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miércoles, 20 de mayo de 2009

CONDUCCIONES DE UNTER SE PROPONEN BUROCRATIZAR EL SINDICATO

El Bolsón (ANPP).- El estatuto que rige el funcionamiento de la Unión de Trabajadores de la Educación de Río Negro (Unter) podría ser modificado y tornar el funcionamiento de la entidad hacia un modelo burocrático, a partir del próximo congreso extraordinario de junio.
Eso es lo que se desprende de las sugerencias de reforma planteadas por las agrupaciones Azul-Arancibia y Celeste, facciones mayoritarias en el sindicato.
En contradicción con lo que se declama en cuanto a que “la reforma actual debería apuntar a garantizar y generar más participación, más democracia y más autonomía”, el aparato hegemónico intenta establecer que los afiliados que participen de los congresos sólo puedan ser aquellos elegidos “por lista” en relación directa con el porcentaje de votos que hayan obtenido en cada seccional.
Estos delegados, al igual que todos los cargos de la Unter, tanto a nivel provincial como local, serían así elegidos “cada tres años” en una única elección general.
Hasta ahora, los congresales se eligen de manera directa en cada asamblea, y este carácter democrático de su funcionamiento se vería así cercenado, en caso de aprobarse tal propuesta.

Respetar las instituciones ante todo (incluso ante los derechos laborales)
Otra cuestión que apunta a fortalecer la burocracia es la insistencia en enmarcar las acciones de acuerdo a las convenciones colectivas de trabajo, “lo que limitaría aún más la pretendida autonomía que se declama desde la fundamentación de este proyecto de reforma”, explicaron militantes independientes de El Bolsón.
Las medidas de acción directa, por otro lado, se podrían levantar con mayoría simple y no con los dos tercios requeridos hasta ahora.
Es fácil predecir que esto redundaría en un aumento de posibilidades por parte de las dirigencias para acabar con conflictos emanados desde las bases.
Aún más evidente es si se recuerdan los lamentables métodos (cambios de mandatos, convocatoria de “carneros” para votar en asambleas, hostigamiento a militantes disidentes, etc.) que ya fueron capaces de usar algunas conducciones para acabar con la histórica huelga docente de principios de año.

Vigilar y castigar
Por otro lado, militantes disidentes observaron que la propuesta de crear una Secretaría de Organización puede convertirse en “un estamento de control y vigilancia dentro del sindicato para escarmentar a seccionales, agrupaciones y afiliados díscolos”.
Tampoco se ve con buenos ojos la intención de instrumentar “planillas de consulta” para temas que la conducción central del sindicato considere que hay que resolver de esa manera.
“Existen sobrados ejemplos en otros sindicatos de que mecanismos como la planilla de consulta, lejos de incentivar la militancia, ahuyentan el debate y propician un simulacro de participación que fortalece la pasividad y la actitud acrítica en nuestros compañeros”, habían advertido miembros de la agrupación Rojinegra el año pasado.

Cómo resignar un derecho
Una de las “iniciativas” más recientes es la sugerencia de crear un “fondo solidario", solventado mes a mes por los trabajadores afiliados, por descuento adicional al de la cuota sindical, para afrontar futuras huelgas.
“Es decir, en futuros conflictos no luchar por los descuentos”, criticó un integrante de la agrupación Tosco de Valle Medio, pues de hecho eso equivaldría a dar un aval institucional al escarmiento hacia los trabajadores a través del descuento por días de paro.

Consenso de pocos
Afiliados de Fiske Menuco han denunciado la restricción que cubrió la elaboración de las propuestas para la reforma del estatuto, lo cual ha redundado en que el proyecto de reforma responda a una parcialidad dirigente dentro del sindicato.
“Sólo se invitó a las agrupaciones que tenían representación provincial, dejando de lado a agrupaciones locales como la Rojinegra de El Bolsón, la Agustín Tosco de Choele Choel y la Violeta de Fiske Menuco –observaron-. Pero también se dejó afuera a la mayoría de los afiliados, que no están alineados con alguna agrupación.”
Este ofrecimiento para nada pluralista “fue aceptado sólo por la agrupación Celeste”, y así la única propuesta de reforma es la delineada por esa facción y la Azul-Arancibia.