud mental, en el que seguramente estaremos compartiendo a través de esta radio, de ustedes, como compañeros, que también hagan un poco de eco de lo que se viene haciendo en la Red lo que haremos acá, y con gusto nos comunicaremos y compartiremos algo del material que salga por acá.

RLN: ¡Cómo no! La radio está a disposición de todos y todas ustedes.


domingo, 11 de septiembre de 2022

ÉPOCA DE HUERTA, SEMILLAS PROPIAS . ENTREVISTA A MAXI, PRODUCTOR DE SEMILLAS.


El Bolsón (ANPP).-- Comienza la época de siembra. #n nuestra comarca son Miles las huertas que ya están empezando a prepararse. Y en esta tarea tan linda como sana, las semillas son un factor determinante. ¿Producir las propias semillas es posible? Claro que sí. Posible, deseable y hasta necesario. Charlamos con Maxi, hjertero y productor de semillas y esto nos decía;

Empecé porque también, al producir nuestras semillas podés elegir lo que comés. Uno va a la veterinaria a comprar o a una feria también y consigue ciertas cosas. Pero hay mil variedades de lechuga y a uno le gusta una y a otro, otra. Pero en una veterinaria sobre todo hay solo una porque esa persona, por ejemplo, no puede traer veinte variedades de lechuga porque no le conviene. Entonces, si uno no produce, si los vecinos no producen, se van acotando  mucho las variedades. Entonces, para arrancar es eso, es elegir lo que queremos comer, lo que va bien en nuestra zona. Porque también el INTA da semillas pero no te da una variedad de repollo  para esta zona de la Patagonia donde necesitamos otras variedades que son diferentes a las del Norte por el clima y bueno, esa sería una primera importancia.

También, después, porque son caras para comprar. Si todos los años tenés que comprar semillas es un presupuesto. Y también no depender de ninguna empresa de las que producen o fabrican semillas sino producirlas entre nosotros, con los vecinos, compartirlas. Así que ahí andamos, tratando de producir más, de compartir las experiencias y los saberes.

Las semillas con colores primero, no son orgánicas; son producidas en una forma intensiva por estas grandes productoras de semillas y tienen esos colores  porque le ponen productos para que no se lo coman otros animales, funguicidas, distintos productos. Esas semillas están pensadas más  para grandes producciones aunque después terminan siendo vendidas para gente que tiene huerta en su casa. Pero insisto, están pensadas para grandes producciones, donde esa gente no quiere fallar, quiere que las semillas salgan todas, que no se las coma ningún bicho, que no las ataque ningún hongo. Lo peor serían las semillas híbridas que son las que se usan más en las producciones. Porque yo cuando me han faltado algunas semillas he comprado en veterinarias zanahorias, puerros, y de ahí pude hacer semillas. Y todo bien  y las mantuve muchos años hasta que después las fui cambiando. Pero el tema con los híbridos, con los F1, uno de ahí puede hacer una semilla al año siguiente pero esa variedad comienza a decaer, esas características con los años las va perdiendo. En cambio, con una semilla criolla que nos puede pasar un vecino, ya adaptada a la zona en la que estamos, uno puede hacer semillas con los años y las puede hasta mejorar porque uno puede seleccionar precocidad, tamaño, sabor; podés seleccionar varias cosas y las podés llegar a mejorar. Pero con estas semillas que se hacen de esta manera siempre va para atrás, va perdiendo sus características. Te comiste un brócoli que era gigante y al año siguiente hacés semilla y va a ser más chico, va a perder el sabor, se van perdiendo esas características…  es el problema de las semillas híbridas.

Justo la semana pasada con un compañero acá en la Feria, él le había dado unas semillas a un grupo de productores de acá y ellos se quejaban  porque unas eran medianas, otras chicas, otras eran grandes. Y qué pasa, el  productor no puede ir jugando con estas, le tienen que salir todas grandes. Elige esas semillas de grandes producciones que son todas importadas porque salen todas parejas, todas iguales. En cambio, la semilla criolla tiene estas cosas. Pero, para nosotros en la huerta es normal que tengamos un bancal de zanahorias y salen chiquitas, otras grandes. Siempre estamos apuntando a que salgan más grande para comer más, para tener más comida disponible para la familia. No me quejo cuando me salen unas chiquitas, otras grandes. Es la huerta, es el trabajo de la huerta. Uno apunta a que salga todo grande.

Pero el productor que va a poner 200 metros cuadrados de  repollo quiere que salgan todos iguales, todos grandes. Y si, la semilla industrial te da esa efectividad, salen todas;  después también pasa mucho con las veterinarias que  (no estoy demonizando ni a las veterinarias ni a las semillas) pero compran una lata de  un kilo de semillas y tardan varios años en venderlas. Entonces, cada año va perdiendo el poder germinativo, cada día van germinando menos. Entonces, a veces, pensamos que esas semillas son malas. Y no…, son viejas. Ha pasado de ver acá, en una veterinaria del pueblo, que tenía las semillas exhibidas en una vidriera que le daba el sol de la tarde. Entonces las semillas estaban “cocinándose al sol toda la tarde”. Y las semillas para conservarlas bien necesitan estar en un lugar fresco, oscuro, sin humedad. Y esas se estaban cocinando. Esas semillas no las compro porque van a brotar menos. No es que son malas.

Después también está el tema de cómo uno trata esa semilla una vez que las recibe, porque cuando uno falla lo primero que se le ocurre es culpar a la semilla. Con tantos años de experiencia es lo que más escucho “No, la semilla era mala, no me salió”. Y le echamos la culpa porque no se puede defender. Ese es el tema de la pobre semilla. No se puede defender. “Y culpa mía no fue”, porque  uno nunca tiene la culpa.

Y es como la tratás. Si me hablás de la zanahoria recién, es un cultivo bastante fino, sobre todo el primer tiempo hay que estarle bastante encima. Si no le ponés pila vas a fracasar. En la Patagonia es muy importante la época de siembra, no hay que esquivarle a la época de siembra porque los meses de calor son pocos, hay que aprovecharlos. Hace muchos años conformamos un grupo de cuidadores de semillas que después se fue diluyendo y quedamos poquitos produciendo. Lo bueno que salió de ese grupo es poder escribir y pensar una ordenanza y gente del grupo se ocupó de llevar a unos municipios para que puedan hacer la ordenanza y se aprobó fácilmente.   

Yo no vendo verduras, la verdad que todo es pensado para la familia, para tener más, para tener comida fresca en el invierno. Sobre todo en la Patagonia que se piensa pongo las cosas en el verano: son acelgas, lechuga, papas, cebollas, pongo en el invernáculo unos tomates, y en marzo cierro todo y chau.

Pero está visto que en el invierno se pueden tener un montón de verduras que laburamos en la primavera anterior y que siguen. Y si… claro, yo te cuento que antes de tener huerta, el sábado veníamos al pueblo y traíamos la lista de lo que íbamos a comer la semana siguiente y veníamos y hacíamos las compras. Y una vez que empezamos a producir, esa lista ya no existía tanto y solo comprábamos yerba, azúcar, aceite y esas cosas que uno no produce. La cosa cambia mucho tanto a nivel calidad de lo que uno come como económico. La comida está cada día más cara y cuesta. Así que si uno la tiene en casa y va poniendo conciencia en la huerta, comés, y comés un montón.

En mi casa  a la hora de comer se mira la huerta. A veces el plato tiene un ingrediente de la huerta y, a veces, es completo, es variado y todo sale de la huerta. Uno milita eso: poder producir tu comida para tener que salir a trabajar afuera  lo menos posible. Pero, ahí vamos, tratando de contar a la gente siempre esto.

 

Podés encontrar a Maxi y a .muches  otres productorxs de semillas en la Feria Franca de El Bolson los sábados de 10 a 14 horas.