El Bolsón (ANPP).- Editorial:
LO QUE LA NIEVE NOS DEJÓ
El
jueves 15 nevó en la comarca, cayeron en el pueblo algo así como 35 cm
de nieve, y, en las zonas aledañas, más de 50.
Bellos paisajes, cientos de muñecos de nieve, niñxs jugando por todos
lados.
Nevó en el Bolsón.
Más de dos terceras partes de la población quedó desde el jueves por la
tarde/noche sin luz, contando el pueblo y los alrededores.
Muchos quedaron sin provisión de gas, las cañerías se congelaron, no
hubo madera suficiente para calentar hogares, ni gente con posibilidad
económica de comprarla.
El domingo 18 por la tarde se restableció
la luz en la mayoría de las zonas.
Varios días después se terminó de derretir la nieve que aún quedaba,
como resabio de la nevada histórica.
La nieve no dejó sólo muñecos, mocos y tos. Sino, que dejó al
descubierto la falta de infraestructura e inversión. Evidenció que
EDERSA hace años que no realiza controles, ni arreglos básicos. Que
algunos funcionarios vinculados por intereses económicos y políticos
aprovecharon la situación ( creada o permitida) para solicitar la ayuda
del tío Sam. Ese que rompió todo, dejando zanjas y caminos desechos para
enterrar su cable, y que quiere conectarse ilegalmente para poder
terminar con su plan: poder no dar energía, sino chupar la del circuito
urbano para llevarla a donde quiere instalar su nueva empresa.
Que la falta de bocas de gas, o gas líquido para alimentar casas de
familia, no es directamente proporcional a la falta de gas para los
complejos turísticos, eso también se constató, ya que las clases fueron
suspendidas, no por falta de luz, ni por destrozos que podrían haberse
producido, sino para ahorrar gas por la falta de presión. Pero no hubo
medidas que obligará a bajar los consumos de gas a los emprendimientos
turísticos. Suena lógico, ¿no?, Niños sin gas, empresas con gas. Total,
¿Qué producen los niños?
Con las escuelas, maternales y jardines cerrados, muchos niñxs quedaron
sin un desayuno y una comida diaria. Alimentos que provee el Estado, en
base a menús que elaboran nutricionistas y que intentan asegurar un
mínimo de alimentos que aporten la mayor cantidad posible de vitaminas,
proteínas y minerales necesarios en la alimentación.
Con los
comedores cerrados much@s no tuvieron esa comida...
La gente se organizó, entre vecinos, entre organizaciones, juntaron
abrigos, armaron ollas populares, llevaron alimentos a los centros
comunitarios, para poder resolver lo inmediato que el Estado ausente no
pudo (quien dice "pudo" puede querer decir "quiso"...) resolver.
Mencionamos
esto, porque no necesariamente las situaciones que el Estado define
como urgente son las mismas que nosotros u otros evaluamos como básicas
para resolver.
La nieve se fue y dejó al descubierto que las promesas de campaña fueron
eso, promesas. Y que este Estado municipal está gobernado por sujetos
que están más preocupados por la fachada de la casa del intendente que
por la emergencia social.
Por otro lado, muestra una vez más la farsa de un supuesto Bolsón
invernal que quieren vender como turístico, con un centro de esquí que
ni se sabe cuándo abre, aunque supuestamente según el acuerdo
intendencia-Laderas debía prestar servicios todo el año, haya o no haya
nieve. Si uno se da una vueltita por ahí lo encuentra bastante
abandonado.
Entonces, lo de la nieve tan esperada que
supuestamente traería muchos turistas y en consecuencia más trabajo, es
una falacia.
Los gobernantes con su cara de publicidad vacía, alegres de nada, o
serios de supuesta preocupación, no han podido dar soluciones porque se
llega a estas situaciones por su única responsabilidad. Porque creen que
llegan al gobierno para hacer acuerdos con los empresarios y no para
crear políticas sociales. Por más cara sonriente, si no son parte de la
solución, son parte del problema.
La nieve cubrió todo con su
blanca belleza, en este nuevo ciclo de la naturaleza que comienza con el
solsticio de invierno. Agua pura para mojar la tierra que viene
sedienta de ella. Bienvenida sea, igual para desarmar las falacias, y
humedecer las semillas bajo la hojarasca.