miércoles, 13 de noviembre de 2013

POR LA ABSOLUCIÓN DE LOS PETROLEROS DE LAS HERAS

Buenos Aires, 12 de noviembre (Agencia Walsh).-“Que todos estemos en esa marcha (15-11) para pedir nuestra libertad y la disolución del tribunal que quiere condenarnos por salir a pelear contra el impuesto a las ganancias y por trabajo digno”.- Decía Cortes en la reunión del comité de apoyo por la absolución de los petroleros de Las Heras. .” No quiero, venir a mostrar debilidad, pero a veces se me cae una lagrima de tanta impotencia que uno siente, de que a un trabajador por salir a pelear contra el impuesto a las ganancias se haya comido tres años en cana y que lo hayan reventado a palos hasta sacarle la vista”. Y agregaba: “Quiero que lo sepan porque por ahí no se sabía o por ahí algunos se habían olvidado que en el 2006 fue una causa nacional e internacional, como lo está siendo ahora, la lucha por nosotros”. Intervención de Ramón Cortez en la reunión del comité de apoyo por la absolución de los petroleros de Las Heras el 9/11/2013 Buenas tardes para todos los compañeros que están en este momento. Para los que no me conocen yo soy Ramón Cortez. Soy uno de los imputados en la causa mal llamada Sayago, soy un trabajador que fue imputado en el 2006. Tres años privado de mi libertad, tres años y medio, torturado como en los mejores tiempos que algunos seguramente deben tener conocimiento. Quiero que lo sepan porque por ahí no se sabía o por ahí algunos se habían olvidado que en el 2006 fue una causa nacional e internacional, como lo está siendo ahora por la lucha de nosotros y que ustedes llevan adelante. También le agradecemos a toda la gente que se suma internacionalmente para pedir la absolución, disolución del tribunal videlista de la provincia de Santa Cruz que nos quiere condenar a una cadena perpetua no solamente una cadena perpetua para mi porque estoy acá sino para todos los que estamos en la causa. También ellos quieren que esta condena sea una condena ejemplar, es lo que dijo el fiscal de Las Heras Ariel Candia, dijo que quería una condena ejemplar, para que ni yo y ningún trabajador salga a pelear por sus derechos. El día 12 sabemos que podemos llegar a estar 25-30 años tras las rejas, pero sabemos que esta lucha de sacarnos a nosotros y sacar a los otros compañeros que están privados de la libertad, todos los presos, los más de 6500 trabajadores procesados, también la gente de Corral de Bustos. Yo creo que la lucha hay que llevarla a la calle para que este 15 de noviembre no marchemos 1000 que marchemos de 5000 a 20000, que todos estemos en esa marcha para pedir la libertad de los trabajadores y la disolución del tribunal que quiere condenar a los trabajadores por salir a pelear contra el impuesto a las ganancias y por trabajo digno de todo trabajador. No quiero ponerme un poco débil, lo decía anoche en la Plaza de Mayo, no quiero venir a mostrar debilidad , pero a veces se me cae una lagrima de tanta impotencia que uno siente de que a un trabajador por salir a pelear contra el impuesto a las ganancias se haya comido tres años en cana y que lo hayan reventado a palos hasta sacarle la vista hasta dejarle secuelas pero no solamente física sino psicológica tanto a mi como a mi familia como a a la familia de todos trabajadores que van presos y la policía se encarga de reventarlos a palos. Nosotros muchas veces estando presos en Puerto Deseado, yo estuve en Puerto Deseado, en el 2006 nos trajeron desde las doce de la noche hasta las cuatro de la mañana vinimos cobrando en una trafic, pero de la peor manera con precinto y con la piernas cruzadas y nos dieron hasta que ya no podíamos ni respirar, era tanto que me hice el muerto para que no me pegaran mas, ya no quería vivir más, pedía por dios que esa trafic volcara, que pasara algo,porque prefería que me maten a que me sigan golpeando de esa manera como me estaba golpeando la policía. Y esto hay gente que no lo sabía o se habían enterado por los diarios o noticieros, que mejor que yo para contarles lo que viví y que esto también les paso a los compañeros que también fueron presos en el 2006. Muchísimas gracias por haberme escuchado.