Es difícil ponerse a escribir cuando somos bombardeados desde
tantos frentes. Se hace difícil elegir sobre qué escribir, si sobre el paro
docente y la campaña de trolls invitando a los buenos profesionales ciudadanos
a sumarse a un “voluntariado docente”; los nuevos y viejos casos de corrupción
en los que está implicado Macri y su familia (Avianca por ejemplo); la alabanza
de Macri a la monarquía española y al dictador Franco en su afable paseo por
España; el nuevo proyecto de ley que presenta el gobierno macrista pidiendo bajar
la edad de imputabilidad a 14 años (Sí a 14 años); el contexto de la situación
económica en donde todos los días hay despedidos, suspendidos, vacacionados de
diferentes fábricas, empresas, etc (pero eso sí, las notebooks salen más
baratas).
Tal como
se proponen desde el gobierno, atacarnos desde múltiples frentes, implica no
poder estar en todos los frentes. Tampoco en un medio popular, comunitario y alternativo
se puede hablar de todo al mismo tiempo, y tampoco de eso trata, pero de alguna
manera lo hacemos, el tema es dónde ponemos el foco y el análisis.
El
desafío es entonces entender que además de todo este bombardeo del nuevo
neoliberalismo recargado, desde nuestros sectores debemos seguir respondiendo,
desarmando los falsos sentidos comunes creados para colonizarlos, a la vez
luchando, y entendiendo que tenemos que seguir construyendo como hormiguitas un
nuevo movimiento social capaz de ir más allá de la disputa de poder al Estado y
sus corporaciones, que ya eso en sí mismo es mucho, creando conciencia y nuevas
prácticas políticas emancipadoras.
En ese
sentido podemos hablar de los próximos paros y movilizaciones, tanto a nivel
nacional como internacional, con el 8 de Marzo día internacional de las mujeres
y un paro histórico que quiere seguir denunciando y visisbilizando al
patriarcado como mal de muchos males que sobre todo padecemos las mujeres; los
carnavales populares que se dan en estos días como festejo-protesta a lo largo
de toda América Latina, donde bailan y cantan esos pibes y pibas a los que
Macri quiere meter en cana; las luchas de los trabadores y las trabajadoras que
no dan el brazo a torcer ante el cierre de sus lugares de trabajo.
En esa
mezcolanza de frentes y realidades estamos inmersos, conscientes y luchando.
Entre tanto bombardeo real, tanta mentira y desastre, siempre el Pueblo sabe
que la lucha y la alegría es la que vale.