01:30 15/11/2012 Ordenaron investigar al empresario por decir que defenderían Hidden Lake "con el Winchester en la cintura".
VIEDMA (AV).- La Cámara del Crimen revocó el sobreseimiento del empresario inmobiliario Nicolás Van Ditmar, vinculado al magnate inglés Joe Lewis, en una causa en la que se le imputa haber proferido amenazas al expresar ante los medios que defendería la propiedad privada "con el Winchester en la cintura, con sangre si hace falta".El juez Guillermo Bustamante, el 29 de mayo de este año, dictó el sobreseimiento total en favor de Van Ditmar, lo que fue apelado por la fiscal Daniela Zágari.
Este martes, la Cámara que integran Pablo Estrabou, Jorge Bustamante y Francisco Cerdera, con el voto rector de este último, resolvió hacer lugar al recurso deducido por la agente fiscal revocando el auto interlocutorio del juez de Instrucción, que ahora debería apartarse para que el expediente recaiga en otras manos y el hecho vuelva a ser investigado.
Cerdera, con la adhesión de los dos restantes jueces, manifestó que "contrariamente a lo sostenido por el a quo –el juez de Instrucción– entiendo que los elementos obrantes en la causa permiten ... tener por comprobado prima facie tanto la materialidad del hecho que le fuera intimado al imputado como su autoría en el mismo".
De esta manera establecieron que existen elementos como para poder avanzar en la investigación para determinar si existió, por parte del empresario, ánimo de infundir temor en la población mediante la amenaza de la comisión de un delito común.
Las declaraciones de Van Ditmar fueron hechas el 28 de marzo de 2011 en la plaza San Martín de Viedma, rodeado de empleados de la firma Hidden Lake, perteneciente al magnate inglés Joe Lewis.
Allí dijo que "vinimos acá para que nos escuchen. La Justicia va un día o dos y pretenden tomar decisiones. Acá están los vecinos, pobladores, los empleados y la empresa, todos para que nos escuchen... Si este fallo va a ser como lo que quieren hacer, que tranquilicen ellos a las 200 familias".
Y finalizó: "acá algunos legisladores o políticos oportunistas instalaron que un ingles privatizó un lago y se quiere robar el agua, lo que es imposible. Esto no es de un inglés sino de las 200 familias que lo trabajamos. Si el inglés pierde su privacidad o la preservación del recurso natural, es muy fácil, levanta campamento y los que vamos a quedar en la calle somos nosotros. La propiedad privada se viene avasallando más y más, vamos a resistir y si hace falta como los antiguos pobladores con el Winchester en la cintura, no van a entrar más. La justicia por mano propia muchas veces es el camino, entonces la propiedad privada todos los empleados la vamos a pelear con sangre si hace falta"
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