El Bolsón (ANPP).- Según un despacho informativo de Periodismo Social, por día, trece chicos argentinos caen en las redes del turismo sexual. Las estadísticas pertenecen a la Policía Federal y el modus operandi siempre es el mismo: niños y adolescentes vulnerables, en situación de calle, son captados por adultos en plena vía pública, a cualquier hora del día y son llevados a hoteles de lujo y no tanto. Allí, a cambio de unos pocos pesos, son abusados sexualmente por turistas.
Fernando Mao, coordinador nacional de la Red Alto al Tráfico y la Trata de niños, niñas y adolescentes (Raat), explica: “Es un fenómeno multidimensional, ligado a la exclusión social, a la falta de salud, de educación, y de trabajo de los padres. También a la desintegración familiar, la mala distribución de la riqueza, negligencia estatal y al Estado que no se dispone a resarcir el daño”.
El informe alerta también sobre la expansión territorial de este delito. “Las zonas de Cataratas y de la Triple Frontera, en Misiones, siempre fueron consideradas 'aptas' para la práctica del turismo sexual infantil. ¿Las razones? Una mezcla peligrosa de pobreza, complicidad y ausencia de controles policiales. Pero en los últimos años se registró una expansión hacia otras provincias. Una de ellas es Neuquén, en la Patagonia Norte”.
Para concluir, el texto de Periodismo Social plantea la exigencia de una ineludible “acción de parte del Estado"
"Que dé una solución a las -siempre según estadísticas de organizaciones sociales- casi 400.000 personas que estarían siendo explotadas con fines sexuales y laborales en nuestro país. Sin dudas, un número que espanta. Una realidad que exige un compromiso urgente.”
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