El Bolsón (ANPP).- Reproducimos la respuesta de Manuel Langbhen, ante las falsas y malintencionadas acusaciones realizadas hacia su persona en facebook. Compartimos y nos solidarizamos:
Yo soy Manuel Langbehn, DNI 24 314 862
El
 viernes 11 de agosto, hubo una gran marcha en El Bolsón. Se reclamó por
 la desaparición forzada de Santiago Maldonado, desaparición de la cual 
son responsables el gobierno nacional y los tres escuadrones de 
gendarmería de la región. Es lamentable, estar en democracia, y que las 
armas que el pueblo paga para garantizar la paz social, se vuelvan en 
contra del propio pueblo.
Por eso la marcha fue multitudinaria. Unas 3000 personas salieron a la calle.
Yo
 no lo hice. Y por cierto que siento alguna culpa por haberme quedado en
 casa. Estaba trabajando, mi compañera también, y la realidad es que se 
nos pasó la marcha. Y me da vergüenza tener que decirlo. Santiago 
Maldonado desaparecido, y la familia en casa…
Pero
 el viernes 11, además de la inmensa solidaridad que el pueblo de El 
Bolsón mostró hacia Santiago Maldonado, ocurrieron, hay que decirlo, 
cosas lamentables.
No 
deberían ser el centro de la cuestión. De un lado tenemos un 
desaparecido, del otro, hechos mezquinos, actos enanos, que tapan, por 
su presencia en los medios y las redes, la inmensa monstruosidad de 
haber desaparecido las fuerzas de seguridad, a una persona en 
democracia.
De
 un lado, la monstruosidad monumental. Hacer uso del poder institucional
 de las fuerzas de seguridad para ocultar un crimen horrendo.
Del
 otro, unos inadaptados del tamaño de un dedal, pintaron con aerosol las
 placas conmemorativas que recuerdan a los excombatientes de Malvinas.
El casi seguro asesinato de Santiago Maldonado, generó 3000 respuestas.
Pero resulta que sdentro de estos 3000, unos quince o veinte ineptos trataron de prender fuego una bandera.
Una
 desaparición, una marcha de 3000 personas, y parece que hay que perder 
el tiempo con unos 15 cerebros en escabeche que se dedicaron a faltar el
 respeto a los ex combatientes y a la enseña patria.
Yo no acuerdo.
Me parece una barbaridad faltar el respeto.
Pero
 vuelvo a decir: no acuerdo. Dice mi viejo, que pensar es la facultad de
 distinguir lo importante de lo superfluo. Aún sin estar de acuerdo con 
estas faltas de respeto, no se puede ni por casualidad ponerlas a la 
altura de un crimen perpetrado por las fuerzas institucionales.
Pero
 estos actos mezquinos, acaban, por una razón del destino, y por el 
capricho de un desconocido, por volverse insoslayables para mi. Ayer me 
llama un amigo, y me dice que aparece mi foto, nombre y número de DNI en
 facebook, y que me culpan de haber quemado la bandera argentina y de 
haber pintado las placas conmemorativas que honran a los veteranos. Yo 
no conozco quién publicó esto en facebook, pero se viralizó, fue más de 
3000 veces compartido. Tampoco se con qué propósito fue publicado. La 
realidad es que están mis datos mezclados de diversas épocas de mi vida,
 la dirección de mi infancia, un cuil que utilicé entre los 18 y los 21 
años, un cumpleaños y edad equivocados, y la foto de mi DNI actual, en 
buena calidad, no sacada del borroso padrón electoral, ni con la 
estrella típica del Documento, sino la foto digital, tal como la captó 
el registro civil el día de la renovación. ¿Si tiene acceso a la foto de
 mi DNI actual, porqué consigna una dirección y edad que son o falsas o 
anticuadas? ¿Acaso intenta confundir, para que no se sepa de donde robó 
la imagen de mi cara, cuando claramente es la de mi última actualización
 del DNI?
Por otra parte,
 junto a mis datos y foto, la publicación recuadra una figura que no se 
me parece, de una persona que está junto al concejal Scandizzo, como si 
quisiera indicar que ese soy yo. Detrás del desconocido y del concejal, 
se despliega la bandera de la Feria Regional, feria a la cual representé
 en tantas ocasiones. La persona del recuadro, que en lo personal 
desconozco, apenas si puede tener un parecido conmigo, básicamente, los 
dos tenemos barba, ojos y cabeza, pero la verdad que ni primos. Si uno 
lo piensa, existe otra incongruencia: la foto del desconocido, mira de 
costado al concejal, mientras este está sacando un foto: no hay rastros 
de vandalismo, de aerosoles o banderas. Pero el tipo no soy yo. Además 
no pinta ni quema.
Entonces cabe la pregunta: ¿Qué fin persigue quién fabricó esta publicación?
Yo
 soy Manuel Langbehn, DNI 24 314 862… Pero la gente no me conoce por ese
 número, en todo caso me conoce por mi nombre, o sencillamente por manu,
 y si solo fuera por mi, quizás me hubiera quedado nuevamente en casa, y
 no diría nada. Pero uno tiene familia, amigos, una trayectoria de 
trabajo que cuidar dentro de la Feria Regional, y en lo que hace a los 
medios, una voz en dentro de una de las organizaciones sociales más 
activas de la región, La Asamblea en Defensa del Agua y la Tierra.
Y no puedo pensar que estas son cosas diferentes.
¿Quién
 se molestaría en atacar a un ceramista y productor que vive perdido en 
Mallín Ahogado? ¿De qué serviría confundir a los vecinos, si solo se 
tratase de mi, como persona privada? Evidentemente se busca otra cosa. 
Se quiere confundir, se quiere difamar, se quiere meter miedo. Porque no
 nos olvidemos que la marcha fue en protesta por una desaparición 
forzada. Este es el contexto. Y yo soy manu, de la Feria Regional, de la
 ADAT, soy uno de los voceros de uno de los reclamos más largos y mejor 
articulados de la región.
Trabajo por la comprensión.
Transmito
 la palabra. Trato junto a un gran número de vecinos y vecinas de 
agrandar la democracia, de darle a los problemas que nos rodean la 
profundidad y contenido que tienen. Trabajo para que los problemas nos 
se simplifiquen, para que dentro de lo posible podamos elegir con todos 
los elementos de discusión sobre la mesa. La gente que me conoce, la que
 me escuchó en los medios, lo sabe. Estoy del lado de los que buscan 
claridad en las decisiones que tomamos como sociedad, en lugar de 
aceptar que nos dividan en partidos, en buenos y malos, en golpeadores y
 golpeados, en ganadores y perdedores.
Me
 sería imposible dedicarme a ultrajar las placas de los combatientes. No
 quemaría una bandera argentina. No soy el de la foto del recuadro, ni 
el de la foto está quemando o pintando nada, y me pregunto para que se 
me pone en el lugar del vándalo, para qué se ataca a través mio a la 
ADAT y a la Feria Regional. Acaso añoran los tiempos en que los 
gobiernos de facto callaban a la gente? Acaso no es bueno que la 
sociedad genere sus acuerdos de forma hablada y a través de los medios, 
como lo soñaron Sarmiento y Alberdi? Acaso la palabra en los medios no 
es el tercer pilar de la democracia? Y acaso no somos los miembros de la
 Feria Regional el único atractivo turístico en Patagonia, que en lugar 
de mostrar paisajes, ofrece cultura? Comemos y damos de comer con los 
frutos que producen nuestras manos, hacemos circular la palabra, amamos 
la paz, la democracia, quisiéramos una democracia más democrática, más 
participativa, dónde crezca la palabra, con más voces, con más 
participación, en lugar del miedo y las acusaciones taimadas.
Por
 último, si lo compartiste en tu facebook, o lo mandaste por Whatsup, si
 te llegó, si te llega, rectificalo, reenviá diciendo lo que cualquiera 
puede ver, que fue un error y una mentira. Haceme ese favor, esa 
gauchada, y quejate conmigo de esta difamación, que no tiene nada de 
patriota, porque la mentira no construye ni tiene patria.