El Bolsón (ANPP).-Compartimos nota de opinión:
Por Pasqualina Curcio para Aporrea
22-01-2019
¿Se
 habrán hecho esta pregunta quienes afirman que Nicolás Maduro es un 
dictador, un usurpador y que el período 2019-2025 carece de legitimidad?
 ¿O solo repiten lo que escuchan?
Comenzaron
 a posicionar esta matriz de opinión los 12 países reunidos en Lima. Se 
lee en su comunicado: “…el proceso electoral llevado a cabo en Venezuela
 el 20 de mayo de 2018 carece de legitimidad por no haber contado con la
 participación de todos los actores políticos venezolanos, ni con la 
presencia de observadores internacionales independientes, ni con las 
garantías y estándares internacionales necesarios para un proceso libre,
 justo y transparente.” 
Los
 dirigentes de la oposición venezolana, nos referimos a la no 
democrática, repiten sin descanso, y por supuesto sin argumentación, que
 Maduro es un usurpador. 
En
 un acto de desespero, el propio Vicepresidente de los EEUU, Mike Pence 
al verse obligado a convocar personalmente la marcha opositora para el 
23 de enero, debido a la incompetencia de la dirigencia opositora, 
insistió y repitió que el Presidente Nicolás Maduro es un dictador, 
usurpador e ilegítimo. 
La estrategia es clara, repetir mil veces la mentira para convertirla en verdad.
Desmontemos la mentira:
1. Hubo
 elecciones presidenciales. Se realizaron el 20 de mayo de 2018, es 
decir, antes del 10 de enero de 2019, momento en el que de acuerdo con 
los artículos 230 y 231 de la Constitución se vence el período 
presidencial 2013-2019. Se estuviese violando la Constitución si las 
elecciones se hubiesen realizado después del 10 de enero de 2019, o peor
 aún que no se hubiesen realizado.
2. Fue
 la oposición venezolana la que solicitó el adelanto de las elecciones. 
Se realizaron en mayo y no en diciembre, como tradicionalmente se hacía,
 porque fue la oposición la que solicitó, en el marco del diálogo en 
República Dominicana, que se efectuasen el primer trimestre del 2018.
3. En
 Venezuela el voto es un derecho, no es un deber. Quienes de manera 
libre, aunque influenciados por algunas organizaciones políticas no 
democráticas que llamaron a la abstención, decidieron no asistir a votar
 están en su pleno derecho, pero en lo absoluto ilegitima el proceso 
electoral, más aún cuando eso implicaría desconocer e irrespetar a los 
9.389.056 que si decidieron votar y ejercieron democráticamente su 
derecho al sufragio.
4. Participaron
 16 partidos políticos en la contienda electoral (PSUV), (MSV), 
(Tupamaro), (UPV), (Podemos), (PPT), (ORA), (MPAC), (MEP), (PCV), (AP), 
(MAS) (Copei) Esperanza por el Cambio, (UPP89). En Venezuela no es 
obligatorio que todos los partidos políticos participen en los procesos 
electorales. Están en su pleno derecho de decidir si participan o no. 
Justamente porque nuestro sistema es democrático. El hecho de que 3 
partidos (AD, VP y PJ) decidieron libremente no participar, no ilegitima
 el proceso electoral. 
5. Se
 postularon 6 candidatos: Nicolás Maduro, Henri Falcón, Javier Bertucci,
 Reinaldo Quijada, Francisco Visconti Osorio y Luis Alejandro Ratti (los
 dos últimos decidieron retirarse).
6. Maduro
 ganó con un amplio margen, obtuvo 6.248.864 de votos, el 67,84%; le 
siguieron Henri Falcón con 1.927.958, el 20,93%; Javier Bertucci con 
1.015.895, 10,82% y Reinaldo Quijada quien obtuvo 36.246 votos, el 0,39%
 del total. La diferencia entre Maduro y Falcón fue 46,91 puntos 
porcentuales. 
7. Acompañaron
 el proceso electoral unas 150 personas, entre ellas 14 comisiones 
electorales de 8 países; 2 misiones técnicas electorales; 18 periodistas
 de distintas partes del mundo; 1 Europarlamentario y 1 delegación 
técnico-electoral de la Central Electoral de Rusia.
8. Las
 elecciones se realizaron con el mismo sistema electoral empleado en las
 elecciones parlamentarias de diciembre de 2015, en las cuales resultó 
ganadora la oposición venezolana. Sistema que es automatizado y sometido
 a auditorías antes, durante y después de los comicios. Sistema que 
garantiza los principios de “un elector, un voto” porque solo con la 
huella dactilar se desbloquea la máquina de votación; y garantiza el 
“secreto del voto”.
9. Se
 realizaron 18 auditorías al sistema automatizado. Los representantes 
del candidato Henri Falcón participaron en las 18 y suscribieron las 
actas en las que manifiestan su conformidad con el sistema electoral. 
Las auditorías son públicas y televisadas en vivo por el canal del 
Consejo Nacional Electoral. Una vez realizadas las auditorías, el 
sistema se bloquea y la única manera de acceder nuevamente es con la 
introducción simultánea de los códigos secretos que tiene cada 
organización política.
10. Ninguno
 de los candidatos que participó en el proceso electoral impugnó los 
resultados. No hay pruebas de fraude,  no presentaron ninguna evidencia o
 denuncia concreta de fraude.
Las
 elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018 fueron libres, 
transparentes, confiables, seguras y ajustadas a la Constitución y a las
 leyes a pesar del llamado antidemocrático a la abstención por parte de 
un sector de la oposición. 
Son
 otros los que pretenden usurpar el cargo de Presidente de la República 
con el argumento de un supuesto vacío de poder, figura que no está 
contemplada en nuestra Constitución y la instauración de un “gobierno de
 transición”, figura tampoco prevista en la Carta Magna. Por si fuera 
poco, pretenden ejercer el poder fuera de nuestras fronteras violando el
 artículo 18 de la Constitución que establece que es Caracas la sede de 
los poderes públicos.
Así las cosas, son otros los usurpadores, ilegítimos y antidemocráticos. 
Es
 ilegítimo y constituye un intento de usurpación el que algunos sectores
 de la oposición pretendan sostenerse en el apoyo de sectores 
extranjeros  provenientes de gobiernos imperialistas para ejercer una 
autoridad que ni el pueblo ni la Constitución les da.